Truth Through Mirrors

Escrito por beautifulpurpleflame

Traducido por MrRayney

Sin lugar a dudas, esta es una de las historias más interesantes con las que me he encontrado, pues la trama me parece original, pues siempre hemos visto que las historias que hablan sobre Nevermore pertenecen a Raven…pero ¿Qué hay de Chico Bestia? Eso es lo interesante pues la trama no solo nos muestra como seria la mente del mutante, este sin lugar a dudas es uno de los mejores trabajos de la autora, por lo que sin nada más que decir, disfruten de la historia.

Los Jóvenes Titanes no me pertenecen, tampoco la historia, lo único que me pertenece es el esfuerzo que hago para traducirles esta historia.


Reflejos de nuestras almas

Capítulo 1: Feliz Cumpleaños

La sala común estaba completamente decorada con globos y serpentinas. Había cintas de todos los colores adornando el lugar de una forma colorida. En la pared había un enorme letrero con las palabras "Feliz Cumpleaños". En el sofá estaba sentado Chico Bestia con un sombrero festivo y varios regalos a su alrededor. Tenía una enorme sonrisa en su rostro que mostraba su distintivo colmillo. Sus amigos y compañeros de equipo, estaba sentados a su alrededor, quienes con una sonrisa veían disfrutar a su compañero de su día especial.

—Entonces ¿Qué tal se siente finalmente tener 21 años, Bestita?— Pregunto Cyborg.

— ¡Se siente increíble!— Respondió con emoción Chico Bestia, quien tomo alguno de sus regalos envueltos y comenzó a agitarlos.

—Chico Bestia ¿Estás seguro que no deseas llevar puesta la corona de la carne?— Pregunto Starfire sosteniendo una corona.

—Uh…sí, estoy completamente seguro— Respondió Chico Bestia sintiendo nauseas con tan solo ver la carne moldeada. Había decidido mejor utilizar uno de los gorros de fiesta que tener que llevar esa horrible corona —Prefiero abrir mis regalo, pero ¿Cuál debo abrir primero—

Chico Bestia miro cada uno de los regalos, frotándose las manos con ansiedad, tras unos segundos finalmente tomo uno de los regalos.

— ¡Aja! ¡Este!— Exclamo Chico Bestia comenzando a desenvolverlo.

—Ese es mío— Comento Robin con una sonrisa.

Chico Bestia rasgo el papel de regalo como niño en navidad, revelando el regalo de Robin. Se trataba de un uniforme nuevo. Chico Bestia tenía los ojos abiertos por el shock mientras mantenía en alto el uniforme.

— ¡Viejo! ¡Esto es genial!— Exclamo Chico Bestia con felicidad.

Con el tiempo sus antiguos uniformes se habían desgastado por el tiempo e inclusive algunos le quedaban muy ajustados, desgraciadamente nunca había tenido la oportunidad de conseguir uno nuevo. Por lo que había estado caminando por todos lados con su apretado y desgastado uniforme; Las mangas le llegaban a los codos y el pantalón le llegaba hasta las rodillas. Había sido todo un espectáculo digno de ver.

—Estaba seguro de que te gustaría— Dijo Robin con una enorme sonrisa —.Esta hecho del mismo material que tu antiguo uniforme, pero, como puedes ver, me tome algunas libertades. Este nuevo traje sin duda debe ser de tu talla y permitirte moverte sin ninguna restricción. —

— ¡No puedo esperar a probármelo!— Exclamo Chico Bestia dándole un abrazo a su nuevo traje. Tras unos segundos lo puso a un lado y tomo otro regalo. Vio una etiqueta pegada a un lado que decía "Para: Chico Bestia, De: Cyborg". Rápidamente destrozo el envoltorio y contemplo el videojuego que había en el interior.

— ¡No es posible! ¿Es…es….es?— Dijo Chico Bestia comenzando a hiperventilarse.

— ¿El próximo y más grande videojuego, uno que ni siquiera se ha dado conocer al público, una copia exacta de Mega Monkeys 3000?...Si, si lo es— Dijo Cyborg con una enorme sonrisa.

— ¿Cómo lo conseguiste?— Pregunto Chico Bestia besando su nuevo videojuego.

—Oh, tengo mis contactos— Respondió Cyborg.

Chico Bestia dejo el juego a un lado y tomo uno de los dos regalos restantes.

— ¿Me pregunto que podrá ser esto?— Se preguntó Chico Bestia dándose cuenta que el regalo era un poco pensado.

—Ese regalo es mío, Chico Bestia —Dijo Starfire dándole una radiante sonrisa.

Chico Bestia desenvolvió el regalo y se sorprendió de ver… ¿Una tostadora?. Chico Bestia observo el regalo algo confundido, al igual que los otros tres titanes, pero forzó una sonrisa en su rostro, para no hacer sentir mal a su amiga —Eh…muchas gracias, Star—

— ¿Acaso no te gusta?— Pregunto Starfire toda desanimada.

— ¡Oh, no! ¡Me encanta!— Respondió rápidamente Chico Bestia —.Siempre quise una tostadora para mí mismo, muchas gracias—

— ¡Sabia que te encantaría, Chico Bestia!— Dijo Starfire dándole un pequeño beso en la mejilla.

Los otros Titanes trataron de reprimir las ganas de reír. Siempre era divertido cuando Starfire estaba siendo tan dulce y sincera con sus amigos. Chico Bestia entonces tomo el último de los regalos y lógicamente tenía que ser el de Raven. No estaba muy seguro de lo que seria. El la miro para ver si podría darle algún indicio, pero ella apenas parecía interesada en la fiesta. Más bien parecía aburrida e incluso un poco molesta. Finalmente lo desenvolvió y el regalo resulto ser un espejo, pero a Chico Bestia el espejo le resulto muy familiar.

—Uh…gracias, Raven —Dijo Chico Bestia observando a la empática —Esto me resulta bastante familiar—

—Es un espejo para meditar —Dijo Raven —Es igual al que yo tengo—

—Oh—Respondió Chico Bestia inspeccionando el objeto —Y ¿Cómo funciona?—

—Solo sostenlo, cierra los ojos y estarás dentro de tu mente —Respondió Raven— Y para poder salir, simplemente cierra los ojos y piensa en tu habitación o el lugar donde estuviste antes de ingresar—

—Genial— Respondió Chico Bestia. Nunca se le había ocurrido la idea de visitar su propia mente, pero ahora la idea resultaba interesante —Supongo que voy a tener que comenzar a meditar—

—Tú no tienes que hacerlo— Comento Raven —Solo pensé que sería una manera de poder, ya sabes…mantenerlo bajo control. Por ejemplo, como yo la mantengo bajo control—

—Hey, esa es una buena idea — Dijo Chico Bestia poniendo el espejo a un lado —Gracias chicos, estos regalos son sensacionales. Todos ustedes son geniales—

— ¡Feliz cumpleaños, Chico Bestia!— Dijeron todos juntos con una sonrisa.

Esa misma noche, cuando la fiesta de cumpleaños había terminado, Chico Bestia se dirigió a su habitación para probar todos sus regalos. Primero se puso su nuevo uniforme y se miró al espejo. El traje le quedaba como anillo al dedo, se flexiono un poco, el traje mostraba sus nuevos músculos bien tonificados. El mutante estaba feliz con el resultado. A él le gustaba su nuevo cuerpo, el cual era mucho mejor que cuando apenas era un pre-adolecente, cuando se convirtió en un titán. Ahora era más alto, casi tan alto como Robin y ahora en realidad parecía mas un hombre que un chico…Si, estaba bastante satisfecho con los resultados.

Después decidió jugar su nuevo videojuego, jugo durante varias horas hasta que finalmente llego al séptimo nivel, fue entonces que decidió tomar un merecido descanso. Sus ojos comenzaron a cansarse y hasta podría jurar que por el rabillo de sus ojos podía ver varios monos. Así que decidió ir a la cocina y utilizar su nueva tostadora. Él estaba feliz pues la tostadora hacia tostadas a la perfección. Por lo que el regalo no era totalmente inútil.

Regreso a su habitación y vio que solo quedaba un regalo por probar. El espejo. El objeto se veía bastante viejo, como una antigüedad, muy parecido a lo que Raven tiene en su habitación. Se sentó en su cama y lo observo fijamente.

— ¿Me pregunto si debería probarlo?— Se preguntó a si mismo Chico Bestia. Entonces decidido lo levanto y cerro sus ojos. De repente sintió como si una especie de energía lo estuviera rodeando y cuando abrió los ojos observo que ya no se encontraba en su habitación.

El cielo era azul y lleno de nubes blancas que parecían más bien como enormes almohadas. Se dio cuenta de que estaba de pie sobre un hermoso prado de hierba verde. También mas adelante podía divisar un camino de piedra que conducían a diferentes lugares. El miro sobre su hombro y vio lo mismo. Luego miro a su alrededor y vio que en total había ocho caminos diferentes.

—Debo estar en medio de mi mente— Dijo Chico Bestia mientras se rascaba la cabeza —Supongo que no estaría mal echarle un vistazo—

Dicho esto cerró los ojos, extendió el brazo y comenzó a dar un par de vueltas, unos segundos después se detuvo. Vio el camino que su brazo señalaba y decidió ir a investigar ese lugar primero.

El lugar parecía bastante normal…eso hasta que llego a la mitad del recorrido. Fue entonces, que todo a su alrededor comenzó a brillar. El cielo azul comenzó a cambiar, las nubes comenzaron a desaparecer, el azul del cielo se volvió brillante y el aire se sentía más caliente. Aun así decidió seguir adelante, tras unos minutos podía sentir una fresca y dulce frisa. Cuando llego al final del camino, vio un enorme prado lleno de gruesa y alta hierba, con flores creciendo a su alrededor. También había un enorme árbol en medio del prado.

—Por favor…que este no sea el hogar de Valiente— Suplico nerviosamente Chico Bestia.

De repente escucho a alguien riéndose detrás de él. Rápidamente se dio la vuelta y se vio a sí mismo, solo que su traje era de un color azul claro. Chico Bestia se sorprendió, dio un pequeño grito y dio un salto hacia atrás alejándose de su copia.

—Ahora tú las traes— Grito el Chico Bestia con el traje azul claro, mientras le daba un empujón a Chico Bestia. El mutante cayó al suelo y el Chico Bestia del traje azul claro comenzó a huir mientras soltaba varias carcajadas.

—Muy bien, ese debe ser Feliz— Dijo Chico Bestia poniéndose de pie. Entonces observo como feliz comenzó a transformarse en diferentes animales y corría sobre el prado. Comenzó a rodar sobre su espalda y vio cómo su copia disfrutaba de la calidez que le daba el sol.

— ¡Vamos, atrápame!— Grito Feliz a Chico Bestia.

—Lo siento, pero ya no juego a los encantados desde hace años— Respondió Chico Bestia con una sonrisa.

— ¡Pues yo aún lo hago!— Dijo Feliz corriendo hacia Chico Bestia, mientras lo tocaba de nuevo y comenzó a correr lejos de él — ¡Vamos, juega conmigo! No estoy acostumbrado a tener visitas—

—Tal vez mas tarde— Prometió Chico Bestia —Solo estoy de paso—

—Muy bien, es una promesa— Dijo Feliz con una sonrisa.

—Está bien, entonces nos veremos más tarde— Dijo Chico Bestia. Feliz le dio un abrazo de despedida y se marchó corriendo hacia el gigantesco árbol mientras como un mono, comenzó a balancearse en sus ramas. Chico Bestia simplemente sonrió, estaba muy contento de poder conocer su lado feliz.

El siguió caminando por el sendero hasta que de nuevo llego al centro de su mente, otra vez. Esta vez decidió ir a la derecha, de esa manera podría visitar cada una de las zonas que conformaban su mente. Así que decidido tomo el camino de la derecha que estaba junto al de Feliz.

Continuara…


La verdad ya tenía medio capitulo traducido de esta historia hace unas cuantas semanas atrás, cuando comencé a traducir Philophopia. Esta historia tampoco es muy larga pues cuenta con 12 capítulos, pero en esos doce capítulos, la autora escribió uno de los mejores trabajos BBRae que he visto, por lo que me gustaría saber que piensan ustedes.

Ya lo saben chicos y chicas, no hay comentarios, no hay continuación, es de esta manera de la que me entero que están leyendo esta historia, ya saben lo que pienso ¿Qué chiste tiene seguir algo que la gente ni siquiera esta leyendo?