HOLA

HELLO

CIAO

BONJOUR

OLÁ

GUTEN TAG

NI HAO

KONNICHIWA

Y YA NO SE OTRO IDIOMA :P

¿COMO ESTAN MIS QUERIDOS LECTORES?

ES BUENO ESTAR DE VUELTA

ME DISCULPO POR LA TARDANZA PERO HE ESTADO SUMAMENTE OCUPADA

LUEGO DE CIERTAS DISPUTAS CON MI BETA, DIFERENCIAS, DESACUERDOS, EDICIÒN Y REEDICIÒN FINALMENTE LOGRAMOS PONERNOS DE ACUERDO PARA TRAERLES EL NUEVO CAPÌTULO, ESPERO LO DISFRUTEN, TRABAJAMOS PARA USTEDES.

LO SIENTO... EL ES UN FRIKI, YO SOY OTAKU...

NUESTROS PUNTOS DE VISTA ESTAN BASTANTE DISPAREJOS ^^U

EL FINAL SE ACERCA :'(

DENTRO DE DOS O TRES CAPÌTULOS MÀS TENDREMOS QUE DESPERDIRNOS...

ESPERO VERLOS MUY PRONTO CON UNA NUEVA HISTORIA

I'LL MISS YA :'D

Capítulo XV

Mis Ideales

Pasaron dos horas esperando en la estación. Mabel se veía algo inquieta, estaba moviéndose de un lado a otro, yo como siempre no hacía más que leer algún libro siguiendo con la mirada la figura de mi hermana.

Todavía bailaban en mi cabeza las palabras que Hele… perdón, que Bill me había dedicado; estaba algo nervioso porque no sabía que iría a pasar luego, tampoco entendí algunas referencias que me hizo, "¿un futuro tortuoso que a la larga tendrá un final muy feliz"?, ¿qué quería decirme con eso?, ¿Por qué sentía esa preocupación sofocante en mi pecho? se suponía que debía estar feliz, estaba a pocos minutos de cumplir mi meta y por lo que tanto había luchado antes… todos mis conflictos mentales se esfumaron de inmediato cuando vi que por algún milagro Mabel se calmó finalmente y se sentó a mi lado.

Estoy muy aburrida, Dip!- exclamó como una niña revoltosa y me tomó la mano- ¿cuánto falta para que llegue el bus?- preguntó, yo le señalé a la pantalla, que decía claramente que todavía faltaba una hora para la llegada del bus a Gravity Falls- ¡no puedo esperar tanto tiempo, Dipper! Juguemos a algo…

Mejor será que nos mantengamos de bajo perfil, Mabel…- le dije en voz baja sin despegar los ojos de mi lectura- recuerda, esto no es un paseo, es una huida. Cualquier dato o evidencia podría ser suficiente para que nos encuentre.

Nadie nos va a encontrar por estar jugando veo-veo- me dijo con cara de reproche, yo sonreí y bajé el libro para verla.

Muy bien, gruñona. ¿Qué estás viendo?- le pregunté con la intención de seguirle la corriente.

Veo-veo con mi ojito curioso… algo color… ¡verde!- me puse a ver de aquí y allá buscando el objeto que mi hermana estaba señalando.

La gorra de ese sujeto- señalé a un hombre en la taquilla de entrada pagando boleto.

Correcto.

Yo veo… algo de color naranja.

Las franjas del bus que está llegando- Mabel me sonrió tan infantilmente que me hizo reír.

Sip. Eso mismo- Mabel se recostó de mi pecho y yo la abracé, seguimos jugando.

Veo-veo… con el ojo de la sabiduría… algo de color…- me sonrió astuta- ¡azul!

¿Eh?! ¡Eso no se vale Mabel! ¡hay cien mil cosas azules en este lugar! ¡Es imposible adivinar!

¡Veo algo azul!- me repitió autoritaria.

No lo sé. Me rindo. ¿Qué estás viendo?- ella me sonrió y se acercó a mí, de pronto tomó mi gorra y señaló

El pino de tu gorra.

Oye, pero eso estaba fuera de mi vista- me la volví a colocar

No seas mal perdedor- se acercó y me besó los labios con suavidad. Realmente me sorprendía la facilidad con la que hacía esas cosas sin remordimiento o vergüenza, es que ¿en realidad se había olvidado de quien era yo?- es tu turno- sinceramente quería hacer, o tratar de no sentir nada y expresarme como ella…

Veo algo…- de pronto sin darme cuenta ambos nos quedamos viendo fijamente, una tenue sonrisa estaba dibujada en su rostro mientras me miraba con intensidad. Era como contemplarme en un espejo- hermoso…- esbocé sin darme cuenta. Ella sonrió.

Soy yo- dijo triunfante, yo le devolví el gesto y ella me volvió a besar. Me sentí un poco incómodo al tener esa mirada y esa respiración tan cerca de la mía. No sé por qué empecé a sentir algo de culpa- ¿qué te pasa?- me preguntó curiosa al adivinar mi expresión.

Mabel… ¿estaremos haciendo lo correcto?- pregunté de improviso con miedo a su respuesta. Ella se incorporó.

¿Por qué lo dices, hermanito?- me dijo y esa palabra me penetró fuertemente la cabeza.

No me digas así…- esbocé sin mirarla a los ojos.

Ah… lo siento… ¿te molesta?

Me recuerda quienes somos y lo que estamos haciendo. Ambos sabemos que no es correcto y que… posiblemente pueda traernos problemas pronto- Mabel frunció el ceño pero no parecía molesta.

¿Te estás arrepintiendo?- me sorprendió el tono de voz con el que me estaba hablando- ¿no era esto lo que queríamos?- preguntó nuevamente. No sabía cómo responderle.

No me lo tomes a mal… pero… ¿no se te ha pasado por la cabeza que… tal vez… hayan consecuencias muy graves por esto?- Mabel bajó la mirada con frialdad.

¿Crees que estamos olvidando lo que éramos? Dipper, no. Esos no éramos nosotros- me tomó las mejillas con ambas manos y unió su frente con la mía- ahora podemos comenzar de nuevo y… se quienes en realidad somos. Yo nunca te quise como se quiere a un hermano… y lo sabes… eres lo suficientemente listo para darte cuenta, ¿no?- me sonrió como acostumbra a hacer- los gemelos Pines… ya no existen…- me quedé sorprendido sin saber que podía decirle, estaba atónito por la forma en como ella se comportaba- ahora somos solo Dip… no… Roderick y Mabel. Una pareja de jóvenes que quieren ser felices. Es todo. No hay porqué temer al mañana, si estamos juntos… entonces no tengo porqué temerle a nada.

No me digas Roderick… por favor- le dije sonriendo, tratando de simular mi inquietud.

Entonces… de ahora en adelante, serás Dipper solo para mí, ¿bien?- me sonrió con una calidez indescriptible y sin dudar la abracé.

Gracias, Mabel…- murmuré, ella solo me correspondió.

"Atención. Todos los pasajeros con destino a Gravity Falls, favor abordar por la puerta número 10.

Todos los pasajeros con destino a Gravity Falls, favor abordar por la puerta número 10"

¡¿Ya se fue una hora?!- exclamé asombrado mientras veía a unos cuantos agruparse por todo el lugar.

Como pasa el tiempo, cuando te diviertes. ¿No, Dipper?- sonrió ella de nuevo completamente natural, emocionada y radiante. Yo la tomé de la mano y nos dirigimos a la puerta indicada.

Eran las diez y cuarto. El autobús finalmente había dejado la estación y empezábamos a movernos por carretera. Mabel y yo estábamos tranquilos hablando sobre cualquier cosa, ella se veía absolutamente feliz. Pienso yo que nunca la había visto sonreír tanto. Yo por mi parte sentía calma, aunque no podía dejar de pensar que todavía había un intervalo de tiempo bastante largo para que algo saliera mal. Pero no quería preocuparme más por nada de eso, necesitaba sentir la tranquilidad con la que mi hermana me hablaba mirando hacia el camino desde el lado de su ventana, era difícil… pero tenía que aplacarme.

Sin embargo, no todo lo bueno dura para siempre y ambos sentimos un terrible y escalofriante calambre que nos corrió por la espalda cuando escuché el sonar de mi teléfono, revisé y era mi padre. Me estaba llamando con mucha insistencia. Miré a Mabel que se encontraba angustiada e inmóvil. No podía contestar, pero tampoco podía dejar que siguiera sonando, incomodaba a lo demás y habría levantado sospecha, de pronto el repicar cesó y ambos volvimos a quedarnos en silencio.

¿Qué hacemos?- preguntó algo nerviosa, solo negué con la cabeza todavía inerte y un nuevo estremecimiento nos volvió a azotar cuando esta vez era su teléfono el que sonaba sin parar. Era mamá, quien seguramente ya había encontrado a Marcus y quien seguramente estaba tan o más histérica que mi padre. Mabel y yo estábamos al borde del colapso nervioso. No debíamos contestar, pero tampoco podíamos permanecer con los aparatos sonando y sonando cada vez más.

Solo nos queda una opción…- sin pensar tomé mi teléfono y lo aventé por la ventana viendo como este se hacía pedazos con la velocidad de la caída. El teléfono de Mabel seguía repicando, todos los pasajeros tenían la mirada puesta en nosotros y nuestros molestos celulares. Le extendí la mano a Mabel para que ella me diera su teléfono, pero me miró aterrada.

¿Qué? ¡¿Estás loco?! ¡No puedo hacer eso!

Si no lo hacemos nos encontrarán- repliqué, más que furioso, nervioso. Mabel se negaba a despegarse de su teléfono pero cuando dejó de sonar y volvió a empezar tomó el valor y me lo dio yo miré con algo de nostalgia el nombre de contacto "Mamá", ella y yo habíamos sido bastante unidos, pero ahora necesitaba despegarme de una vez y para siempre de ella. Dejé caer el teléfono en la carretera y lentamente se hizo añicos. Ambos teléfonos habían sido destruidos. Mabel empezó a llorar, intenté consolarla aunque yo todavía estaba nervioso, la tomé del hombro, la acerqué hacia a mí, la abracé y le sonreí inquieto- para empezar de nuevo hay que olvidarlo todo, tú lo dijiste, ¿no?- Mabel me miró, se secó la cara cara con la manga de su abrigo y se acurrucó de mi hombro ya más tranquila. Pronto la paz en el autobús regresó y los pasajeros siguieron en lo suyo.

Nos dispusimos a dormir durante un buen rato, pero de pronto algo llamó mi atención y me hizo abrir los ojos, sentí que el bus se había detenido, miré a mí alrededor y los pasajeros estaban bajando de uno en uno lentamente, vi la hora en mi reloj e indicaba que era la una de la madrugada. El bus había hecho una parada para llenar el tanque.

Mabel… despierta- le dije sacudiéndola un poco- Mabel, estamos en una parada. Tenemos que bajarnos del bus- le indiqué, ella solo se encimó más sobre mí.

Jamás… no despertaré jamás…- me dijo aún dormitada e incómoda. Eso me hizo reír.

Vamos, Mabel… ven a la estación… ¿no quieres ir a comer algo?, ¿A estirar las piernas?, ¿No tienes ganas de ir al baño?- intenté hacerle reaccionar, tratando de zafarme de su agarre, ella solo se incorporó y luego se inclinó hacia el otro lado, con la cabeza apoyada del vidrio de la ventana- despierta, Mabel. El chofer nos hará bajar y estaremos en problemas- le volví a repetir algo nervioso.

Voy en unos minutos… mamá- replicó sonámbula y siguió durmiendo. Decidí actuar por mi propia cuenta y la tomé de la mano para pasar su brazo alrededor de mis hombros, ella seguía tambaleándose y era muy pesada, yo como pude maniobré para traerla hacia adelante. Por suerte, empezó a despertar todavía desorientada, abrió sus ojos y me sonrió- buenos días, Dipper…- me dijo y miró desconcertada hacia todas partes- ¿quién apagó el sol?- preguntó con un tono parecido al de la borrachera.

Estamos en una parada de autobuses, Mabel- le dije mientras ella se levantaba un poco más lúcida- tenemos que bajar. Ven, iremos a comer algo y luego regresaremos al bus, ¿bien?- negocié con ella quien asintió aunque yo realmente no estaba muy seguro si me estaba escuchando o no.

Decidimos comer en un puesto de sándwiches cercano a la estación. No era el lugar más higiénico, ni tampoco era el más barato, pero necesitaba estar prevenido, quería estar lo más lejos posible de ahí y lo más cerca de Gravity Falls. Mientras Mabel comía su sándwich, yo intentaba hacer lo mismo, pero estaba muy pensativo sobre aquel último encuentro con Bill. ¿No había sido eliminado de una vez por todas, ¿Acaso es invencible?, ¿Tuvo algo que ver aquella estatua en el pueblo?

La Estatua… La estatua medio enterrada en el pueblo, el último resto del cuerpo físico de Bill. Su sola presencia evocaba miedo e impotencia en los habitantes del pueblo a pesar de que todo ya había pasado. Sabía que tenía que haber una correlación entre esa estatua y la mente del Tío Stan, donde Bill había sido supuestamente "destruido".

Pasó la hora de descanso y luego todos volvimos a ser llamados a regresar al bus y continuar con nuestro camino. Ahora sí, ya no habría más interrupciones y estaríamos llegando a la estación a las ocho y quince… así que calculé que llegaríamos en el pueblo a las nueve de la mañana. Me sentía exhausto, pero aun así no podía estar más tranquilo. Por primera vez en todo el viaje podía sentir que ya merecía dormir en paz.

No podía sumirme en el mismo sueño profundo como Mabel, estaba pensativo sobre lo que había pasado: ¿Qué pensaría mama que pasó?, ¿Le creería a Marcus? o lo que pudiera pasar al llegar a Gravity Falls: El pueblo, Stan, las anomalías y el Tío Ford. No habíamos estado en el pueblo desde hace unos años ¿Cuánto habría cambiado?, ¿Seguiría teniendo la misma magia, el mismo encanto? Recordé que la última vez que habíamos venido, durante las vacaciones de invierno, el Tío Ford me había dicho que las rarezas de Gravity Falls se habían empezado a mover a otros lugares, otros pueblos, otras ciudades e incluso teorizó que se habían cruzado a otras dimensiones.

No creía las palabras del Tío Ford pues la rareza de este pueblo llevaba siglos enteros ahí sin saberse que las causó, pero después de aquel último encuentro con Bill, lo confirmó ¿Cómo pudo salir de Gravity Falls?, ¿A qué se refería con que sus amigos lo habían reemplazado? Quizás Bill era el centro de toda la rareza y sin él, al menos en sus facultades originales, era imposible para la mayoría de monstruos y criaturas subsistir en el pueblo más tiempo.

El Tío Ford nos había dicho en su historia el día que lo conocimos, que había muchos más lugares, pueblos y ciudades en todo el país donde las rarezas ocurrían y durante el viaje por Oregon con el Tío Stan descubrimos con Darlene que esto era cierto, pero ninguno como Gravity Falls, al cual él había denominado "el centro de las rarezas del mundo", al menos inicialmente eso creía él.

El Recuerdo de las vacaciones de invierno entero pasaba por mi cabeza, la curiosidad me obligaba a recordar aquel último día que estuvimos en Gravity Falls, el 31 de Diciembre de 2012, luego que nuestros padres tomaran aquella horrible decisión o mejor dicho, que la hicieran pública. Así que si, comenzó así…

"Diciembre de 2012 - Vacaciones de Invierno

Habíamos llegado para las vacaciones de invierno luego de haber rogado y suplicado tanto para que mamá y papá nos dejaran pasar esa temporada juntos. Regresar al pueblo se sentía tan reconfortante, aun incluso después del desastre que había causado Bill en el Weirdmageddon.

Al bajar del autobús fuimos recibidos inmediatamente por el Tío Stan en un fuerte abrazo, estaba muy contento de vernos y no dejaba de hablar de cuanto nos extrañaba. Mabel lo regañó porque le había preocupado que ni él ni Ford se hubieran comunicado con nosotros mientras navegaban por el océano, sobre todo después de que el huracán Sandy pegó fuerte en la costa durante Octubre.

De hecho, fue la misma insistencia de Mabel lo que convenció o mejor dicho, obligó a nuestros padres a dejarnos pasar las vacaciones de invierno con nuestros tíos. Ella siempre temía que algo les pasara a los Stan y peor aún, que no hubiera aprovechado más tiempo con ellos. Mamá y papá no confiaban mucho en Stan después de enterarse que fingió su propia muerte o que era el Gemelo del auténtico Stanford, el cual tampoco les dio mucha confianza. ¡Fue una suerte que nadie hablara de lo que pasó realmente!

Entramos a la cabaña donde nos recibieron Soos y Melody, quienes ahora manejaban la Cabaña del Misterio en la ausencia del Tío Stan. Soos no paraba de hablar de lo maravilloso que era tenernos de vuelta y de cuanto nos extrañó.

En la Tienda de Regalos nos recibió Wendy, ella aún mantenía el trabajo de cajera a petición de Stan durante las vacaciones y relevaba a Melody.

Las vacaciones de invierno fueron tranquilas, comparadas incluso al aburrido inicio del asombroso verano. Una espesa capa de manto blanco cubría al pueblo y la nieve se metía en todos lados. Mabel vio su oportunidad e inmediatamente tejió los suéteres para todos.

Y hablando de la gente de Gravity Falls… Aún seguían manteniendo el acto de "Nada de eso importa", intentando superar los horrores del Weirdmageddon mientras seguían con sus vidas, algunas para bien, otras no tanto.

McGucket seguía teniendo un gran éxito con sus patentes y proyectos, el viejo inventor incluso convirtió a la Mansión Northwest en un Mecha muy parecido a un Transformer, por si las cosas se ponían extrañas de nuevo. También mejoró la relación con su hijo y juntos pescaban o construían el nuevo invento que se le ocurriera al viejo Fiddleford, a veces invitaban al Tío Ford a unírseles.

Pacifica se había mudado a otro país, cero que a Europa, desconozco los detalles. Según se rumoraba, sus padres no soportaron más ser reconocidos como los traidores del pueblo y tampoco ayudó que perdieran gran parte de su riqueza, con lo que quedó decidieron ir a una reserva que tenían en Suiza, o algo así. Sentí algo de lástima por ella; aquella noche en que atrapamos al fantasma, había visto que no era tan mala como pensaba y que talvez le habría podido ayudar a superar la situación.

Gideon, quien ahora era considerado uno de los chicos más inteligentes en el pueblo, aún seguía desgraciadamente enamorado de Mabel, aunque afortunadamente había hecho una vuelta de página y era más sincero con sus sentimientos e incluso ayudaba a los demás, supuestamente, pero mi hermana lo siguió rechazando. El enano también se puso a dieta, aunque tanto Mabel como yo sabíamos que no le iba a funcionar.

A pesar de seguir siendo el mismo lugar mágico que conocimos durante el verano, no todo era perfecto, aun había heridas que no sanaban y otras cicatrices muy notorias.

Recuerdo que, a escondidas de Mabel fui a ver la Estatua de Bill Cipher y seguía allí… estaba medio enterrada en los bosques con su brazo siempre extendido, esperando que algún desgraciado cayera en su trampa nuevamente. Era un recuerdo de todo lo malo que había pasado, una pesadilla recurrente para los habitantes y se podía ver en sus caras ese sentimiento de impotencia y temor, temor a que el demonio regresara. De acuerdo a Tío Ford, se intentó destruir la estatua, la cual parecía de piedra que con fuerte golpe o una explosión, podría venirse abajo. Pero la realidad era otra, el Tío Ford aconsejaba encarecidamente que se dejara en paz a la estatua y que por ningún motivo se le estrechara la mano.

La víspera del año nuevo en Gravity Falls. Mabel estaba ayudando a Soos a poner las más excéntricas decoraciones que se le podrían haber ocurrido tanto a ella como al bonachón. Stan estaba haciendo ofertas de fin de año a los turistas, aunque sus "ofertas" consistían en rebajar el 10% del producto al que le había doblado el precio los días anteriores, clásico de Stan Pines, además me había puesto en la caja registradora pues Wendy había decidido darse el día libre e ir a celebrar junto a su familia. Después de unas horas que parecían interminables me envió a cargar y llevar la mercancía a los respectivos autos de los turistas, si, había sido usado como mula de carga por mi querido Tío Stan. (Si algún día tengo hijos y son amenazados con labor infantil, le daré un puñetazo a quien se los haya ofrecido).

Stan había iniciado a cerrar la Tienda para mi alivio, estaba cansado y dentro de poco tiempo iniciaría la cuenta regresiva. Fui al baño a darme una ducha y prepararme, vistiendo las zapatillas deportivas de siempre, un pantalón, el suéter tejido por Mabel que me había regalado meses antes y mi clásica gorra que hacía juego. Estaba bajando las escaleras cuando escuche su voz gritándome.

¡Dipper! ¡Ve por el nerd, está encerrado en el sótano de nuevo! – me ordenó el tío Stan desde la cocina

¡Ya voy Tío Stan! - terminé de bajar las escaleras y me dirigí a la tienda de regalos, pero un ruido grande y un breve temblor nos sacudieron, venía de abajo, ahora entendía la preocupación de Stan.

¡Sera mejor que el sabelotodo no se esté metiendo de nuevo con cosas peligrosa!- escuché gritar al tío Stan mientras me dirigía a La tienda de regalos

La tienda de regalos ya había sido cerrada, pero aun así me tome la precaución de cerrar las cortinas por si acaso. Me dirigí a la máquina expendedora y puse el código, se podía oler humo desde la entrada del ascensor, con suerte solo sería un pequeño incidente en el laboratorio o el tío Ford rasurándose la barba de nuevo. Finalmente el ascensor bajo al sótano, se podía ver aun restos del humo.

¡Tío Ford! ¿Dónde estás? - Grité mientras disipaba el humor.

Niño ¡Por aquí! ¡Necesito que me eches una mano! - encontré al tío Ford caído bajo algunos escombros de madera, al parecer causados por la explosión. Le ayudé levantándolos hasta que pudiera salir

Sí que hice una buena decisión con el tipo de madera para la cabaña, más resistente de lo que podrías creer – bufó algo adolorido- disculpa si los asusté y por cierto, te has vuelto más fuerte - se levantó y pude notar que llevaba una especie de pieza de mecánica rota, de la que aun salía humo.

Gracias. ¿te encuentras bien?- pregunté preocupado. Él solo sonrió.

Seguro viniste de curioso a ver que paso aquí – respondió en tono acusador. Yo encogí.

En realidad Stan me mandó a avisarte que subieras para la cuenta regresiva - le dije y pude notar cierta nostalgia y tristeza en su rostro- ¿Pasa algo, Tío? - pregunté curioso ante su cambio de humor. Él parecía distraído, pero rápidamente salió de sus pensamientos.

No, no es nada - se rascó la nuca y tenía una expresión que mezclaba cierto remordimiento y a la vez arrepentimiento- Es solo que… han sido tres décadas desde que celebré mi último año nuevo, en realidad 31 años, estaba tan absorto en mi investigación que no celebré la fiesta de 1941 - rió algo avergonzado, pero rápidamente su semblante cambio a uno serio- Dipper, hay algo importante que te debo contar - me dijo poniendo su mano derecha en mi hombro, yo sentí cierta inseguridad dentro de mi pecho, pero no quise darle importancia, tomé unrespiro resignado y me volví a verle.

Puedes decirme lo que quieras - le contesté expectante, el Tío Ford me miró algo sorprendido pero pronto cambió la expresión a una muy seria. Él no era de los que bromeaban ¿Qué podría haberlo tenido tan preocupado esa noche?

- Esto es en lo que estaba trabajando - El Tío Ford abrió su mano derecha y pude ver el extraño objeto que ocultaba, parecía tener forma de una pequeña araña y estaba reventado.

- ¿Tú lo creaste? - le pregunte curioso

- Si

- Oh, así que solo fue un fallo -

- No exactamente ¿Sabes que son estas cosas Dipper? - me preguntó mirándome inquisitivamente, definitivamente algo le molestaba -Son rastreadores de esencia -

- ¿Rastreadores de esencia? - lo mire incrédulo

- Si, escuchaste bien - respondió soberbiamente y comenzó a explicar. - En el multiverso el rastreo de ADN es obsoleto, en su lugar se usan los rastreadores de esencia que rastrean tomando como base el olor, la personalidad e incluso la estabilidad e inestabilidad mental, consisten en pequeños robots que son puestos en lugares estratégicos para rastrear y neutralizar amenazas - terminó su pequeña exposición. - Estaba revisando el funcionamiento de este y por accidente activé su núcleo explosivo ¡Tengo suerte de que estaba en el modo neutral! - respondió riendo

- ¿Qué tan malos serían los otros modos? - le pregunte

- Uy, hay una diminuta bomba atómica dentro de cada uno, así que ya te darás cuenta - Rio incómodamente, después se alejó, aplaudió un par de veces y entonces varias luces iluminaron el laboratorio, también pude ver que el laboratorio había sido remodelado, había una laptop en el escritorio junto a unas bocinas y un monitor LED

Vaya tío, sí que has estado actualizándote a nuestro tiempo -

¿Esto?!Oh sí! He estado en varias dimensiones y visto cosas asombrosas, avances increíbles Dipper, pero nunca pensé que un aparato de esta dimensión me permitiría almacenar tanta música o que un computador podría transportarse en las manos, literalmente, Ahora sé porque Fiddleford estaba tan concentrado en esto antes que lo llamara - Stanford rió un poco culpable al recordar que por su culpa esta tecnología podría ser obra de McGucket

¿Tío Ford? ¿Qué era lo querías decirme? - cambie el tema, sacándolo de sus profundos pensamientos.

¿Ah? ¡Oh Si! - Ford volvió en si con mi pregunta, se acercó nuevamente a mí - Dipper, me voy - me dijo con un tono frio

¿A dónde? - Le pregunte confundido, vi cómo me miró seriamente… y entonces comprendí donde se iría. - ¡No! ¡No puedes! ¿El Tío Stan tardo treinta años para rescatarte y ahora te perderás de nuevo? ¿Sabe Stan sobre esto? ¿SABE LA FAMILIA SOBRE ESTO? - me exalté preocupado y triste, agarrándolo de su gabardina marrón con fuerza, ¡no lo iba a dejar ir!

¿Qué? ¡No! Dipper, no me estoy yendo de esta dimensión- sus palabras me tranquilizaron rápidamente, el vio como mi respiración bajó y prosiguió- me voy de Gravity Falls, probablemente de Oregon, una vez que termine con la caza aquí. Dipper… esto… esto es complicado - habló en un tono frío - Dipper, ¿Recuerdas cuando te hablé de lo que Gravity Falls era para el vasto universo? -

Si, una estructura débil entre el tejido interdimensional, de donde cualquiera podría acceder cualquier universo existente- asentí con la cabeza. El Tío Ford sonrió.

-¡Exacto! Esa fue la razón por la que Bill eligió Gravity Falls como el punto de su ruptura, no solo era un punto débil en la estructura ¡sino el más débil! - suspiró con algo de gusto, que no le duró mucho - Verás Dipper, que aunque existe una barrera que impide a la rareza salir del pueblo, no lo protege de cualquier cosa de otro mundo que se pueda filtrar desde dentro y temo que… - dio un trago profundo, conocía al Tío Ford y le dolía herir su propio orgullo, le dolía sentirse menos. - Temo que contener Weirdmageddon ha abierto nuevos accesos a otros lugares del mundo - al escuchar esto me preocupe.

¿Tú crees que Bill podría…? - Pregunte temeroso pero el interrumpió antes que pudiera terminar.

No, al menos no de esa forma, no te preocupes por ello ¡Bill se ha ido para siempre gracias a Stanley! - Sus palabras me reconfortaron. En ese momento no me había dado cuenta que me estaba mintiendo.

¿Entonces que te preocupa tanto Ford? - Le pregunte inquisitoriamente, podía notar en su mirada que seguía ocultando algo, odiaba cuando hacia eso, pensé que habíamos pasado ese bache después de Weirdmageddon.

Durante mi tiempo atrapado en las otras dimensiones, hice enojar al tipo de gente equivocada, seres poderosos y con el control de ejércitos y grandes riquezas - Comenzó a contarme otra de sus historias con cierto cuidado, al tío Ford le gustaba hablar sobre su tiempo en el portal conmigo, ciertas veces censuraba algunas partes violentas - Este tipo de gente suele rendirse cuando uno cruza otra dimensión, pero temo que esta vez lidió con algo mayor - Me dijo algo serio, pero aún tenía cierta fascinación en su rostro.

¿Con que cosa?

Caza recompensas, temibles asesinos a sueldo que se disponen a todo para atrapar a su presa cuanto mayor sea el precio, incluso cruzar otras dimensiones, son un escuadrón de suicidas y tienden a jugar de las formas más horribles con sus objetivos - Su cara adquirió un tinte de terror. - Dipper, son las recientes debilidades en la estructura del universo lo que me preocupa, estos tipos podrían llegar y les sería fácil localizarme, y…. ten por seguro que si me encuentran estando junto a ustedes o Stan – su voz estaba temblando. ¿Tanto terror le causaba aquellas criaturas? - Nadie estará a salvo -

¿Qué tanto buscan de ti, Tío Ford?- Le pregunté con cierta falta de esperanza, tal vez solo se trataría de unos pocos sujetos incompetentes.

Soy la segunda cabeza con más valor, solo superado por un tal Rick Sánchez - Algo le pareció molestar en ese nombre - Bueno, al menos yo no soy perseguido por la federación intergaláctica – Rió.

Me señaló algunos monitores que estaban encimados en el escritorio del Tío Stan, los reconocí como tecnología de sensores de movimiento y rastreo.

¿Los puedes ver? - preguntó - son sensores de Movimiento y rastreo, coloqué muchos sobre todo Gravity Falls y he rastreado a tres de esos canallas dentro del pueblo, se están escondiendo por ahora, posiblemente se camuflen holográficamente.

Pero si están en Gravity Falls ¿Por qué te debes ir? - Pregunté confundido con toda la situación, supongo que en el fondo no quería perder esa oportunidad volverme su aprendiz aún.

¡No Dipper! Solo esos tres están en el Pueblo, el resto están en los alrededores de Oregon… ¡incluso fuera del mismo estado! - habló con un semblante serio, se sentía culpable por eso obviamente- investigaré a los localizados en Gravity Falls y los capturaré, luego tendré que irme fuera de él, y si el asunto se pone peor, tendré que abandonar el país - me miró con nostalgia. - Dipper ¿Recuerdas cuando te ofrecí ser mi aprendiz?

Eh, si - a veces pienso que el Tío Ford puede leer la mente.

Bueno, me he dado cuenta porque rechazaste la oferta- me miró con los ojos entrecerrados como si le molestase hablar sobre eso- quieres mantener a salvo a tu hermana, a tus padres, a tu familia y a los amigos que tienes aquí- luego me dio la espalda- niño, me di cuenta que salvar el mundo, o mundos, puede traerte serios problemas, entre ellos esta clase de sujetos, son peligrosos… despreciables - se detuvo un momento- No al nivel de Bill, pero siguen siendo una amenaza que yo mismo traje y yo mismo devolveré donde pertenecen - El Tío Ford sonrió, lo que me hizo recordar…

¡Tío Ford! Dices que solo te vas fuera del pueblo ¿Verdad? - le pregunté esperanzado. Él volvió a bajar la mirada.

Así es muchacho, bueno… si sobrevivo a esos desgraciados- apretaba su puño izquierdo mientras decía eso venenosamente - ¿Pensabas que me iría por siempre? - rio nostálgico

Si, algo así - dije algo triste y mirando el viejo laboratorio con nostalgia, realmente no había cambiado mucho, además de la nueva tecnología que implementó el Tío Ford.

¿Sabes que el Tío Stan sospechará si desapareces, verdad? Además, tienen otro viaje por los mares en febrero ¡tú mismo lo dijiste! - Le pregunte con una mirada acusadora.

Si, por eso hare que parezca un accidente - Esa última palabra la dijo con un tono serio y oscuro en su voz

-¡¿Estás loco?! ¡Le destrozarás el corazón a Stan!- La sola idea de que Ford fingiera su propia muerte y el Tío Stan llorando por ello, me revolvía el estómago.

Es por el bien de esta familia, no soportaría que ustedes sean de nuevo quienes sufran las consecuencias de mis tonterías -

... creo que esto es demasiado - Le dije triste

Lo que Stanley hizo también fue demasiado, pero descuida sobrino, sé que nos volveremos a ver - Había que admitirlo, el tío Ford sabia como animar - Dipper, no hay nada que desee en el mundo más que verte a ti, mi querido sobrino y un joven talentoso, convertido en un hombre exitoso, casado con una bella mujer y una admirable profesión- me miró algo avergonzado e interrumpió- No como pasó con este oxidado viejo- bromeó, pero se notaba decepcionado de sí mismo

No es tu culpa, Tío Ford. Pasaste gran parte de su vida entre dimensiones, ¡siendo un héroe!- Lo animaba a sentirse mejor

Hmph… ¿un héroe?... luchando contra los fenómenos de Bill Cipher, enfrentando al mismo Cthulhu, liberando a la gente de Traditio de las garras de Kein y los Piratas del Tiempo ¡Todo un héroe!- exclamó sarcástico-... Aunque también destruí algunos planetas enteros y envié accidentalmente al Dios Imbécil Azoth a un Universo Lejano… que probablemente devoró- terminó de hablar, tomando un respiro, se había vuelto a desanimar- y a estas alturas es que me vengo a preguntar si… ¿valió la pena tanto esfuerzo…?... ¿no habría sido más fácil tener una vida tranquila… junto a alguien que me hiciera compañía, hacer una familia… una nueva… ya que la mía se había desmoronado en un abrir y cerrar de ojos…- dio unos pasos hacia la puerta, yo me quedé perplejo, mirando al inerte cuerpo vuelto de espalda hacia mí y de pronto sentí como su voz de quebró- daría lo que fuera por volverme a dar una oportunidad…- sonrió apenado- ¿un héroe?... sí, claro… no soy más que un fracaso…- replicó riendo y llorando- hice de todo… para fracasar en la única tarea que le ponen al ser humano en esta vida, Dipper…

¿Cuál es esa tarea?- pregunté intentando subirle el ánimo, él se volvió hacia mí con lágrimas en los ojos.

Vivir… vivir con todas tus fuerzas… vivir y ser feliz… vivir con lo mucho o poco que tengas… ser agradecido… recibir lo que te dé el destino con los brazos abiertos, con una sonrisa en el rostro, no digo que haya que conformarse… pero tampoco se debe perder el objetivo principal del porqué uno lucha tanto… no es la fama… no es el dinero… no es el deseo de querer superarse día a día, Dipper… no es querer que los demás te reconozcan… no es hacer historia, no es ser una leyenda… es vivir siendo feliz, siendo agradecido, alcanzar la felicidad… y yo por ser ambicioso olvidé que era lo que se significaba la verdadera felicidad.

¡Pero, tío Ford!- exclamé algo angustiado- s-se supone que lo desconocido está para que el ser humano no deje de buscar y de indagar, o deje de preguntarse por qué o cómo o qué… si me pusiera a pensar… ¡has vivido mucho más que cualquier otro ser humano en este mundo! ¡¿Ves?! ¡Has visitado dimensiones extrañas, has peleado con criaturas inimaginables! ¡Has vivido tu vida al máximo! Y todavía lo sigues haciendo… o es que… ¿es que eso no cuenta para nada?- Ford sonrió forzosamente y negó con la cabeza.

No confundas la vida con la supervivencia, Dipper… es cierto, he hecho cosas que ningún otro humano ha logrado hacer… o al menos no que yo lo sepa… pero eso no fue vida… - apretó un puño- la vida la tuve… y la dejé escapar… el rencor me comió por dentro, matando al hombre que era, dudé de la palabra de mi propio hermano, me encerré en un mundo imaginario, ya que no estaba a gusto con este...

Eso no es…

Treinta años encerrado en un maldito odio y un rencor que me pareció infinito… y lo peor es que no estuve en esa dimensión por culpa de Stanley… todo fue mi culpa… no lo supe ver… fue demasiado tarde para darme cuenta… incluso, luego de haber regresado, todavía veía a Stan como un estorbo en mi camino. Cometí demasiados errores, Dipper… yo realmente no quiero eso para ti. De cierta forma…- apretó los dientes con recelo- siento que hiciste lo correcto al no aceptar seguir mis pasos.

Tío Ford…- se volvió y me miró fijamente.

Dipper… no importa lo que digan… sigue lo que tu pienses que quieres hacer. Lo que tu sientas que es… el camino a tu propia felicidad- sonrió y me alborotó el cabello- eres un muchacho brillante, hijo… tus decisiones te guiarán bien a lo que quieras alcanzar. No cometas el error que yo cometí, no pierdas la oportunidad de ser feliz.

¿Y qué hay de ti, Ford?- le pregunté algo inquieto- ¿por qué no persigues tu felicidad… ahora…?- él me miró sonriente y con pesar.

Yo ya no puedo hacer eso- me respondió con tristeza- he perdido mi vida en metas absurdas, sumergido en rencor y en odio… todo lo que está sucediendo, es culpa mía… todo lo que sucedió también lo fue y estoy luchando para al menos intentar enmendar algunas de mis faltas y así tratar de lograr irme de este mundo en paz.

Bueno… entonces supongo que esta es una despedida... - dije abrazándolo al borde de las lágrimas.

Tal vez o solo un Hasta Luego por un largo tiempo. ¡Se positivo! – me reclamó sonriente. Era raro ver optimismo en el Tío Ford y más escucharlo decir una frase de Mabel.

¡Sonaste como Mabel!- reí un poco, pero entonces el Tío Ford dio un respingo como de resentimiento y puso su mano sobre mi hombro.

Dipper, es importante que sepas dos cosas. La primera es que esto que te digo es un secreto, nadie lo debe saber, no quiero ni que Stanley ni tu hermana o Ramírez me intenten detener o se involucren con estos criminales y la segunda… quiero que sepas que respeto tu vínculo con Mabel y les doy las gracias a ambos por ayudarme a reparar el mío con Stanley, pero… he notado que son muy dependientes el uno del otro, incluso más de lo que Stan y yo lo éramos. Necesitas saber que si están todo el tiempo juntos, Mabel te alejará de tus metas y propósitos ¿Entiendes ambos puntos? – yo negué con la cabeza.

Puedes estar seguro… que Mabel jamás me haría algo así- respondí seguro. Él arqueó una ceja- al contrario… ella es la palanca que me impulsa para seguir adelante- Ford, frunció el ceño pareciendo molesto, luego lanzó un largo suspiro y se puso de pie nuevamente.

¡Bien! Si esa es tu decisión, muchacho, solo no vayas a desviarte de tus ideales por nada ni por nadie…

Eso jamás ocurrirá, tío- me miró de lado y siguió hacia el frente, aunque rápidamente se volteo

Espera, tengo una última cosa que enseñarte - Me dijo emocionado y se dirigió al escritorio, señalado una cortinilla cerrada. -Vamos! Ábrela - Me animó aunque la curiosidad ya me picaba.

Al abrir la cortinilla, me encontré con una tremenda sorpresa ¡Los Diarios!, los tres diarios estaban intactos, por un momento pensé que el Tío Ford los había reescrito, pero al hojearlos me di cuenta de que eran los mismos que descubrimos en el verano.

Pero… como puede ser posible ¿No los había destruido Bill? Le pregunte sorprendido, aún seguía sin creerme que los diarios, los santos diarios estuvieran de vuelta

También pensé lo mismo, pero al parecer todo lo que Bill y sus monstruos destruyeron durante Weirdmageddon, se reformó después que fuera "destruido". - Me explicó el tío Ford -Los Corduroy los habían encontrado y casi los queman pensando que era brujería de Bill, de no ser por Gwendolyn que los reconoció, aunque los dejaron algo maltratados los brutos – Bufó algo molesto. - Durante su ausencia he estado haciéndole anotaciones al tercer, ahora, los quiero dejar en tus manos Dipper, de forma oficial- Quedé sorprendido con esto, ya sé que de cierta forma yo era el dueño de este diario, pero ahora ¡me dejaba los 3!

Wow, no sé qué decir Tío Ford, excepto Gracias- Le di un abrazo que duró un poco más de lo normal, me aferraba a él y las lágrimas salían de mis ojos

No hay de que muchacho… - se quedó pensativo por un momento y se soltó del abrazo. - Espera Dipper, se me había olvidado algo - se dirigió al escritorio y tomó el diario 2, lo abrió y observó para sacar una pequeña memoria USB. - Ah, el archivo Crypter, después que me desahoga de los que me buscan, podría iniciar a investigar esto - Dijo con orgullo y confianza. - No te preocupes Dipper, volveré. Y sé que Stanley probablemente sea el que termine matándome de tremendo susto - Bromeó.

Ah, Tio Ford! La Cuenta Regresiva - Le recordé y ambos corrimos al ascensor

Aquel día fue otro de convivencia familiar, pero me dolía ver lo tanto que disfrutaban Ford y Stan, sabiendo que todo terminaría pronto con los planes que Ford tenía, Mabel me sacó de mis pensamientos y me guió al techo, donde los fuegos artificiales pronto estallarían y llenarían de color el oscuro cielo azul. Miré de reojo a Mabel, quien estaba a mi lado hacían ver más hermosa a mi hermana de lo que la hubiera visto antes; ella me devolvió la mirada y en ese momento por alguna razón mi corazón latió con fuerza… me avergonzó sentir eso.

¿Quién diría que resultaría ser una señal del futuro?

Abrí los ojos nuevamente para mirar el camino… pensando y recordando cada una de las frases que el tío Ford me había dedicado esa vez.

Seguir mis ideales… sin importar qué…

Vi a la jovencita que dormía sobre mi hombro, con un hilillo de baba brotando de su boca entreabierta, no pude evitar reírme, le pasé el brazo por detrás de los hombros y ella se acomodó en mi pecho, limpié con mi dedo el residuo de saliva de su mentón y me lo sequé de la camisa.

Tío Ford… estoy siguiendo mis ideales… tal como tú me dijiste- susurré y luego besé la frente de mi adorada Mabel. Nuevamente cerré los ojos y volví a entregarme al sueño.

Es curioso y a la vez irónico que fuera él mismo quien me advirtiera que ella me alejaría de mis metas e ideales… y de pronto, sin darme cuenta, ella misma se convirtió en el mayor de mis ideales.

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REVIEWS? :'D

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