Hola, este es mi primer fic de KHR y también mi primer fic de lectorxunpersonaje /*w*/ espero salga bien … espero que les guste… Lector/Harem

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"Capitulo 1- ¿Familia?"

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Estabas en tu habitación descansando plácidamente sobre tu cama, cubierta por tus sabanas y aquella pijama ligera para tratar de evitar el calor asfixiante, te rodaste sobre la cama un par de veces, te sentías frustrada de algún modo y no sabias porque… tomaste el despertador junto a tu cama "las 2:00 am" pensaste con fastidio mientras dirijáis tu mirada al closet, te estaba llegando uno de esos impulsos de estupidez clásicos en ti, te levantaste de golpe solo para tomar unos pantalones y unos tenis, estabas dispuesta a como algunas noches salir de la vista cautelosa de tus padres para escaparte al parque que esta a unas calles de tu residencia.

Caminaste un tanto aturdida por la atmosfera tan pesada que se podía percibir en el ambiente, siempre fuiste buena para esas cosas, eras como un detector de peligro y sin embargo tan torpe como para irte a meter a la boca del lobo.

"boom" escuchaste una explosión que te hiso girar de inmediato "boom" "boom" "boom" y luego vinieron mas… estabas confundida, sabias que las explosiones eran recurrentes las últimas noches pero sin duda algo estaba pasando en el instituto Namimori, tu lo sabías, ese radar de alerta que tienes te lo gritaba con todas sus fuerzas.

Diste un par de pasos hacia atrás, ni de broma querías aventurarte a tratar de averiguar lo que pasaba, las piernas te temblaban –maldición- exclamaste cuando te diste cuenta que no podías moverte.

-¡espera!- escuchaste un grito a tus espaldas y de inmediato viste como frente a ti pasaba un joven de largos cabellos rojizos escapando de ese chico tan raro de cabello castaño del salón de al lado, aunque no lo reconociste de inmediato, porque esa mirada no era clásica en él, estabas confundida y un tanto temerosa.

-decimo- esta vez quien se hacía presente era Gokudera, si, sabias su nombre porque tu mejor amiga lo mencionaba cada cinco segundos…

-¿estás bien?- te pregunto Yamamoto extendiendo su mano hacia ti, si, Yamamoto, el atleta por el que babean la mayoría de las chicas de tu clase.

-si gracias- le contestaste un poco incrédula cuando te diste cuenta que en sus manos había una espada

-sigamos- hablo Gokudera un poco alterado

-si- contesto el pelinegro para casi de inmediato volver a prestar atención en ti –deberías de regresar a tu casa, estar por aquí es peligroso ¿sí?- te dijo con una cálida sonrisa que te hiso sonrojar, ahora comprendías porque el 65% de las chicas rondaban tras de él, tenía la sonrisa más linda que habías visto hasta el momento.

Pudiste observar cómo se alejaban de ti, Gokudera te miro con una mueca extraña y te infundio un poco de pánico… pero cuando se perdieron de tu vista notaste como tu corazón latía cada vez más deprisa…

Te pusiste de pie un poco nerviosa todavía, pero si alguien te hubiera dicho lo que seguía, mejor te hubieras quedado tirada.

-Ciaossu- te hablo un bebé bastante extraño, aunque si te ponías a pensar lo habías visto rondando por el instituto tomando café.

-h-hola- correspondiste su saludo torpemente

-¿Quién eres tú?- te pregunto acercándose a ti, le contestaste un poco dudosa y el te miro detenidamente de arriba abajo

-nunca te había visto por aquí… pero, serás de ayuda- fueron sus últimas palabras antes de irse y dejarte más confundida de lo que estabas anteriormente, así que no te quedo más remedio que regresar a casa.

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Te despertaste un poco contrariada, no sabias si lo de anoche había sido un sueño o una broma ridícula de tu subconsciente, trataste de sonreír y levantarte para ir a desayunar. Bajaste las escaleras corriendo como siempre, estabas muy animada a pesar de los incidentes.

-mamá ¿Qué hay para desayunar?- preguntaste alegre mientras tu hermano menor te sacaba la lengua y se burlaba de ti

-te ves fea esta mañana- trato de molestarte pues ya te habías dejado crecer bastante el cabello y decidiste recogértelo en una coleta

-¿en verdad?- preguntaste incrédula mirándote en el espejo, aunque para ti no se veía nada mal, le quedaba bastante bien al uniforme

Tu madre te sirvió el desayuno y fue una competición con tu hermano de quien lo acabaría primero. El gano como de costumbre pues era un glotón de primera, mucho más de lo que tú lo eras… saltaste de la silla y a toda prisa te despediste de tu madre al darte cuenta de que se te hacia tarde, tomaste tu bolso y te pusiste los zapatos para salir corriendo mas sin embargo al salir tropezaste con una caja en el suelo.

"ábrelo y úsalo bien" decía la nota junto al paquete, lo observaste por unos segundos que se volvieron eternos en tu mente, ¿qué diablos era aquello?… tomaste mucho aire y valor para abrirlo –al menos no será una bomba- murmuraste y tu cara se volvió azul al pensar en lo que viste anoche. Destapaste con cuidado la caja solo para encontrarte con aros de metal, "¡para que mierda quiero esto!" pensaste un tanto exasperada.

-se te hace tarde- grito tu madre y tu simplemente saliste corriendo una vez más con dos extraños aros en tus manos.

Todo el camino a la escuela te la pasaste suspirando una y otra vez, no entendías nada de lo que pasaba, nada, ni una sola palabra de la nota y mucho menos lo que llevabas en las manos

-hola- te saludo tu mejor amiga

-hola Yue- le correspondiste el saludo para empezar a caminar con ella

-etto ¿Qué es esto?- te pregunto mientras apuntaba a los aros, tu por reflejo los ocultaste tras tus espaldas y seguiste caminando, tratando claro de evadir la pregunta, no era que la quisieras evadir pero tu tampoco tenias una respuesta.

Cuando llegaste a la escuela algo bastante extraño estaba ocurriendo, ahí estaban Gokudera, Yamamoto, el chico de cabello castaño y el bebé.

-Ciaossu- te saludo familiarizado esbozando una pequeña sonrisa al ver que llevabas los aros contigo

-¡kyaaa!- grito tu amiga al darse cuenta de que el peli plateado se dirigía a ustedes

-h-hola- te saludo el chico extraño –soy Tsunayoshi Sawada- se presento ante ti seguido de los otros dos, aunque claro tu ya conocías sus nombres. En vista tu también te presentaste como era debido.

-Reborn nos dijo que tú eras la indicada para ser una de nuestra familia- retomo la palabra Sawada-san un tanto apenado, al parecer había sido un tanto obligado a usar esa palabra

-¿familia? ¿yo?- hablaste confundida, tan extraño sonaba que Yue te abandono sin importarle que ahí estuviera su amor platónico, tal parecía que escapar de ese lio era lo mejor… pero tú te quedaste

-sí, familia, con el decimo- hablo alegre Gokudera mientras te rodeaba con su brazo y tú te sonrojabas

-yo no he aceptado- hablaste un tanto fría quitándote del agarre

-¿no?- pregunto Sawada-san ante tu reacción

-n-no lo sé-. Saliste corriendo y tropezaste con el menos indicado, Hibari Kyoya, ahora si estabas más que muerta, llevabas cosas extrañas a la escuela y acababas de golpearlo.

-p-perdóneme Hibari-sempai- le dijiste asustada y el solo te miro fríamente para darse la media vuelta e irse junto a ese pajarillo que entonaba el himno de la escuela.

-no pasa nada, el también es un aliado- te sonreía una vez mas Yamamoto –te ves mucho más linda con ese peinado- fue lo que te dijo antes de que los tres chicos se marcharan como lo acababa de hacer Hibari-sempai, dejándote con las mejillas totalmente ruborizadas.

Tal parecía desde ese momento acababas de formar parte de ese grupo tan extraño y eso apenas comenzaba…

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Si les gusto el comienzo dejen sus Reviews, como dije será un haremxlector ;3 espero que les gustara, dejen sus comentarios si quieren que añada a algún chico o chica (estoy abierta al yuri x3 ) hahaha bueno ustedes mandan en esto :3