Yavanna.
"Dime, hijo mio que te preocupa."
"Mi señora..." Intenté arrodillarme, mas Yavanna cogió mi rostro en sus manos e hizo que la mirara.
"Bilbo, tú no tienes que arrodillarte." Yavanna estaba sonriendo, y yo la sonreí nervioso. Me levanté y ella me acarició el pelo. "Te preocupa tu Único, el hijo de Aulë, ¿verdad?" Asentí levemente y Yavanna suspiró. Empezó a acariciar mi mejilla. "Aulë y sus hijos son muy parecidos, al igual que tú y yo, hijo mio."
"Debo seguir con el plan... No me puedo distraer, él técnicamente no es mi Thorin."
Yavanna besó mi frente y se apartó un poco. "Él es tu alma gemela, solo necesitáis un poco de tiempo mi querido Bilbo." Oí algo y me giré pensando que sería un ciervo, pero no vi nada y Yavanna se rió levemente. "Quizás Thorin no sea técnicamente el mismo de quien te enamoraste tanto tiempo atrás, pero le amas igualmente..."
"Thorin está tan ciego..."
"Esta vez tenéis tiempo."
Al girarme vi que había desaparecido.
"¡Pero...!" No pude seguir la frase porque volví a oír un ruido detrás de mi. Thorin estaba escondido detrás de un árbol y me estaba mirando fijamente.
"Te... estaba buscando, Bilbo... Siento lo de antes, yo..." Carraspeó y noté como se sonrojaba dejando de mirarme.
Me senté en la hierba mirando hacia mis pies. Apenas se veía nada salvo por la luz de las estrellas y la Luna. Noté que algo me envolvía y sonreí levemente cuando vi que era el abrigo de Thorin.
"¿Cuánto has escuchado?" Le pregunté una vez se había sentado a mi lado.
"Suficiente."
Resoplé. "Eso no es una respuesta."
Thorin suspiró. Le miré y vi como estaba alzando la vista inspeccionando las estrellas. "Le decías a una elfa que estoy muy ciego para ver, pero ya veo."
Asentí volviendo a mirar al suelo y quedamos ambos abrigados por el silencio. Al cabo de un rato hablé. "Soy demasiado mayor para esto, Thorin, dime que piensas hacer con lo que sabes o vete."
Thorin se rió, se rió, y no pude evitar mirarle. "No se que hacer señor Baggins... Bilbo, y definitivamente no eres demasiado mayor, pequeño ladrón." Thorin se acercó a mi poniendo una mano en mi hombro. "Siento haberme portado así..." Me levantó la barbilla con su otra mano para que le mirara fijamente. "Siento que te conozco de toda la vida, ¿por qué?" Sus palabras eran apenas susurros muy cerca de mi.
Me atreví a acariciar su pelo con una mano sin dejar de mirarle fijamente. "Thorin..." Él cerró los ojos.
"Repítelo." Puso su frente contra la mía sin apartar mis dedos de su pelo.
"Thorin..." Volví a susurrar y Thorin gruñó levemente. La mano que tenía en mi hombro subió hasta mi pelo y lo agarró haciendo que nuestros labios estuvieran prácticamente pegados.
"Cada vez que te veo pienso en flores, en bellotas, en libros y en el color verde-azulado de tus ojos." Él abrió los ojos y me miró fijamente. Yo apenas podía respirar. "Apenas nos conocemos pero sé que te conozco de antes... ¿qué me estás haciendo Ghivashel?"
Me mordí el labio cuando me llamó así, ¿tesoro de todos los tesoros? "Thorin, yo..."
Thorin acarició mis labios y dejé de mordérmelos. "Si sigues haciendo eso no voy a poder concentrarme." Asentí levemente y él siguió acariciando mis labios. "Nunca pensé que encontraría a mi Único cuando lo que buscaba era mi hogar perdido." Quería acercarme un poco más y besarle como tanto tiempo atrás había querido hacer pero tenía miedo de que Thorin no quisiera estar conmigo. Thorin debió de intuir lo que pensaba porque se acercó un poco más y me besó la frente. "Bilbo... cuéntame la verdad, por favor."
Me abracé a él escondiendo la cara en su cuello. "No me creerías si te lo contara..."
"Pruébame." Thorin empezó a hacer círculos en mi espalda suavemente.
Tragué saliva y acaricié el largo pelo de Thorin, jugando con él. "Nos conocimos en otra vida..."
"Quizás sea eso... Quizás nuestros antepasados estuvieron juntos cuando Yavanna y Mahal nos crearon."
Me reí levemente contra su pecho. "¿Un Rey enano y un hobbit? Imposible... El hobbit no sería suficiente para el Rey enano."
Thorin me miró fijamente de nuevo sin separarme de su pecho. "O quizás el Rey enano no fuera suficiente para un sensible hobbit." Ambos sonreímos.
"¿Cómo sabes que soy tu...?"
"Lo sé desde que soñé contigo el día antes de ir a Bag End, supe que debería protegerte con mi vida."
"¿Y ahora que va a pasar?"
"¿Estás seguro de que no te gusta Bofur?" Ante esa pregunta le pegué un pequeño puñetazo en el pecho y él empezó a reírse. "¡Vale, vale!"
Solté una carcajada y miré hacia el cielo. "Mahal... Yavanna... por favor..." "Haced que recuerde..." Pensé.
Thorin levantó la cabeza también y luego me miró. "No sabía que rezaras a mi creador."
"Gracias a él estás aquí, ¿cómo no iba a rezarle?"
Thorin apartó uno de mis rizos de mi cara. "Empezaré a rezarle también a Yavanna entonces..." Me reí y él siguió acariciando mi espalda. "Ese tal Theon... ¿alguna vez podrás olvidarle?" Carraspeé y me mordí el labio. Él tiró suavemente de mi pelo para llamarme la atención. "No hagas eso..."
"Perdón." Dije sonrojándome.
Tras unos instantes Thorin volvió a hablar. "¿Sabes lo que es un consorte, Bilbo?" Negué con la cabeza. "Es la persona con la que se casa el Rey y tiene responsabilidades reales."
Solté un pequeño "Oh" y Thorin se rió y negó con la cabeza.
"Debería estar pensando en la Compañía, en llegar a Erebor y matar el dragón para poder reclamar mi derecho de reinar... Pero estoy aquí, contigo, pensando en sentimientos que no parecen mios."
"L-Lo siento." Volví a disculparme intentando levantarme pero Thorin no me dejó.
"Por favor, no te disculpes." Me dio un suave beso en la sien. "Soñé contigo y parece que te conozco desde hace Eras, debe ser una señal de Mahal..."
"Thorin..." Esta vez logré que no me interrumpiera sentándome sobre su regazo. "Si no sientes... Si no sientes lo que siento yo por... ti, entonces podemos seguir siendo amigos... o compañeros de viaje."
Thorin se rió y me acercó más contra su pecho. "Entonces, dime Bilbo, ¿qué sientes por mi?"
"M-Moriría para poder salvarte."
Se acercó a mi oreja y me susurró. "Entonces sentimos lo mismo, maestro saqueador." Se apartó un poco para mirarme y sonrió al verme sonrojado. "Puede que no llegue nunca a ser como el enano del que hace años te enamoraste, pero puedo intentarlo."
"Thorin... T-Tú eres mucho más que él..."
"¿Puedo besarte?" Mi corazón se paró de repente y mis manos temblaron al oír sus palabras. No confiaba en mi voz para hablar así que lentamente asentí y enseguida noté unos suaves labios sobre los mios. Reconocía esos labios, los había besado muchas décadas atrás solo que ahora eran cálidos y me correspondían. El beso apenas tardó unos pocos segundos y cuando nos separamos noté que lloraba. "¿T-Te he hecho daño?"
Negué con la cabeza sonriendo y a la vez llorando. "N-Nunca creí que esto pasaría... Poder besarte..."
Él me abrazó más fuerte y yo no dejé de llorar contra su pecho hasta que Thorin me rogó que para un poco después. "Nunca he sido bueno con los sentimientos, todo esto es nuevo para mi, Bilbo, y no sé como reaccionar."
"Para mi también es nuevo..."
"Y los celos... Bilbo, soy posesivo. No sabes lo que quiero hacerle a Bofur cuando le veo abrazarse a ti o dándote besos en el pelo."
"Él es mi amigo..."
"No puedo evitarlo."
"Thorin, no eres como tu abuelo."
Thorin negó con la cabeza y dio un largo suspiro. "Se hace tarde, deberíamos levantarnos."
"S-Siento lo que he dicho, a veces las palabras salen de mi boca sin quer..." No terminé la frase porque unos labios cálidos se presionaron contra los mios durante un par de segundos.
"No quiero que te enfermes, Bilbo, cuando podemos hablar de esto mañana." Thorin nos levantó a ambos y puso un brazo al rededor de mi cintura mientras andábamos. "Para ser un lugar tan increíble según tú, hace mucho frío."
Levanté una ceja. "Es porque está acabando la primavera..."
Continuamos andando en silencio hasta donde teníamos nuestros aposentos. Thorin abrió la puerta de mi habitación y nos encontramos con que Legolas estaba durmiendo en ella, roncando. No pude evitar reírme y Thorin sonrió de manera divertida cerrando la puerta.
"Puedes dormir conmigo, si quieres." Le miré sonrojándome y él negó con la cabeza. "Sólo dormir, como hace unas noches."
"Y-Ya s-sabía que te referías a eso..." Carraspeé y él soltó una carcajada.
"Claro, señor Baggins."
Fuimos a su habitación y me dejó pasar primero. Era una simple habitación con una gran cama del tamaño elfo. Me quité el abrigo de Thorin con cuidado y lo coloqué en una silla. Thorin se quitó la armadura y las botas y me ayudó a subir a la cama. Una vez ambos estábamos acostados le miré. "Me siento cómodo contigo..."
"Y yo contigo, Bilbo." Thorin me acarició el pelo y yo me acurruqué contra él. "¿Cantarías una canción antes de dormirnos? Prometo estar a tu lado al despertar." Asentí levemente y las manos de Thorin bajaron por mi espalda acariciándola.
Roads go ever ever on,
Over rock and under tree,
By caves where never sun has shone,
By streams that never find the sea;
Over snow by winter sown,
And through the merry flowers of June,
Over grass and over stone,
And under mountains in the moon.
Roads go ever ever on
Under cloud and under star,
Yet feet that wandering have gone
Turn at last to home afar.
Eyes that fire and sword have seen
And horror in the halls of stone
Look at last on meadows green
And trees and hills they long have known.
Thorin roncaba bajito a mi lado cuando terminé de cantar, y yo poco a poco me dormí pensando en un futuro donde todas las noches pudiera dormir así con él.