Por siempre juntos por Angie Friki Black

Disclaimer: El universo de Harry Potter no me pertenece sino a J.K Rowling.

Para: Aurora Reid Friki

Dedicatoria: Aur, eres una de las mejores personas que he conocido en mi vida. Creo que no me alcanzan las palabras para decirte cuán agradecida estoy; perdona que te lo haya entregado tarde, pero en verdad cada vez que escribía algo sentía que no era lo suficiente para ti, la verdad. Aún así, estoy feliz con lo que salió y espero que también te guste. ¡Feliz cumpleaños atrasado!

La fría brisa de diciembre le acariciaba los largos cabellos a la criatura más hermosa que él había visto. Los labios de ella se curvaban en una sonrisa nostálgica.

— ¿Te pasa algo, Neville? —preguntó ella, preocupada por lo que le pudiera estar pasándole a su esposo.

El negó con su cabeza. Tomó una de las manos de la chica entre las suyas, acariciándola con la punta de su nariz. Las manos de ella se encontraban tan frías como el piso debajo de él.

—Nada, Hermione.

A ella la respuesta no le satisfago. Frunció el ceño como sólo ella podía hacer.

—A mí no me engañas, sé qué te pasa algo.

La mano fría de ella le acarició el rostro. Su acercamiento repentino lo sintió un poco distante.

— ¿Estás segura de haber hecho lo correcto? —preguntó él.

Las palabras quedaron suspendidas en el viento. Por un momento los ojos de ellas se agrandaron, después de haber comprendido a lo que se refería, bajó la cabeza mientras una lágrima se deslizaba por su blanca y fría mejilla, quedándose así, en un sepulcral silencio.

La mente de él viajó a aquellos recuerdos qué eran tan distantes, pero los cuales hoy, parecían tan vívidos.

La batalla con Voldemort había resultado una victoria agria, sí, lo habían derrotado, pero Harry Potter había muerto. Ninguno hablaba de lo ocurrido. Ginny se había confinado a una profunda tristeza, Ron y Hermione se habían separado; Ron tomó su propio camino y Hermione también. Y él perdió todo contacto con ellos.

Luego de algunos desamores y aventuras de sólo una noche, él se mudó,y luego de otros trabajos se encontró con Hermione en una cafetería. Empezaron una amistad qué luego se convirtió en amor y paulatinamente se casaron. Aún así, sentía un gran vacío dentro de él.

Le dirigió una mirada de preocupación a la mujer a su lado. Estaba empezando a sentir que su esposa, Hermione, no era feliz.

—Respóndeme con total sinceridad, Hermione —pidió él—, ¿eres feliz conmigo?

La pregunta tomó por sorpresa a Hermione. Negó con la cabeza tomando ella, esta vez, las manos de Neville entre las suyas.

—Neville, lo que pasó, pasó. No podemos cambiar al pasado, sólo podemos esperar que el presente sea mejor. Y yo decidí formar un futuro contigo —terminó de decir Hermione.

Él apretó aún más sus manos.

—Gracias, Hermione.

Ambos se levantaron de la banca en la que estaban sentados. Dieron un último vistazo al cementerio detrás de ellos. En especial a una tumba con algunas flores en ella. Entrelazaron sus dedos entrando éstos en calor.

Salieron de allí en silencio, al llegar a una esquina ambos se miraron a los ojos.

—No sé qué nos deparará el futuro, Hermione. Pero si sé, que quiero descubrirlo contigo.

Hermione entreabrió su boca para decir algo, pero Neville la calló con un suave beso.

— ¿Por siempre juntos? —preguntó él.

Ella sonrió.

—Por siempre juntos.