UNA NUEVA HISTORIA... VEAMOS QUE TAL!

SAINT SEIYA PERTENECE A MASAMI KURUMADA A MI SOLO ME PERTENECE LA HISTORIA.

...Perjuicios...

La batalla contra Hades por fin había culminado, los caballeros de bronce habían dado hasta su último esfuerzo por librar a la tierra de una terrible oscuridad. Todos los Dioses olímpicos terminaron reconociendo todas y cada una de las acciones de los caballeros Atenienses, por ello la misma Diosa Athena ha pedido a los Dioses que le otorguen una oportunidad para vivir a todos los miembros de la Elite, una nueva oportunidad de defender a la tierra de quien ose irrumpir su tranquilidad. Dicha petición fue aceptada y así mismo los caballeros que perdieron su vida una vez, tuvieron la oportunidad de regresar de nuevo a la vida.

Star Hill

Ahora el Santuario era comandado por el ex caballero de Aries Shion, tal cual se lo había pedido la Athena de la era antigua en la que él era miembro de la Elite Dorada. Los doce caballeros dorados se encontraban en el recinto del patriarca, junto a la Diosa que juraron defender nuevamente, sin importar el riesgo de la muerte.

-Nuevamente tenemos la oportunidad de ver la luz del Sol, el brillo del cielo, sentir los abrazos del viento – recitaba el patriarca – He de estar agradecido eternamente con los Dioses que nos han dado la aprobación. Agradecerles a usted nuevamente por dar su vida por salvar la tierra, ayudando a salvar este mundo que nosotros amamos y que nuestra Diosa protectora Athena lo ama más que nada – hubo varios murmuros de aprobación. Athena sonreía viendo a los doce caballeros de Oro allí reunidos, además de contar con un nuevo caballero, Kanon. – Por otra parte quiero hacerles llegar mi grande orgullo, por aquellas almas que estando perdidas en el Infierno, aparecieron en el último momento para colaborar. Gracias Aioros, estabas perdido en la oscuridad pero al final del camino la encontraste.

-Es mi deber patriarca Shion – dijo con respeto el Sagitario

-Vaya – murmuro Saga, todos voltearon a verlo – Llegando a último momento y ser el héroe.

-¿Sucede algo Saga? – dijo Aioros mirando fríamente a su compañero

-Para nada – respondió el Géminis –

-Saga y Aioros por favor, no es el momento para disputas – repuso Shion mientras los dos dorados ya estaban cara a cara, los otros miembros de la Elite se fueron acercando a ellos, previendo lo que iba a suceder.

-Dime Aioros ¿Que tan difícil es encontrar el camino en el Infierno? – pregunto - ¿Si tu bien sabias donde estábamos.?

-No me cuestiones. No lo entenderías – defendió Aioros

-Que tan difícil puede ser estar en la tranquilidad de la muerte

-¿Tranquilidad? ¿Quién puede estar tranquilo cuando veía todo desde el Inframundo todo lo que sucedía aquí arriba? Destruiste el Santuario por completo. Llevando a la muerte a mucho de nosotros por tus ambiciones. Pusiste en peligro a todos ¿A eso llamas tranquilidad? ¿Cuándo no se tiene que hacer?

-Cuando tengas a un Dios jodiendote la vida y mente serás capaz de entenderme – se defendió Saga, acercándose lentamente a Aioros – A alguien que manipula tus pensamientos e Ideales, que es capaz de dominar tu lado bueno para lograr una ambición. Cuando entiendas lo que es ser usurpado, me entenderás

-No es Saga de Géminis el grandioso y poderoso entre los dorados? – dijo Aioros con sarcasmo mientras Saga frunció el ceño - ¿Por qué no lo resolviste? El único humano capaz de llegar al poder de Cronos, un titán. Pero no es capaz de luchar contra el propio Ares. Irónico

-Dime Aioros ¿Qué se siente estar muerto y no hacer nada? Ver todo en la comodidad del Infierno, porque Hades tuvo la bondad de ponerte en los Bienaventurados

-¿Tienes idea de lo que pase en el Infierno mientras la tierra y Athena corrían peligro? O que querías ¿Qué vendiera mi alma para traicionar a Athena?

-Hey – repusieron varios de la orden, inclusive Shion.

-Aioros basta – Dijo Aioria mientras se colocaba frente a su hermano. – Esto no va a llegar…

-¿Quién te ha dicho que fue traición? – pregunto Saga con reproche mientras se acercaba más a Aioros furioso– Supongo que todos aquellos que no conocieron nuestras intenciones. ¿Tan inocente eres de creer en todo el mundo?

-¡CREI EN TI! – grito Aioros – Y terminaste matándome, acusándome de traidor. Cuando el Traidor eras tú. Por vender tu Alma a Hades, por atentar contra la vida de Athena en dos oportunidades. Juraste fidelidad pero no lo eres.

-Cuidado con tus palabras – Kanon y Milo sujetaban a Saga, mientras Aioria y Shaka a Aioros. Athena se encontraba custodiada por Shura, aunque la Diosa no pudo aguantar y sus lágrimas salieron al ver a dos de los más grandes de la Orden a punto de iniciar una batalla.

-¿Qué dije? Te sentiste ofendido– comento sonriente Aioros, mientras luchaba por salir del agarre de su hermano y Shaka – Cada ladrón juzga por su condición, ¿No es así Saga?

-Ahora sí! – exclamo Saga librándose del agarre de Kanon y Milo, Aioros también logró zafarse. El viento se volvió agresivo en la Sala patriarcal, Dhoko corrió para proteger a Athena, la elite dorada tuvo que cubrirse con sus propios brazos, una ráfagas de truenos dorados envolvió a Aioros, su cosmos se volvió agresivo, respiraba con agitación, por otra parte Saga fue envuelto entre millones de Galaxias. Los movimientos fueron rápidos, solo se lograba el sonido metálica de las armaduras chocar, algunos gemidos llenos de dolor, respiraciones agitadas. Los dorados intentaban seguir aquella batalla, sin embargo el fuerte viento que los iba arrastrando se los impedía.

-Debemos frenar esto – comento Shura a sus compañeros – van a volar todo el recinto

-¿Cómo lo vamos a hacer? – pregunto Afrodita – Ni siquiera podemos seguirlos –

-Hagamos algo pero ¡ya! – grito Aldebarán. Camus, DM y Mu intentaron entrar en el campo de batalla del Aioros y Saga, pero así mismo fueron expulsados.

-¡BASTA! – Athena golpeo con firmeza su báculo contra el piso, una ola de poder muy agresivo hizo acabar toda hostilidad, la batalla entre Aioros y Saga fue interrumpida por el poder de la Diosa. Los caballeros combatientes cayeron en el piso, llenos de heridas. DM y Afrodita corrieron a ayudar a Saga a colocarse de pie, mientras Aioria y Shaka hicieron lo mismo por Aioros, los otros caballeros se pusieron en el medio de ambos para que se les hiciera imposible librar otra batalla.

-Señorita Athena – murmuro Afrodita al ver la Diosa tan alterada. Dhoko corrió al lado de la Diosa para poder sujetarla por la cintura ya que aquel poder la había debilitado levemente., mientras Shion la miraba con preocupación. Athena estaba llena de lágrimas.

-Es suficiente Saga, también tu Aioros – razono Camus. Los caballeros mencionados miraron a la Diosa con preocupación. Ambos nuevamente estaban de pie

–Ojala hubieras pasado por lo que yo pase para que entendieras al menos un poco lo que yo viví – dijo Saga

-Tu no hubieras soportado estar en mi posición – respondió Aioros. Dhoko y Shion cruzaron miradas

-¿Ah no? ¿Tú crees que después de los años que fui prisionero en mi propio cuerpo no me harían soportar tu estado como de muerto? Porque realmente dudo que sufrieras en la isla de los Bienaventurados.

-No sabes lo difícil que es ser prisionero de…

-¡BASTA! – volvió a gritar la Diosa. Aioros y Saga hicieron silencio de inmediato – Basta Aioros – el arquero vio a la Diosa llena de lágrimas, sintiéndose apenado – Basta Saga, por favor – Saga asintió brevemente cuando vio los ojos llenos de dolor y sufrimiento de la Diosa – Deben Sanar esas discordias que se tienen. Deben aprender a convivir nuevamente, pero si no son capaces de perdonar entonces estarán fuera de servicio por un tiempo

-¿Cómo? – Preguntaron los dos –

- No se juzga a un libro por su portada, si no por su contenido – acoto Dhoko

-Tienen 24 horas – dijo Shion – Ese será el castigo que les impongo por llegar a los extremos. Pueden retirarse a sus respectivas casas – Saga salió rápidamente de la habitación, custodiado por su hermano y otros dorados, como Camus, Milo mientras Aioros fue custodiado por su Hermano, Shura y Shaka. El resto de la elite dorada se fueron a sus respectivas casas.

Casa de Sagitario

Aioros se despojó de su Armadura, guardándola en la Pandora Box. Aioria y Shura miraron con preocupación las heridas que tenía el arquero.

-No se preocupen por mí – dijo el, al notar las miradas de sus compañeros – Voy a Ducharme, así se sanaran esas heridas. No se preocupen

-Aioros – hablo Shaka, todos prestaron atención inmediatamente – Reflexiona de verdad, piensa con mente fría sobre la situación de Saga

-No me digas que lo estas defendiendo – acoto Aioros defensivo

-En muchos aspectos estoy y estuve de acuerdo en su manera de pensar – afirmo Shaka – Sin embargo piensa más allá de la situación de que fue un usurpador del santuario

-Que quieres decir?

-Piensa en cómo nos vimos afectados todos, inclusive el mismo con tu muerte. A lo que tuvo que someterse Shura y Aioria principalmente.

-¿Cómo Saga se pudo ver afectado con mi muerte? El mismo me mando a Matar Shaka.

-No seré yo quien te de esa respuesta – dijo el Virgo abandonando la casa de Sagitario para dirigirse a la suya. Aioria y Shura se limitaron a comentar. Solo se quedaron en silencio mientras Aioros tomaba una ducha.

Casa de Géminis

-No te vengas con groserías conmigo Saga – comento Camus quien también había intentado razonar con Saga sobre lo ocurrido. Pero Saga también estaba negado a dar su brazo a torcer.

-¿Tú crees que para mí fue grato escuchar que me llamaron traidor? –

-Yo también me sentí ofendido, aunque sabía que las palabras eran dirigidas a ti. Te recuerdo que fuimos cuatro caballeros dorados más que juramos fidelidad a Hades, sin contar a Shion e integrarlo. Te hablo de Shura, DM, Afrodita y mi persona. Aioros dijo lo que dijo porque estaba alterado de igual manera que lo hiciste tu

-Si vienes aquí para defenderlo te puedes largar

-No seas tan cabeza dura – dijo Camus - ¿No te has puesto a pensar que se siente estar en un lugar donde no deberías estar? ¿Viendo otras posibilidades de cómo actuar y tomar la menos indicada?

-¿Te crees que para mí era fácil ver todo lo que hacía Ares? ¿Tratar de tomar el control sobre mi cuerpo para evitar que Ares ordenara masacres? No me juzgues, Camus, porque...-hizo un gesto, dado que no encontraba la palabra precisa para describir la impotencia que le causaba esas situaciones ya pasadas.

-No te estoy juzgando, solo quiero que pienses en la gente de tu alrededor por una vez más. Sin pensar en lo que te sucedió –Saga indignado dejo hablando solo a Camus quien dejo libre un resoplido. Saga lanzo con fuerzas la puerta de su habitación.

-Chicos... El orgullo, el dolor por lo pasado y la humillación vivida no le dejaran ver más allá... -informo Kanon en un tono por demás sereno y muy comprensivo- No justifico lo que hizo en la casa patriarcal, tampoco defiendo a Aioros, pero les pido que le dejen tranquilo. Entiendan esto: Sufrió y sigue sufriendo... Tendrá que vivir con los recuerdos de lo que vio, vivió y sintió bajo el dominio de Ares. Sabiendo que estaba atado de manos...-Milo dejo libre un suspiro y Camus le miro atentamente- entiendan que las palabras de Aioros solo desataron una rabia contenida por 13 años... Trece años de frustración al o poder hacer nada, trece años de sufrimiento... Por favor, retírense y déjenle solo un rato... De nada sirve hablar cuando esta así de alterado...-los chicos se retiraron en absoluto silencio.

Al anochecer

-Shion ¿tú crees que funcione? – pregunto Athena mientras era escoltada por Shion y Dhoko

-Algunos Dioses le deben un favor Athena, debemos cobrárselos ahora que están de buenas con nosotros.

-Es una posible solución – acoto Dhoko – Esto será un buen remedio lo vera – Athena junto a sus dos guardianes fueron envueltos por una aura plateada. La Diosa sostuvo su báculo con firmeza. En un abrir y cerrar de noche ya se encontraban en el Olimpo

-¡ATHENA! – exclamo Hermes al verla – Que grata sorpresa.. Oye – interrumpió el Dios al verla con más determinación -¿Por qué tan afligida?

-Necesito una reunión con los Olímpicos. – Hermes asintió, inmediatamente comenzó a mostrarles el camino. Luego de caminar por varios minutos llegaron al Monte Olimpo, a la sala de reuniones de los más grandes Dioses, incluida Athena.

Aquella habitación era realmente hermosa a vistas de cualquier persona inclusive Dioses, una enorme mesa redonda de piedra blanca, con asientos dorados. Habían copas y vinos, cortesía de Dionisio. Athena miro a todos los Dioses presentes, Zeus su padre estaba presente, quien al verla sonrió gustoso, los demás asintieron dándole la bienvenida.

-Que grata sorpresa – dijo Poseidón al ver a Athena – Bienvenida seas, igualmente tus caballeros.

-¿A qué has venido con nosotros Athena? – pregunto Apolo

-Si se me permite – hablo Shion – La solicitud de querer verlos ha sido una petición de mi parte. Solicitar su ayuda

-Te escuchamos patriarca – Dijo Artemisa

-En el santuario se ha complicado unas cosas con respecto a dos caballeros de Athena, Aioros de Sagitario y Saga de Géminis. Las heridas que tienen desde hace más de trece años no han sido sanadas, aún hay mucho resentimiento en sus corazones. Es por ello que esta situación ha llegado a los extremos – relataba Shion – En esta ocasión han llegado a los golpes físicos. Sus compañeros de armas intentaron razonar con ellos, pero fue imposible. Aún tienen muchas heridas que sanar, el orgullo de ambos, el dolor de lo que vivieron no los deja ver más allá.

-Ambos siguen viviendo, pensando en lo que paso – acotaba Dhoko – En lo que vivieron. – todos los Dioses cruzaron miradas, de verdad que la situación no estaba nada sencilla a simple vista.

-Realmente esos dos merecen saber que es la "realidad" para el otro...-Zeus miro atentamente a los presentes- hay que darles una lección... Una lección muy seria.

-¿Que propones Zeus? Padre de dioses y señor del cielo-pregunto Hades en tono helado.

-Hacerles vivir lo que vivió el otro.

-Pero...-comenzó Athena.

-A callar-el dios rubio miro a su primogenita a los ojos- si tus guerreros no saben entenderse entre ellos... no sirven como guardianes del mundo...-Athena guardo silencio, EL Patriarca y el Viejo maestro prefirieron no comentar.

-Usted conoce mejor la situación Patriarca – comento Apolo cortando la atención entre su padre y hermana - ¿Cuándo empezaron los cambios entre esos caballeros?

-Una semana antes de nombrar a mi sucesor - respondio Shion

-¡LISTO! – Grito Zeus – Tengo la solución – todos los olímpicos miraron a Zeus con asombro – Hagamos un cambio

-Se más específico – comento Hera

-Un cambio de destino. Volvamos el tiempo atrás y hagamos que lo que vivió Aioros de Sagitario lo viva Saga de Géminis, y a la inversa

-¿Qué saga viva lo de Aioros, y Aioros lo de Saga? – comento Shion. Zeus asintió a la pregunta

-Necesitamos el reloj del tiempo de tu padre – dijo Hades – Además de eso, las Moiras

-Aquí lo tenemos – dijo Hermes quien se acercó con rapidez al Reloj de Arena de Cronos colocándolo frente a Zeus – Tu puedes encargarte de las Moiras Hades? - el Dios asintió, alejándose por un momento de aquella reunión.

-Pero hay que tomar algo en cuenta – interrumpió Dhoko – No solamente eso, también como eso influirá en el destino de sus hermanos, Kanon el Dragón Marino y Aioria de Leo.

-Se aplicaría lo mismo – comento Apolo – AL alternar el Destino de Aioros se alterara el de Aioria, inclusive sus pensamientos. De igual manera con el Dragón Marino y Saga.

-¿Qué estamos esperando? – pregunto Zeus ansioso – Hagámoslo

-Padre… - repuso Athena – ¿Qué sucederá con el resto de la orden dorada?

-Ellos van a vivir es esa línea de tiempo, no recordaran nada de la actual…

-De igual manera cuando suceda el cambio a la línea temporal verdadera – acoto Poseidón – Ellos no van a darse cuenta de lo que hemos hecho.

-Sin embargo, Sugiero que Athena el patriarca y el viejo maestro si posean el conocimiento de lo que va a suceder. – comento Hades regresando a la reunión – Las Moiras han aceptado.

-¿Cuándo regresara todo a nuestra línea del tiempo? – pregunto la Diosa

-Cuando llegue el punto crítico donde los dos se vean envuelto en un sufrimiento, en dolor – En ese instante Apolo hablo en una lengua que solo los Dioses pudieron entender. Todos asintieron a lo que decía el Dios.

-Evidentemente – dijo Zeus - ¿Qué dices Athena? Tienes el destino en tus manos, Apolo te mostro la solución, todos en realidad– Zeus estrecho la mano de su hija. Shion y Dhoko asintieron, Athena los miraba

-Si estrechas la mano de Zeus, todo va a cambiar en este instante. – comento Hades – El destino de la tierra está nuevamente en tus manos

-¿Ellos…?

-Todo va a tener el mismo curso, la diferencia es que son Aioros como el Patriarca, el usurpador y Saga el héroe que muere en combate. – afirmo Poseidón. Athena no lo dudo un según más. Cerro sus ojos con firmeza y finalmente… Estrecho la mano con Zeus

...Continuara...

Los Dioses Olimpicos estan conformado por: Zeus, Hades, Poseidon, Hera, Demeter, Hermes, Artemisa, Apolo, Athena, Ares, Hefestos, Dionisio (Anteriormente era Hestia pero ella cede su lugar a Dionisio)