Los personajes no me pertenecen son de la total autoría de Peacht Picht. La historia es 100% mía
Un desconocido conocido
IKUTO POV
Sentí una fuerte punzada en el pecho, fue ahí donde logre escuchar a Amu, y volver a la realidad
¿Ikuto?... ¡¿Ikuto?! Hey, despierta- meneé mi cabeza y ahí estaba ella toda empapada aun en mis brazos. Había sido tan real todo lo que pensé, pero no… solo fue mi mente jugándome una mala pasada; primero haciendo sentir ilusoriamente su cuerpo en mis manos y luego haciéndome pensar que le diría la verdad, pero no puedo, no puedo hacerla sufrir, no quiero ver lágrimas en su rostro nuevamente.
Discúlpame mi linda peli rosa- sonreí como si nada.
¿En qué pensabas?- me dijo con sus labios un tanto morados por el hielo que hacía en ese parque.
En nada…- mentí descaradamente- solo que me quede hipnotizado contigo; tu realmente no sabes cuan maravilloso es haberte encontrado…- acaricie su empapado cabello rosa. Por suerte las regaderas habían terminado, y ya no caía más agua sobre nosotros.
Amu estaba tiritando, sus mejillas estaban coloradas y sus labios levemente morados. La abrace más fuerte aun a pesar de que estaba igual de empapado que ella, pero sabía que el calor de mi cuerpo podía disminuir el frio del suyo.
Ikuto, no puedo volver así a mi casa; se harán mil y una pregunta-me dijo mi peli rosa acurrucándose lo máximo que podía en mis brazos.
Mmmhh…tienes razón, yo tampoco sabría que decir en mi casa- y con "casa" me refería a Utau, que debe de estar histérica pensando en donde puedo estar metido.- ¿tienes alguna idea?
La verdad es que en este minuto no logro pensar nada. Creo que se congelo cada pedazo de mi cuerpo-la verdad es que si estaba muy helada, siempre fue tan frágil. Me apresure a realizar lo que mi cerebro analizo lógica y rápidamente; y la besé, la bese con tanta efusividad como si nunca antes hubiera probado los labios de una mujer, como si en eso se me fuera la vida. Al alejarme vi a Amu más agitada, el morado de sus labios había desaparecido y ahora ya no eran solo sus mejillas las coloradas, sino que su rostro completo. La escuche expulsar un pequeño suspiro y a continuación vi como salía un vapor desde su boca, creo que había dado resultado mi accionar, su cuerpo había tomado un poco más de calor.
-¿mejor? –consulte, aun sabiendo la respuesta.
S-si… Gracias – susurro Amu- Ikuto… ¿tendrás algunas monedas?
Sí, creo que sí, ¿para qué?
-llamare a mi casa, diré que me quede en otro lugar, no pienso llegar así, estoy estilando
-sí, creo que haré lo mismo. Vamos, se nos está haciendo muy tarde aquí, iremos a llamar y luego a un hotel.
-hee ¿tú y yo? ¿Nos iremos a un hotel? ¿Solos?
Si, después de tanto tiempo sin habernos visto, ahora ¿no quieres estar cerca de mí?-me acerque y di un pequeño beso a sus labios.
AMU POV
No sé qué estaba haciendo, de veras que no lo sé, ¿Que hacía en los brazos de un hombre a las tantas de las noches?, el cual hace unas horas atrás era un desconocido, ¿Que hacia besándolo como si hubiera estado siempre junto a mí?, ¿Qué es lo que hacía mi corazón? Porque rayos latía tan fuerte ante la idea de estar sola en un hotel junto a él, yo no sabía nada, mi cuerpo solo decía si, si a todo, respondía cada gesto de él, mi cuerpo ya no me pertenecía, era completamente suyo.
-¡No!-tome su cara entre mis manos- todo lo contrario- lo miraba fijamente a sus ojos- no te separes nunca más de mi-lo bese, porque ya no podía vivir sin sus besos. Había sido mucho tiempo llorando sin saber porque, y ahora que sabía que era por la ausencia de mi protector, no quería llorar más, solo quería seguir sintiendo esto nuevo que llenaba mi corazón. Esto nuevo que me hacía sentir un verdadero ser humano.
Él me sonrió, me ayudo a levantarme de entre sus piernas, él se levantó también, todo empapado y tomo mi mano- vamos, llamemos luego.
Caminamos hasta un teléfono público –
-Aló…mamá. Sí mamá, estoy bien. No, ¿Por qué me tiene que pasar algo malo? Porque me había llamado una compañera de modelaje que le paso algo y su familia no se encuentra en la ciudad. Sí mamá, solo por eso salí tan apurada. No, me quedare con ella, no llegare a casa- Quería terminar luego la llamada pero mi Madre lo hacía un poco difícil- sí, ok, Adiós.
Ahora es tu turno- le dije a Ikuto mientras yo iba a moverme para salir de la cabina pero Ikuto entro y cerró la puerta.
Hace frio afuera- me dijo abrazándome, mientras con una mano echaba las monedas y marcaba para llamar.
Me miraba a los ojos mientras esperaba que alguien le respondiera al otro lado.
Hola papá, no llegare a casa, dile a mamá que estoy bien que no se preocupe, dile a Utau que me quedare en la casa de un amigo o algo así- Ikuto no sacaba la mirada de la mía- sí, lo sé papá…-me quedo mirando dudoso de lo que iba a decirle a la otra persona en el teléfono- sé que nunca tuve amigos cuando fui pequeño, pero…-sonrió y me apretó un poco más fuerte- nunca me hicieron falta, aparte que no quiero que Utau piense otra cosa. Simplemente quiero estar solo. Sí papá, solo eso. Adiós. – Ikuto colgó e inmediatamente al volver a mirarme con sus profundos ojos azul zafiro, me hundió en su pecho en un abrazo con la más inimaginable ternura. Creo que por primera vez sentí que de verdad le hacía falta a alguien en este mundo.
NORMAL POV
La pareja se tomó de la mano y se retiró rápidamente del lugar en dirección al hotel más cercano para secarse y descansar. Al llegar al hotel pidieron ropa seca para poder cambiarse, pero solo tenían un par de poleras, y un pantalón para el caballero. El peli azul acepto las prendas y se retiraron a la habitación.
Ve tu primero a cambiarte- dijo Ikuto entregándole una de las poleras y buscando una toalla en el armario para entregársela. Amu se quedó mirando la prenda en su mano, un poco pensativa, mientras que el oji-azul se preguntaba qué es lo que retenía a la chica ahí sin irse a cambiar. Cuando se dio cuenta que era simplemente una polera masculina. ¿Qué se pondría para abajo?
¡Oh! Lo siento Amu, es que solo tenían eso… eh…- El chico miraba por toda la habitación viendo si había algo más para entregarle.
No, no, tranquilo, mira…-Amu coloco la polera sobre su cuerpo- me cubre completamente-sonrió y se metió al baño
Mientras la muchacha de pelo rosa y tez blanquecina estaba en el baño deshaciéndose de su ropa mojada, el Chico peli azul decidió cambiarse de ropa en el cuarto. Se colocó el pantalón seco y comenzó a secar su cabello con la toalla. Pero mientras se secaba el cabello sin que él se diese cuenta salió Amu del baño la cual ya se encontraba un tanto avergonzada por solo estar ocupando una prenda de vestir, pero al salir se encontró con esa imagen de la espalda de Ikuto, su piel suave y tersa, ahí, tan solo a un par de pasos. El chico de mirada intensa se dio la vuelta y vio a la chica parada en la puerta del baño muy avergonzada.
Ikuto se miró, y claro se dio cuenta que había olvidado ponerse la polera; la tomó apresuradamente y se la colocó.- Bien… eh… por favor acuéstate en la cama- sonrió- yo me hare una cama en el piso.
Los chicos no tenían tanto dinero como para poder rentar dos piezas por la noche, y las habitaciones disponibles en el lugar eran con cama matrimonial. Por lo cual no les quedó más remedio que aceptar, razón por la cual el peli azul había decidido dormir en el piso.
No es necesario…el piso es duro e incómodo, la cama es bastante grande, puedes ocupar la mitad- dijo la chica nerviosa mientras miraba el piso y tocaba sus propias manos ansiosa
¿Estas segura?
-Si…-dijo caminando a la cama e introduciéndose en ella-
Bien, gracias- respondió él
Amu POV
No sé qué hacer, ni siquiera sé cómo actuar- mis pensamientos fluían mientras me sacaba la ropa mojada, mientras secaba mi cuerpo- creo que mi corazón no va a parar de latir en toda la noche. No es que vaya a pasar algo, pero aun así estoy tan nerviosa- me coloque la polera y como había dicho antes me tapa completamente, me quedaba como un vestido.- Estoy tan nerviosa que no quiero salir de este baño, no sé qué decir, alguien podría decirme ¿qué le digo a un desconocido conocido hace años? Argh ¡no!, que trabalenguas – me senté en la orilla de la tina y afirme mi cabeza- es que esto es de película. ¿Tal vez estoy soñando?- me levante y me miré al espejo rápidamente- no, definitivamente no es un sueño, esto es real, pero… ¿Cómo fue que llegue a esto? Jamás eh sido tan impulsiva y ahora ¡mírenme! Dios mío – miraba rápidamente al techo- muy bien Amu – me reprendía como una madre a su hija mirándome al espejo- creo que no está nada mal para ser la primera vez que actúas impulsivamente. Veamos, primero sales de tu casa corriendo por una necesidad muy profunda de ver al desconocido de la plaza que resultaba ser el conocido de tu infancia que finalmente, y sacando muchas conclusiones te das cuenta que amas, entonces decides lazarte a la vida y lo besas… ¡Espérate! – me detengo a mí misma en pleno- ¡sí! Lo bese – me tapo la boca y me coloco completamente roja- yo, así, sin más llegue y lo besé, y nos besamos no solo una vez sino más de una –sostenía mi cabeza entre mis manos mientras miraba mi rostro espantado en el espejo- ¿Realmente yo AMU HINAMORI hice todo eso? Haa~ yo no puedo creer esto- comencé a caminar por todo el cuarto de baño, y tampoco es que fuera muy grande, prácticamente parecía un perro persiguiendo su cola. Volví a sentarme.- Y luego para variar acepte venir a este Hotel con él, cualquiera diría que soy una… pero no, no, no, no. Yo sé que las cosas no son así- dije espantando la idea de mi cabeza- esto es diferente, es una situación muy pero muy diferente- me levante y respire profundo- bueno en algún momento tengo que salir, así que…aquí voy.
Mire la manilla y con valor coloque mi mano ahí para abrir la puerta pero al levantar mi mirada olvide todo lo que ya había pensado, mi mente quedo en blanco, una vez más- ito…-susurre. Fue algo prácticamente inaudible. Él estaba ahí de espalda hacia mí, sin polera agitando sus manos sobre su cabeza, secándose el cabello. Yo podía ver como se movía cada musculo de su espalda, como esos brazos tan fuertes podían sujetar esa toalla con tanta firmeza.- ¡Rayos! Y ahora ¿qué hago? – Ikuto se dio vuelta y al mirarme creo que se pudo percatar de mi cara sonrojada, sin dudarlo se puso la polera para no incomodarme más, aunque no sabría decir si quería o no que se pusiera la polera.
Me dijo que me acostara en la cama que el dormiría en el piso, pero cómo iba a dejar que él (quien pago el cuarto) durmiera todo incomodo en el piso. No podía, luego me sentiría muy culpable.
No es necesario…el piso es duro e incómodo, la cama es bastante grande, puedes ocupar la mitad- le dije mientras miraba el piso tenía vergüenza de mirarlo a los ojos, y ya no sabía qué hacer con mis manos solo me las tocaba, y tocaba mis dedos. Me preguntó si estaba segura, y la verdad es que ni yo sabía si lo que estaba diciendo era correcto, si era algo de lo cual debía estar segura, pero le dije que sí, de lo contrario dormiría en el piso. Avance a la cama y me recosté. Él me agradeció el gesto de decirle que podía dormir en la cama. Yo solo sonreí.
Él se recostó en el espacio que quedaba en la cama pero no me dejaba de mirar; eso hacía que me pusiera muy nerviosa, pero casi entro a un colapso nervioso cuando su mano se acercó a mi rostro para colocar en su sitio un mechón de cabello rebelde que estaba sobre mi mejilla. La piel se me puso de gallina.
Amu…-escuche salir de su boca y lo miré a los ojos expectante
¿S-si?...
Tranquila, sé que todo esto es extraño, y al igual que para ti, para mí lo es, aunque tú no lo notes…estoy extremadamente nervioso- el tomo mi mano y antes que pudiera hacer algo él la tenía puesta es su pecho- ¿ves? Mi corazón está acelerado…-él tenía razón su corazón latía rápidamente al igual que el mío.- Yo te encontré después de mucho tiempo, cuando pensé ya no te volvería a ver, y…tenerte tan cerca, me está volviendo loco- ¿se supone que esa frase tiene que tranquilizarme?- pero quiero que sepas que sé que estamos en una situación bastante anormal es por eso que…-saco mi mano de su pecho y la beso tiernamente para luego afirmarla entremedio de sus grandes manos-yo tratare de mantenerme en mi sector, y por favor descansa, mañana nos iremos temprano por si tienes cosas que hacer, y bueno solo quiero que te sientas cómoda…-por unos segundos que parecieron eternos se quedó callado y luego extendió una sonrisa y continuó diciendo-jamás pensé que el día que nos encontráramos sería el mismo día en el cual estaríamos en la misma cama acostados….- mi chico alto inmediatamente al decir eso se ruborizo- o sea, no es que yo te hubiera imaginado a ti, o más bien dicho, no es que tú y yo, bueno, no quiero que me entiendas mal- hablaba y hablaba para disculparse, él no quería hacerme entender otra cosa y eso enterneció mi corazón. Él se encontraba tan complicado como yo. Sonreí y me acerque lentamente hasta sus labios en donde posé un tierno beso- Mejor descansemos, olvidemos todo lo demás- me acerque a su pecho y me acurruque en él, y él instintivamente me abrazo protectoramente y beso mi frente. En los brazos de ese desconocido conocido me sentí nuevamente en casa.