Hermione estaba sentada en su oficina en el ministerio, sin ningún trámite que hacer ya, hoy había llegado muy temprano a su trabajo para terminar todo antes de la hora de salida, para poder alcanzar a ir al curso de cocina a recoger un nuevo postre que preparo en su clase de anoche.

Desde que Ron se fue a vivir a Hogsmeade para administrar la sucursal de la tienda de broma de los gemelos, Hermione decidió hacer actividades extra curriculares para no morir de soledad en su casa y acostumbrarse a ser una mujer separada solo por tres cortos meses ya que le toco cambiar ese título por mujer divorciada, el cual llevaba ya durante los últimos tres años sin ningún problema. Por lo que aprendió a cocinar profesionalmente comida italiana, francesa, mexicana, japonesa, india la cual solo hizo el curso básico porque no le gusto, pero su especialidad eran los postres. Todo esto en una escuela de cocina muggle.

El divorcio de los mejores amigos de Harry Potter, no fue un tema muy hablado en el mundo mágico, hasta decían que la pareja se demoró en oficializarlo y que era la mejor decisión que habían tomado desde ayudar a Su mejor amigo durante la guerra. En las vacaciones de Navidad en el primer año de Hogwarts de Hugo, Ron anunció que se mudaría a Hogsmeade a vivir, lo que para todos los Weasley fue el anuncio de la separación.

- Hermione!- el conocido niño que vivió ahora un hombre padre de familia, entro a la oficina de su amiga. - Hoy es miércoles, día de cena con los Potter- se rió con su broma de todas las semanas. - Yo ya sali del departamento de Aurores, te espero para ir juntos?.

- Harry muchas gracias pero hoy no- le sonrió- anoche hice un postre para la cena y tengo que ir a decorarlo primero para que quede perfecto, luego voy a tu casa.

- Si eres consiente de lo que te hará una pelirroja si no llegas? - bromeo Harry pensando en lo enojada que se pondría su esposa si eso llegara a pasar.

- No quiero ni imaginarme.- le dio un beso en la mejilla de despedida. -Es algo rápido antes de las siete estoy llegando. ahora tu avanza a tu casa y aprovecha el tiempo libre que te has dado con tu esposa.

Termino de ordenar sus papeles en el escritorio, vio la foto actualizada de sus hijos que estaba en el escritorio, como pasaba el tiempo, su hija cumpliría 15 años el próximo año, y Hugo ya estaba mas alto que su hermana. Guardo el profeta en su cartera, tenía que llevarlo para leer una noticia que le causo mucha curiosidad. Cuando escucho la puerta abrirse.

- Harry.. No tenias que decirle nada a Ginny sobre el postre.- se quejó sin ver hacia arriba, imaginando que su amigo regreso por orden de su esposa acompañarla.

- Buenas tardes Granger. - era una voz masculina, obviamente no la de Harry.

- Malfoy- suspiro al ver al rubio parado en la puerta de su oficina como lo hacía prácticamente todos los días de estos últimos 5 meses. - si sabes que día es hoy?

- Miércoles. - contestó con una media sonrisa, muy seductora, muy Draco Malfoy.

- Pense que ya te habías resignado los Miércoles. - dijo recordando que los últimos 3 el rubio no había llegado.

- Resignado no es una palabra en mi vocabulario. - entro a la oficina cerrando la puerta - Soy leal, y me gusta cumplir. - se acercó al escritorio de la mujer. - todos los miércoles tu Hermione cenas con tus amigos Potter. - se acercó tanto a ella que con el dorso de su dedo acaricio el rostro provocando cosquillas en el cuerpo de Hermione.

- Y por que hoy seria diferente? - se alejó sin demostrar agrado a la caricia. Además había algo el día de hoy que lo hacía más atractivo, su camisa abierta los dos últimos botenes, sin corbata ni tunica, su cabello algo despeinado y en sus mejillas blancas se podía ver algo de rubor, un look que nunca pensó que Draco Malfoy usara, ya que para ella el rubio vivía con camisa y corbata pegada desde el colegio.

- estaba en mi carro cuando Vi a Potter, se estaba yendo solo a casa, y supuse que se rompería la tradición de tu cena, así que regrese para poder preguntarte una vez mas si quieres salir conmigo?- lo dijo tan pausadamente como siempre, esas mismas palabras que venia repitiendo todos los días, de Lunes a Viernes desde ya cinco meses. - Y si Granger como una cita, adelantó a contestarte por si acaso hoy quieras preguntar.

- Supusiste mal, si cenare con los Potter solo que iré a recoger un postre que hice primero.- lo miro fijamente, ahora entendía por que estaba despeinado y con ese look de cansado, de alguna manera Draco Malfoy habia corrido a su oficina, y a esta hora que todos bajaban por los ascensores no dudaba que el haya subido por las escaleras hasta el 6to piso.- Y no se porque te sigo dando explicaciones a ti.- se quejó, de alguna forma desde la primera vez que llego a invitarla a cenar hasta ahora, su forma de contestar había cambiado, y hasta muchas veces conversaba con Malfoy.

- A mi no me molestan, hasta me gusta saber mas de ti, por eso quiero una cita contigo, y no descansare hasta conseguirla.

- Malfoy, como ya te dije tengo cosas que hacer antes de ir donde Harry, así que puedes irte a tu casa.

- espera, Te propongo algo, hacerte un favor, como ya me dijiste tienes que ir a ver un postre o algo así, yo estoy en mi carro y tu no tienes ya uno. - hace un mes que Hermione vendió la van familiar por problemas financieros, ella estaba viviendo con las justas y como sus hijos estaban en Hogwarts le había dicho a Ron que no era necesario que el pague algo, además que por Ginny sabia que la tienda en Hogameade fue una gran inversión y aun seguían con déficit. - Te llevo a recoger tu postre y luego hasta donde los Potter.

- Se desaparecerme y aparecerme desde los 17 Malfoy.

- primer punto: hace 2 meses aproximadamente al decirme que no a mi cita comentaste que tu escuela de cocina era en el mundo muggle, lo que significa que no puedes aparcerte al pie del lugar y que Aunque quede cerca tendrás que caminar y te demoraras mas, segundo con el postre en la manos tendrás que volver a caminar hasta un lugar donde desaparecerte y como aprendimos en el colegio no es recomendable hacerlo con comida.- aclaro de una forma muy logica.

- claro que sabia eso rubio, iba a pedir un taxi.- lo agradable se le fue un poco al darse cuenta que Malfoy tenía razón y que la había hecho quedar como una tonta que no recordaba lo de la comida.

- Vamos te llevo y no tendrás que pedir taxi, además iras comoda y llegaras antes a donde los Potter. - ofreció nuevamente y después de 5 segundos que Hermione no contesto nada añadió - No es una cita Granger. Solo estoy haciéndo un favor a una compañera de colegio y de trabajo.- Hermione asintió con la cabeza y tomo su cartera, pudo ver la sonrisa de triunfo de Draco, y después de cinco meses al fin había conseguido algo.

Caminaron por los pasillos del ministerio junto con todos los demás, al llegar al parqueo se encontró que el Porsche negro de Malfoy estaba mal parqueado en medio camino, era una realidad que corrió a buscar a Hermione. El le abrió la puerta de copiloto y espero a que ella se siente para cerrarla. En todo su tiempo con Ron, nunca había hecho eso por ella.

encendió el carro y salieron del parqueo y en menos de 3 segundos estaban en calles muggles.

- Donde es tu escuela?

- Sigue largo por esta y yo te aviso con tiempo a lo que tengas que ir a la derecha.

- Bueno hablemos un poco. Como están tus hijos?

- Porque me preguntas por mis hijos?- se sorprendió Hermione.

- Cuando una persona X está conversando con alguien que le interesa, lo que siempre se pregunta cosas de su vida, que estudia, su comida favorita, color favorito, música- explicó tranquilamente - y eso estoy haciendo yo, preguntando de tu vida, y como eres madre al igual que yo soy padre, se que parte importante de la vida si no es la gran mayoría son los hijos .

- Están bien entiendo tu punto. - suspiro ese rubio no se rendía por nada -Rose la niña esta en 5to año es de Ravenclaw y juega quidditch en el equipo.

- En que puesto juega?

- Es guardián.

- Como su padre. - mencionó al que fue esposo de Hermione no tan feliz, primero que durante el colegio nunca tuvieron un encuentro agradable, y segundo porque ahora que estaba interesado en su ex esposa lo que menos quería era pensar en él como competencia o como el hombre que una vez ella amo. Los Malfoy eran celosos.

- exacto, aunque yo atribuyó su habilidad a que sus primos mayores siempre la pusieron en los arcos porque era mala en todo lo demás- se rio al recordar a su hija jugando quidditch a los 8 años. - Y bueno Hugo esta en 4to no juega en el equipo de Gryffindor porque dice que ya hay muchos Weasley en la historia de quidditch en esa casa y que prefiere nunca ser rival de su hermana.- sonrío al pensar en sus hijos y Draco conoció el lado maternal de la mujer de sus sueños. - Por aquí ya tienes que girar y paras en dos casas más. - se estacionó frente a un restaurante que era de la misma escuela de cocina a la que Hermione asistía. - Puedes no esperarme Malfoy, ya hiciste mucho en verdad.

- El favor es completo, puedes demorarte todo lo que desees que yo te espero aquí.

La calle no era muy traficada, pero era muy muggle, con pequeños negocios, el restaurante cafetería de la escuela, una librería , y un lugar donde vendían cuadros. Esa calle era muy Hermione Granger. Tenía algo lindo,Se bajo a respirar un poco de aire de la zona, noto como los faroles de la calle se prendían poco a poco y los nombres de los negocios también.

- Mágico verdad? - Hermione estaba junto a el. - Cuando el sol se va automáticamente se encienden.

- Mágico para se muggle- bromeo en susurros mientras le abría la puerta del Porsche. - Ahora donde los Potter. - sonrío para si mismo y prendió el equipo de música de su carro, y una melodía muy conocida para Hermione comenzó a escucharse por los parlantes haciendo a la mujer tararear automáticamente.

-Los Beatles? En el carro de Draco Malfoy? - cada segundo se sorprendía mas. - Nunca pensé que viviría para esto.. - bromeo

- Si..me gustan bastante- dijo sin hacer notar la emoción de saber que a Hermione le gustaba la misma banda que el.

- Pero tu porque escuchas una banda muggle de los años 60?- en ella era entendible sus padres eran muggles, ella vivió entre Muggles, los escucho desde niña.

- Cuando se acabo la guerra, y los Malfoy tuvimos que agachar la cabeza para sobrevivir hicimos muchas cosas para volver a ser aceptados- la voz de Draco decía la tranquilidad que tenia al tocar el tema- Que el nombre de mi madre salga como parte importante en la historia de como Potter sobrevivió por segunda vez a Voldemort nos ayudo a entender lo correcto y comenzamos a trabajar en eso. - Hermione lo escuchaba atentamente, esto era información nueva. - mi papa tuvo la idea de mezclarnos con los muggles para comenzar aceptarlos. - trago saliva por ser tan detallado en sus palabras. - bueno el y mi mama, yo ya aceptaba a los Muggles mucho tiempo antes, pero eso es algo que ellos nunca se enteraron. En nuestro viajes conocimos restaurantes, hoteles, y se puede decir que nos dimos unas vacaciones de la magia, yo decidí mezclarme al final con gente de mi edad y el día que entre a mi primar bar escuche a los Beatles y desde ahí lo hago.

- Vacaciones de la magia- repitió las palabras - a mis hijos siempre les hago eso, al principio les encantaba ahora se quejan - se rio recordando a Hugo quejándose - Y ahí es cuando les recuerdo que su madre vivió sin magia por once años y que ellos pueden hacerlo por lo menos 2 días.

- Ahora puedes decirle que los Malfoy lo hicieron por dos semanas, de seguro es una mejor referencia. - ambos se rieron a carcajadas y Continuaron hablando de sus hijos, Hogwarts, Draco le pregunto por el postre y los cursos de cocina.

- Draco Malfoy porque encaprichado con salir conmigo? - pregunto al fin Hermione al reconocer que estaba llegando a su destino final y que este momento acabaría.

- No pienses que es un capricho, en verdad quiero que me des una oportunidad para que conozcas al verdadero Yo. - se estacionó a dos casas de la de Potter. - Hermione, me gustas mucho tienes algo que no se pero me tiene loco. - se sonrío al notar que sus palabras no tenían mucho sentido. - Y si me dices no, igual seguiré yendo a tu ya te lo dije yo no me rindo- después de eso Hermione no contesto nada, y enseguida Draco se bajo del carro para una vez mas abrirle la puerta. - Gracias por aceptar que te traiga.

-Sábado.- dijo muy despacio la mujer mientras veía al rubio ponerse mas pálido de lo normal.

- Que dijiste?

- Sábado..-repitió con una sonrisa, segura de lo que decía - Draco Malfoy Tendras tu oportunidad.- se rio al ver la cara.

- Prometo no defraudarte Hermione Granger!- el rubio era un niño emocionado celebrando su triunfo. - A las 4 paso por tu casa.

- No es muy temprano para una cena?

-después de 5 meses pidiendo salir contigo. - tomo la mano de Hermione delicadamente.-Esto no será una simple cena te lo aseguro. - le dio un beso en la mejilla muy cerca de los labios, dejándola por un lado en shock y por el otro queriendo mas de Draco. - Nos vemos el sábado. - el rubio se subió al carro y arrancó, dejando a una Hermione sonriendo como una adolescente y con la cabeza llena de muchas preguntas mientras veía como se alejaba el auto negro, acaba de aceptar salir con Draco Malfoy, y estaba feliz por su decisión, a la vez estaba intrigada en conocer más de este nuevo Draco, del cual estaba encantada. No camino mucho hasta la casa de los Potter para reconocer una cabeza pelirroja en el porche.

- Es mi imaginación o acabas de llegar con Malfoy?

- No deberías estar en Hogsmeade trabajando? - evadió la pregunta con otra pregunta porque no se esperaba encontrarse con su ex esposo, no después de estar sonriendo por el beso.

- en realidad si, pero tenía que hablar con Harry. - se acerco Ron a saludarla con un beso, pero en la otra mejilla, la que no beso Draco . - Te ves bien Hermione, estas muy feliz.

- También te ves bien Ron. te quedaras a cenar?

- No, tengo que ir a la Madriguera a ver a mis padres antes de tomar el tren a Hogsmeade. - le sonrió a la mujer con que compartió mucho. - Se les dañó la línea flu.- se burlo para el solo señalando la casa Potter. - bueno ya me tengo que ir, Hermione cuídate mucho.- la abrazo, aunque al comienzo fue raro, ahora compartían algo de amistad. - y escúchame bien, si alguien te hace daño no dudes en buscarme. - las sospechas de Hermione fueron comprobadas con esa frase,Ron si vio biena Draco. - No permitiré que nadie.- dijo con énfasis. - se burle de la madre de mis hijos.

- Gracias Ron.- ahora ella dio la iniciativa y le dio un beso en la mejilla. - Ya anda que Molly te tiene que estar esperando.