*Alyss toma escoba y trapeador, para limpiar el polvo y telarañas de este fic*
Eh… ¿Hola? Sí, esto es real, no es una ilusión de Kid ni nada. Después de casi un año, vengo a actualizar esta serie de pecados, en la que siempre trató de dar mi mejor esfuerzo. Nada más quería pedirles una disculpa a todos por mi falta de responsabilidad. Sé que no tengo vergüenza, pero no había tenido inspiración. Nunca voy a abandonar un fic, tardaré, pero no lo dejaré.
Además, que éste fic será de mis últimos aportes al fandom, bueno, quizás me aparezca con alguno que otro one-shot. Pero ya no más proyectos largos, o sea, long-fics.
Aprovecho en decirles que los anteriores pecados, están en proceso de edición, para que estén, por así decirlo "en una versión mejorada" y con mayor calidad nwn
¡Espero que disfruten este nuevo pecado y esperen con ansias el siguiente y último!
¡Y superamos las 4000 visitas en Los Sietes Cuervos del Pecado! ¡Qué alegría, muchísimas gracias!
Anime: Detective Conan.
Pecado: Ira.
Personajes de DC: Makoto Kyogoku y Sonoko Suzuki.
Rating: Para todas las edades :D
Disclaimer: Detective Conan y sus personajes, no me pertenece, todos los derechos de autor van para su creador, Gosho Aoyama. A excepción de un personaje que, sólo él, me pertenece.
¡Disfruten!
"Ira"
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— ¡Mal, todo esto está muy mal! —se quejaba a gritos la mejor amiga de Ran; Sonoko Suzuki, llevándose las manos a la cabeza y sacudir sus cabellos en señal de notable frustración—. ¡Pésimo!
—Pe-pero señorita…—un temeroso joven, temblaba con los gritos que oía. Era su primer día de trabajo en la corporación Suzuki. Desgraciadamente, la labor que se le fue asignada, fue la de ser el empleado personal de la castaña, quien estaba acompañada de su novio.
— ¡No hay excusas! —lo interrumpió de forma brusca— ¡No muestres tu inepta cara hasta que me prepares un buen pastel! —sentenció con firmeza. Hacia un gesto de desagrado al recordar el sabor, en extremo dulce, del erróneo aperitivo—. ¿Qué esperas? ¡Lárgate!
— ¡S-Sí! — ¡Ojala hubiera sabido antes que iba a tratar con esa infantil chica! Había estudiado contaduría, no gastronomía. Cómo si fuese a preparar un buenísimo pastel al segundo intento. Sí, el primero también resulto un error. ¿Ella era así de enojona y mandona siempre? Qué horror. Miró por el rabillo del ojo al novio de Sonoko, ¿cómo carajos lograba aguantarla?
Ni idea, la verdad. La mente del muchacho de cabellos rubios y ojos grises, no veía la lógica.
Quizás era masoquista.
Con los nervios a flor de piel, pues la pareja del chico de piel morena lo seguía mirando, casi matándolo con la vista para que se fuera, terminó por hacerlo. Yéndose a la cocina a preparar lo que Suzuki solicitaba.
Suspiró con resignación, rogaba por hacerlo bien.
Una vez el muchacho de traje negro se retiró, motivo por el que mantuvo el entrecejo fruncido, hasta asegurarse que ya se había ido, relajó su expresión. Convirtiéndose en la habitual. Makoto, al verla ahora, rió con suavidad. Sonoko, al escucharlo, menguó su molestia y se ruborizó como niña pequeña.
— ¿P-pasa algo? —preguntó tímida, incapaz de enlazar miradas con él.
Qué abrupto cambio, la verdad. La sonrisa del karateka se hizo cada vez más amplia. Ese lado de Sonoko, sólo él la podía contemplar. Una faceta exclusiva. La Suzuki enfurecida de anteriores momentos, desapareció por completo, al estar a solas con su pareja.
—Nada en especial. —musitó con sinceridad, alzando un poco más los bordes de sus labios. El rostro alegre que exhibió el moreno, ocasionó que el corazón de la chica palpitara.
Si algún conocido, a excepción de Makoto y Ran, no la reconocería si la vieran así. Y era normal. Después de todo, la gran parte de las personas, conocían a la irritante, egocéntrica y escandalosa Suzuki. Además de demostrar cada vez que tenía oportunidad, su genuino y leal fangirlismo que le dedicaba a Kaito Kid.
Sí, esa era la faceta que el resto conocía. Sólo sus personas más cercanas; su mejor amiga y novio, conocían todas y cada una, sobre todo, la auténtica.
Y si a ambos se les cuestionara, cuál fuese el mayor defecto de la chica de abundante riqueza, sin cavidad de dudas, responderían al unísono: su incapacidad de mantenerse calmada, cayendo irremediablemente en la ira, por cualquier cosa, desde las que las ameritan… hasta las insólitas.
Como el sabor muy dulce de un pastel.
Es más, existían las veces que hasta ellos eran víctimas del mal humor de la castaña. Ran permanecía estable cuando eso ocurría, aunque Makoto juraba que gritaba internamente en exasperación. Por esa razón, la karateka se veía afectada, y Kudo tenía que esquivar una que otra patada la cual, amenazaba con dejarlo en K.O.
Porque la ira es contagiosa.
Si existiera un premio a la persona más tolerante y paciente del mundo, sin lugar a dudas, el merecedor de ese reconocimiento, sería Makoto Kyogoku. Por mostrarse sereno ante el carácter de su novia, Sonoko Suzuki. Quien estaba dispuesta a arrancarle la cabeza o retirarle algunos dientes, a cualquiera que la hiciera enfadar.
Pobre, pobre mayordomo, él era el más cercano a sufrir algo parecido. Kyogoku también quería que saliera bien el postre.
— ¿Cómo que nada? —la voz de su pareja, lo sacó de sus cavilaciones. Sonaba insatisfecha por la respuesta que él le dio. Si se hubiera tratado de alguien más, por ejemplo el fanático de Holmes, éste recibiría un exclamo de furia.
Cuando trató de responder, se vio interrumpido por el aviso de llegada del anterior mayordomo principiante. El rostro de finas facciones de Sonoko, se desfiguro a uno que transmitía pleno enojo.
— ¿¡Qué esperas a traerlo!? — asustado y apresurado, el chico le entregó el pastelito que, esperaba, fuese del agrado de la Suzuki.
Ésta última tomó la diminuta cuchara de diseño elegante, que yacía al lado del plato. Con lentitud, partió un pedazo. Makoto notó que ella se divertía con ver la ansiedad del otro chico. Quizá como venganza por el sabor en extremo dulce, del anterior aperitivo.
—Se-señorita… pruébelo. Por favor…—pidió con timidez. La serenidad de la nombrada, le ponía los pelos de punta.
— ¡No me apresures! —gritó luego de refunfuñar. Para más tarde, finalmente, probar un bocado.
Tanto Makoto como el muchacho de cabellera dorada, aguantaron el aliento a la espera de una valoración por parte de la joven. En especial positivas, el rubio no quería oír más gritos. Sus suplicas fueron oídas. Sonoko se lamió los labios, y sonrió.
— ¡Buen trabajo, inútil rubio oxigenado! —torció levemente la boca por el insulto, pero nada pudo vencer al alivio que lo consumió en esos momentos.
Observó el rostro de la castaña que, anteriormente sólo lo valoraba como soso y sin gracia. Ahora lo veía reluciente y alegre. Siendo así, menos irritable, quejosa y criticona… Era algo agradable.
Detuvo todo pensamiento, en el instante que sintió una amenaza por cortesía del moreno. ¡Con razón era un campeón de karate! Con miradas de ese tipo… era capaz de aterrorizara sus oponentes, fácilmente.
—Oye. —Sonoko atrajo su atención. Él tardó en responderle, los ojos verdes contrarios, lo incomodaban a gran nivel.
— ¿S-si?
— ¿Cuál es tu nombre? —preguntó con interés—. Ya que trabajaras para mí, es adecuado que lo sepa.
«¡Pero si ya se lo había dicho! —pensó el mayordomo, perplejo. ¿Tan poca atención le ponía? Bueno… cuando se presentó, ella ya estaba de mal humor—. Qué se le va a hacer…»
—Hayato Kou. —respondió, haciendo una ligera reverencia. Y sin esperárselo, ella tomó sus manos en un gesto amigable y casto.
—Un gusto conocerte. —Sonoko alzó las comisuras de sus labios, demostrando una sonrisa brillante.
Si su jefa no estaba gritándole enfurecida… sonriendo de esa forma, podría ser… linda.
Un escalofrío que, viajó por su columna vertebral, activó sus instintos de supervivencia. Palideció un poco y miró hacia el lugar del karateka. Éste parecía ahuyentarlo con la mirada, Kou se sintió como un pequeño chihuahua intimidado por un tigre. No aguantó, y sin decir una palabra más, terminó saliendo de ahí. O mejor dicho, huyo por su vida.
— ¿Qué le habrá pasado? —cuestiono con inocencia la fémina, inclinando la cabeza hacia un lado. Confusa por la huida que dio su ayudante.
—No lo sé. — Makoto mintió y se encogió de hombros. Honestamente, no podía dar quejas hacia la ira que poseía Suzuki. Él también la tenía. Sin embargo, existía la diferencia de que el moreno, la sacaba a relucir cuando alguien quería dañar a la castaña, o demostraba cierta atracción. Él había luchado por ella, protegiéndola de todo peligro. Sin importarle que aquello, le conllevara a herirse. Inclusive, estuvo más que dispuesto cuando se enfrentó contra Kid.
Makoto anhelaba ser el único en el corazón de Sonoko.
Sin prestarle más atención, olvidó el asunto y se concentró en consumir el pastelillo que el otro varón le preparó. En cuestión de instantes, una exclamación que denotaba sorpresa se escapó de su boca.
— ¡Olvidé decirle que preparara uno para ti! —se palmeó la frente, lamentándose. Había pensado sólo en sí misma—. Voy a pedírselo —hizo el ademan de levantarse, pero Makoto la detuvo al agarrarla por la muñeca.
—No lo necesito, pues te tengo a ti. —con esa declaración, una duda se alzó en ella. ¿Qué quería decir con eso? En el momento siguiente, ese misterio fue respondido. Los labios de su pareja, contactaron los suyos. Contenta y complacida, respondió la acción.
Porque para el mundo, Sonoko Suzuki era la muchacha heredera de una gran fortuna; para algunos, era caprichosa y escandalosa, irritable; para otros, se trataba de un chihuahua malhumorado… pero, para Makoto Kyogoku, se trataba del amor de su vida.
Realmente me parece triste, pero al mismo tiempo gracioso, que el ship del MakoSono sea la más infravalorada en el fandom. Después del SaguAka, claro. Pero, de hecho, el MakoSono, quieran o no, es la pareja más canon en todo el universo de Gosho. ¿Motivo? Ellos sí son pareja. Aunque claro, ya están las evidentes que lo serán, mas falta aún mucho
¡Hora de responder reviews~!
Shihoran: Aww, gracias :3 Me alegra que te gustase. Heiji es tu amado husbando, junto con Mika. Y claro, son tuyos… aunque Mika también me gusta. Pero tengo a Saruhiko, y él es la personificación de la perfección (envidiando de por vida a Misaki). Y con él soy feliz. Así que quédate con ellos dos. Lo sé, yo también, aunque ya no hablemos tanto por la diferencia de horarios y mi rutina agitada. Eres la mejor BD
Artemisia: Cuando vi tu review, me sonrojé como no tienes idea. Palabras como las tuyas son las que me hacen tener autoestima y saber que, lo que escribo, le gusta a la gente. Motivándome a continuar escribiendo. Por eso, continúe con esta saga. No la iba a dejar. Y bueno, gracias por leer.
Illusion of Crystal: Oh, mil perdones para ti, en verdad. Jamás dejare abandonado un fic. Kazuha me encanta, su dinámica con Heiji me resulta carismática y cómica. Perfectos para ese pecado. Aunque me hubiera gustado hacerlo SR también, porque Shin es bastante soberbio y egocéntrico, y Ran aguantándolo XD pero me gusto más con el KazuHei. A Sonoko, en compañía de Makoto y Kou, los deje para este pecado. Eres mi lectora favorita, reviews como las tuyas son las mejores. La pereza es la pereza y Kogoro es Kogoro (?) Gracias por leer, y disculpa la tardanza.
SilverBullet: Ese fic fue y es horrendo con toda la expresión de la palabra. Haber visto tu review fue una grata sorpresa. Ayyy, ¡me sonrojas! Escribir esa parte me emociono y me hizo fangirlear. También es mi favorita. Mis feels por el SR eran intensos en aquel entonces. Gracias por leer.
anonimadoragomitas: AWWWW. CALLA QUE ME SONROJO. Pues sí que me dedicare al lemon, pero no al hetero XDD bueno… quizás sí, pero hacerlo es muy vergonzoso XD Ayyyy, muchísimas gracias por tenerme así. Amo a las/os lectoras/os así como tú. ¿Segura que eres más pervertida que yo? Gomita, no has visto nada XD Y es lemons :3 Gracias por leer.
RanKudoi: Exactamente, pero si Shiho no está con Shinichi (me surgió el placer culposo, no me juzgues) la veo con Akai o… CON HIGO. Ohh, cuando yo escribía ese one-shot, estaba súper avergonzada. Aunque ya no hare lemons ShinRan, lo siento XD A no ser que sean… Me callo. El yaoi me ha dominado por completo :"D Y me gusta mucho imaginar a Ran como chico, no sé, me agrada. Gracias por leer.
Y bien, eso es todo por ahora. Hoy es un día especial, y a quien sepa el porqué, recibirá un premio (?) Bueno, realmente no, de hecho, lo pensaba publicar como mi aniversario de ficker, pero no pude. Asi que no hay premio c8 En fin, si gustan, los invito a visitar mi facebook para estar informados sobre mis fics uwu/
Espero que les haya gustado nwn
¡Ciao~!