¡OHAO! ¡KONNICHIWA! ¡COMBAWA!

A la hora que estén viendo esto xD

Ammmmm en definitiva me tarde mucho con este fic... Gomenasai

bueno como algunos me exigieron la conti aquí se las traigo

pero como ya lo explique en mi perfil la tercera parte estará hasta finales de febrero o a principios de marzo

EXAMEN DE ADMISIÓN

me tengo que poner a estudiar u.u

por cierto aqui voy a aplicar una manera de poner interbalos de silencio y es:

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Les dijo para que no se confundan

sin más los dejo con la conty

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Los finos trajes, los hermosos vestidos, las carísimas joyas, los lujosos autos y la fina repostería, un sinfín de cosas con las cuales ella no encajaba, no le agradaban en lo absoluto y podría decir una y otra vez que las odiaba, pero ahí se encontraba ella, sentada con la mirada baja viendo al piso que a su parecer era más interesante que esa tonta "reunión" a la que su padre la había obligado a ir.

Sin mucho tiempo para cambiarse, en cuanto regreso a casa tomo el primer vestido negro que vio en su armario, se desenredo el cabello y se puso los primeros zapatos que vio, sin maquillaje, sin joyas que presumir, sin un vestido nuevo que lucir, siendo simplemente un cero a la izquierda en esa aburrida fiesta.

Un mesero se le acerco con una copa de vino, Hinata la rechazo amablemente y el mesero antes de retirarse le dejo una nota enviada por su "santo" progenitor.

La tomo con desdén y la leyó haciendo una mueca.

"Te dije claramente que te pusieras el vestido que estaba en tu cama… por una vez en tu vida compórtate y ven a presentarte como es debido"

Escrito con puño y letra de su padre.

Suspiro con cansancio y busco con la mirada a su padre, no tardo mucho en encontrar su larga cabellera café, su padre la miraba discretamente y con los ojos le decía que se acercara, se levanto de su asiento y camino donde se encontraba, un hombre de ojos blancos y cabello grisáceo se acerco a Hinata y con cierta confianza la tomo de la mano

—Disculpa bella dama me parece que se le cayó esto—dijo el hombre con una voz seductora enseñándole un pañuelo blanco.

—S-se equivoca eso no es mío—Contesto la Hyuga mientras examinaba al sospechoso.

— ¿Enserio?—dijo el hombre fingiendo estar extrañado—estoy seguro de haber visto que usted era la dueña de este pañuelo hace unos segundos—la tomo de la mano y le coloco el pañuelo en la palma de la mano, después cerro su mano con delicadeza y sujeto la pequeña mano de la ojiperla entre las suyas.

—p-perdone… —Hinata parpadeo confundida y desvió la mirada—no haga e-eso… p-por favor—le pidió al desconocido quien con una sonrisa y los ojos cerrados la soltó con delicadeza.

—disculpa mi atrevimiento… ni si quiera me he presentado ¡que torpe soy! Jajaja— rio falsamente e hizo una reverencia de ciento ochenta grados—Mi nombre es Toneri Otsutsuki—se presento ante la Hyuga.

—U-Un placer Otsutsuki-san… mi nombre es… —.

—Hyuga Hinata—la interrumpió Toneri—se perfectamente quien es usted… mi madre y mi padre… eran viejos amigos—Dijo Toneri con una sonrisa de lado, tomo una copa de vino tinto que traía un mesero en ese instante—Estoy seguro que a Hiashi-san no le molestara que vayamos a tomar una copa—dijo mientras jugueteaba con el vino.

—¡Hinata!—la mencionada viro el rostro hacia la persona que clamaba su nombre, sus ojos brillaron por un momento al ver una rubia cabellera acercarse hacía ella, Toneri simplemente miro de mala gana al tipo que le había robado toda la atención de la Hyuga.

—U-Uzumaki-san—susurro Hinata como saludo cuando lo tubo de frente mostrando su blanca dentadura con una sonrisa zurrona.

—¡Tienes que venir conmigo ttebayo!… ¡Te voy a presentar a mi padre y a mi madre!—la tomo de la mano y estaba a punto de retirarse cuando Toneri tomo del brazo a la Hyuga.

—Disculpa pero la señorita y yo estábamos teniendo una amena charla—dijo Toneri con una sonrisa falsa.

—¡Lo siento mucho!—Naruto hizo una reverencia—¡Estoy seguro que más tarde tendrán su "amena charla" por ahora me robo a esta linda "señorita" ttebayo—inconscientemente Naruto se burlo del muchacho, le sonrío como él solamente sabe hacerlo y se llevo a una sonrojada Hinata.


Fue una gran sorpresa para la Hyuga despertarse con los rayos del sol, desde hace algunos meses que este se empañaba en esconderse entre las nubes haciendo que los habitantes de la ciudad de Konoha se acostumbraran a los días nublados y fríos.

Se levanto con un poco de pesadez y se dirigió a su baño, se lavo los dientes, se dio una buena ducha con agua tibia para despertar como debe de ser y se puso su uniforme del colegio, después sin muchos ánimos bajo a desayunar y como era de costumbre, su padre no la acompañaría en el desayuno.

—Buenos días Hinata-sama—saludo su mayordomo Ko con una respetuosa reverencia.

—Buenos días Ko-san—respondió ella mientras se sentaba en la mesa y se serbia un poco de jugo de naranja— ¿Dónde está Otto-san?—pregunto más por costumbre que de corazón.

—Hoy tenía una reunión muy importante con Namikaze Minato—respondió el mayordomo.

—Ya veo—contesto Hinata mientras perdía su mirada en su desayuno—Mi padre está muy interesado en esa familia—pensó internamente.


Llego a la academia con cinco minutos de adelanto, tomo sus zapatos del casillero correspondientes y se dirigió a su salón para tomar la primera clase del día.

Llego al aula y la encontró completamente vacía, nadie llegaba temprano a clases y mucho menos con Kakashi, él siempre llegaba tarde, dirigió su vista a la ventana y se perdió en sus pensamientos.

Esperaba estar sola como unos diez o quince minutos pero para su repentina sorpresa una bolsa escolar se dejo caer en la silla que estaba alado de ella haciendo que diera un brinco del susto, viro la mirada y se topo con un par de ojos azules que la veían fijamente.

—Buenos días ¡ttebayo!—saludo con una sonrisa enseñando toda su dentadura.

Ella alzo ambas cejas y enfoco su vista nuevamente hacia la ventana, al ver que ella lo ignoraba el rubio hizo un puchero y se acerco a ella, puso una de sus manos en su cabeza y la otra la recargo en paleta de la butaca.

—¡Buenos días Hinata-chan!—Saludo el rubio nuevamente, ella giro la vista con el ceño fruncido decidida a pedirle que guardara su distancia para con ella pero no contaba con que el rubio se acercara demasiado a ella, sus mejillas ardieron en un ligero color carmesí cuando sus labios fueron a dar a la mejilla del rubio, este se sorprendió un poco y al igual que ella sus mejillas se sonrojaron aun que por el tono de piel, no se noto tanto como los de la ojiperla.

Después de unos cuantos segundos ella se separo bruscamente y lo empujo para que se apartara.

—¡¿Q-que crees… q-que haces?!—dijo la ojiperla mientras con una de sus manos cubría sus labios y parte de sus mejillas sonrojadas.

—y-yo… y-yo no… —tartamudeo el rubio desviando la mirada, se rasco la nuca y después sonrió como idiota. Una corriente eléctrica recorrió el cuerpo de la ojiperla, aquella sonrisa no le daba nada de confianza—Gracias… por los buenos días—le dijo con un ligero rubor en sus mejillas, ella se volteó bruscamente y respiro hondo tratando de bajar el sonrojo de sus mejillas.

Hinata nuevamente tomo asiento en su lugar a un con las mejillas pintadas de rojo.

—¡Hoy quiero presentarte a alguien!—dijo el rubio animado mientras se sentaba a lado de Hinata quien lo ignoro olímpicamente—aun que es un poco agresiva… estoy seguro que te caerá muy bien—Hinata volteo a verlo con los ojos tristes.

—y-ya te dije q-que no necesito que m-me ayudes—susurro la Hyuga casi en un tono de voz apenas audible, aun así el rubio logro escuchar lo que ella decía ya que él salón de clases estaba en total silencio.

—¡soy un ángel!… ¿recuerdas?—las mejillas de Hinata nuevamente se llenaron de un ligero color carmesí mientras sus ojos se habrían de par en par—yo soy tu ángel y prometí ayudarte… así que… por favor Hinata… no me rechaces—le pidió el rubio decidido.

Hinata simplemente le dirigió la mirada un poco confundida, ¿cuándo fue la última vez que pudo confiar en alguien?

Después de la primera hora, todo el mundo salió corriendo hacia la cafetería ya que esta en un dos por tres se llenaba y en un abrir y cerrar de ojos la comida se acababa, claro que no todos compraban en la cafetería, algunos cuantos llevaban almuerzos desde sus casa tal como Hinata lo hacía desde que tenía memoria, le gustaba más la comida que preparaba su chef personal, Minori esa amable chef que cuando era niña le daba a hurtadillas de su padre rollos de canela.

Subió a la azotea junto con su bentou que resulto ser arroz con camarón y rollitos de primavera y de postre, su favorito, los ya mencionados rollitos de canela, se sentó en el suelo a saborear su rico almuerzo, mientras sacaba sus palillos para comer, la puerta de la azotea se abrió repentinamente.

—¡Hinata aquí estas te estaba buscando ttebayo!—grito animado el rubio escandaloso, Hinata lo observo confundida—quería presentarte a alguien ¿recuerdas?—se hizo a un lado y atrás de él entro una chica de cabello rojo y ojos muy bonitos color violeta opacados por unos lentes cafés.

—¡Ohao!—saludo la chica con una ligera sonrisa mientras se acomodaba los lentes—con que tu eres la famosa Hyuga Hinata de la que tanto habla mi hermanito ¿verdad?—le pregunto mientras se acercaba a ella y le extendía la mano a una confundida Hinata—Soy Karin Namikaze Uzumaki… la hermana menor de aquel idiota—señalo al rubio, Hinata con un poco de desconfianza le extendió la mano y la pelirroja se aferro a ella y la zarandeo animadamente.

—¡oye Karin!… ¿a quien le dice idiota!—replico el rubio con un puchero.

—¿no es obvio?… eres el único idiota aquí—le contesto la pelirroja.

Hinata observo con una gotita en la cabeza la conversación que llevaban a cabo los hermanos Namikaze-Uzumaki, un poco confundida tomo sus palillos y se llevo el bocado a la boca.

—¿Qué comes?—le pregunto Karin mientras se acercaba curiosa a su bentou.

—s-son… s-son—Hinata se puso un poco nerviosa, esa chica era más curiosa que el rubio.

—¡son rollitos de primavera!—exclamo emocionada la pelirroja—¡¿los hizo tu mamá?!—pregunto Karin sin saber el enorme dolor que esa pregunta le había causado a la Hyuga.

—D-Desde hace mucho que… m-mi madre no cocina para mí—susurro Hinata dolida, Karin la vio avergonzada por su imprudencia y Naruto le dirigió una mirada de compasión.

—l-lo siento mucho—se disculpo Karin, Hinata negó con la cabeza, extendió su comida hacía la pelirroja.

—m-mi chef me p-preparo mucho… e-estoy llena… ¿Q-Quiere probar?—Karin asintió gustosa entendiendo que Hinata quería deshacer la tención que se había hecho por aquella incomoda pregunta.

Naruto vio los pasos tímidos y los tiernos sonrojos de aquella muchacha, entonces se dio cuenta, Hinata… nunca antes había compartido su bentou con otra persona.

Definitivamente voy a protegerte ttebayo—pensó con una sonrisa.


La empresa Otsutsuki en su tiempo fue una de las empresas más importantes del mundo, hoteles, centros comerciales, escuelas privadas, tratos y contactos de las personas más ricas y poderosas del mundo, en su tiempo trabajar para las empresas Otsutsuki era un privilegio y la paga era rigurosa pues con un sueldo podrías cubrir más de tus necesidades básicas.

No obstante hace una década apareció un fuerte rival para las empresas Otsutsuki, las empresas Hyuga arrasaron con todo a su paso ganándose la confianza de más de una empresa y de esa manera la empresa Hyuga creció dejando casi en banca rota a la empresa Otsutsuki.

Kaguya Otsutsuki en un intento de desesperación planeo hacer las empresas Hyuga y Otsutsuki uno solo, más sin embargo Hiashi Hyuga se negó a su oferta ya que todo el mundo sabía que aquella empresa no tenía remedio y no iba a permitir que el imperio Hyuga que le costó tiempo y dinero levantar callera en manos de una artimaña como Kaguya.

Su única salvación era unir a las empresas por la fuerza… y esa era la misión de Toneri el heredero de aquellas empresas perdidas… su trabajo era enamorar a la princesita Hyuga, como él la llamaba, y casarse con ella para unir ambas empresas, pero al parecer alguien más ya se la había adelantado.

—¡Esto no puede estar pasando!—reventaba de rabia una mujer de cabellera blanca.

—Ese mocoso llego junto con ella ¿qué esperabas que hiciera?—se defendió Toneri.

—¡eres un bueno para nada!—grito nuevamente la mujer desde su escritorio—¡¿qué tan difícil es enamorar a una chiquilla malcriada?!—dijo explotando de furia.

—hey… la cosa a un no esta pérdida… es la primera vez que socializamos… además… estoy seguro que estuvo pensando en mi toda la noche—dijo Toneri confiado de su apuesta y bien parecida apariencia subiendo los pies al escritorio.

—a un idiota como tu… ni si quiera en mi más locos sueños—dijo Kaguya con sarcasmo viendo al haragán de su hijo—¡baja los pies de la mesa!… ¡¿crees que esto es un bar o que te crees?!—dijo molesta—mejor ve a trabajar o mínimo pensar en cómo vas a enamorar a esa chiquilla—y lo corrió de su oficina con más regaños e insultos.


Al terminar el receso, los tres regresaron a sus respectivas aulas.

Después de la última clase, Hinata se dirigió a su casillero, saco sus zapatos y dejo los anteriores.

Del otro extremo de los casilleros se encontraban Nagato y Suigetsu, ambos la miraban de reojo y después sonreían con malicia.

Hinata, sin darse cuenta que Nagato se acercaba por atrás, se agacho para ponerse bien los zapatos cuando una mano la tomo del brazo y la jalo hacia enfrente haciendo que ella estuviera a punto de caer y los mismos brazos la sostuvieron para impedirlo, alzo la vista para toparse con un par de gafas cafés y un cabello pelirrojo.

—K-Karin-san—susurro sorprendida a la pelirroja que mantenía el seño fruncido.

—¿Estás bien Hinata?—le pregunto el rubio que se encontraba frente a ella dándole la espalda y con las manos empuñadas.

—¿Qué?—pregunto confundida.

—Oye chico nuevo… no te metas en lo que no te importa—le dijo Nagato con voz seria y seño fruncido.

—Hinata es mi amiga y no voy a permitir que te burles de ella—le contesto el rubio con una voz espeluznante

—jajaja con que al chico nuevo le gustan las fáciles ¿no? Jajajaja—rio Nagato seguido de la risa de Suigetsu y algunos que se encontraban presentes, sin embargo la risa le duro poco cuando un puño se dejo caer con fuerza sobre su estomago seguido de una patada en la cara dejándolo semi inconsciente.

—tal vez mi hermano sea demasiado noble para no golpearte desde un principio—dijo Karin la causante de que Nagato se hallara en el suelo—pero yo no soy igual que él —amenazo mientras seguía de largo, Suigetsu la vio de arriba abajo.

Que chica—pensó asombrado mientras la veía caminar.

Naruto se dio medio vuelta y cogió de la mano a Hinata quien aun estaba confundida por lo que acababa de suceder, la llevo hasta el estacionamiento donde se encontraba su carro y le abrió la puerta del copiloto.

—No es… necesario—susurro Hinata pero el rubio le dirigió una mirada un tanto seria que sin duda ella no pudo contradecir, cuando finalmente estuvo dentro del carro Naruto cerró la puerta no sin antes sonreír de oreja a oreja.

Naruto ocupo el asiento del copiloto y encendió el carro, vio de reojo a Hinata y sonrió al verla sonrojada y escondida entre sus libros, se acerco a ella con la mirada fija en sus ojos, la ojiperla abrió los ojos como plato al tenerlo tan cerca, el rubio rodeo su cintura y cerró los ojos, ambos casi podían sentir el aliento del otro, Hinata un poco confundida observo cada facción de su rostro, su nariz un poco respingada, sus largas pestañas, sus extrañas marcas en las mejillas que la tentaban a acariciar su rostro y sus labios, sus labios parecían suaves, carnosos y un poco hinchados, ella también se fue acercando a él con la mera intención de probarlos, dejándose llevar por sus instintos y pensando que él quería lo mismo.

—¡aquí esta!—dijo el rubio animado mientras se alejaba y jalaba el cinturón de seguridad, Hinata abrió los ojos un tanto sonrojada, avergonzada y enojada consigo misma—¡vámonos!—y hecho andar el carro, lo que Hinata no sabía es que el rubio tenía la intención de besarla tal como ella pensaba, pero se abstuvo de hacerlo pensando en que ella se enfadaría mucho con él en especial porque la obligo a besarle la mejilla "accidentalmente" aquella mañana.

—P-Pero… ¿Karin-san?—pregunto Hinata con un poco de enfado en su voz escondiendo sus mejillas para que él no notara el sonrojo en ellas.

—se fue con Ino mi otra hermana… les encanta ir de compras… Karin quería invitarte pero yo no la deje ttebayo—confeso el rubio orgulloso.

— ¿Por qué?—pregunto Hinata confundida.

—hoy no te soltare en lo que resta del día—contesto Naruto ligeramente sonrojado

Nuevamente la ojiperla lo vio sorprendida.

—Pero yo… no puedo… —dijo Hinata entre susurros con los ojos perdidos.

—descuida, si es por tu padre no te preocupes… mi padre me comento esta mañana que tendrían una junta muy importante y que durara horas y seguro llegaran muy tarde ttebayo—dijo el rubio sin perder la vista del camino

—No… no es eso—contesto Hinata mordiendo su labio inferior—Detente—susurro un poco dudosa.

— ¿Qué?… ¿Por qué?—pregunto el rubio un poco confundido.

—Por favor—le pidió nuevamente.

—Hinata recuerda lo que hablamos ayer—él rubio estaciono el auto.

—recuerdo a verte dicho que no era necesario—dijo Hinata con el ceño fruncido.

—recuerdo a verte dicho que yo era tu ángel guardián— contraataco el rubio.

Hinata abrió los ojos de par en par, nuevamente esa frase la llenaba de recuerdos, recuerdos hermosos que siempre creyó que nunca volverían a suceder.

—¿c-como sé que puedo c-confiar en ti?—le pregunto con los ojos llorosos—¿C-Cómo se que n-no quieres lastimarme?… ¿C-cómo se que tus i-intenciones son buenas?—pregunto abrazando con fuerza sus libros y oprimiendo algunas lagrimas que querían salir.

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—Entiendo que no confíes en mi… —dijo el rubio rompiendo el silencio que se había creado—pero… sabes algo—Naruto trato de hacer algo que parecía ser una sonrisa, Hinata alzo la mirada y lo vio, nuevamente abrió los ojos de par en par.

—S-Sus ojos… —pensó asombrada—s-sus ojos parecen estar… tristes—el rubio la miraba con unos ojos que parecían estar heridos por dentro, no entendía la reacción del rubio ¿Por qué? ¿Por qué parecía estar muy herido? ¿Acaso él había pasado lo mismo que ella? ¿O simplemente…?

—me dolió un poco que no confíes en mi ttebayo—dijo el rubio con los ojos cerrados y una sonrisa zurrona falsa, en sus largas pestañas pudo notar unas cuantas gotitas de agua salada, abrió los ojos y bajo la mirada —Hinata… quiero ser más que tu ángel… yo… quiero ser tu mejor amigo—dijo tratando de sonar lo más sincero que pudo haber sido en su corta vida—pero… si tú no puedes confiar en mi… está bien lo acepto… me ganare tu confianza así me lleve toda la vida… y lo único que te pido… es que… te arriesgues un poco—le extendió la mano, la sonrisa que Hinata vio en él… era…

Hermosa… —Con un poco de desconfianza Hinata… acepto su mano… roso la punta de sus dedos y en cuanto menos lo espero… Naruto la jalo hacia él y la rodeo con sus fuertes brazos, la estrecho sin medir mucho su fuerza pero no la lastimo al contrario, el abrazo del rubio la inundo en una calidez que la hacía sentir tan bien que ella solo cerró los ojos y se dejo abrazar por el torpe rubio.

—gracias… Hinata… —susurro el rubio sobre su cuello y la estrecho más entre sus brazos.

"en definitiva es un ángel guardián Uzumaki-san"


gracias por su atención

Es la primera vez que Toneri sale en mis fics

Necesitaba una distracción para ellos

como se darán cuenta hay mucha química entre Naruto y Hinata.

ammmm

no sera la ultima vez que Toneri sale en mis fics

pero en los que están ahorita en proceso

solamente saldrá en este

sayonara.

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¿reviews?