Lo primero que debo decir es que siento muchísimo la tardanza en publicar este capítulo, al final he decidido que este es el último de la historia y me ha costado bastante poder tenerlo todo encajado. Pero me alegra decir que por fin está terminada, quiero dar las gracias por todos vuestros apoyos y comentarios, además, de tener que aguantar mi tardanza al publicar algunos capítulos.

Capítulo 14

El fin de una era

El callejón Diagon estaba aquel día tranquilo, la gente hacía sus compras, paseaba tranquila, las noticias en los periódicos tenían que ver sobre la tercera tarea del torneo de los tres magos, se había informado que la última prueba sería un laberinto con varios obstáculos los cuales no habían sido aclarados para que los campeones no supieran a que se tenían que enfrentar. En todo el callejón casi toda la gente hablaba sobre quien sería el campeón, solo una persona veía el periódico y mirando la fotografía de Harry Potter estaba furiosa, la anteriormente llamada Molly Weasley veía en las fotos como ese mocoso parecía feliz, era en verdad feliz, cuando ella tenía que sufrir para llevarse una triste migaja de pan a la boca, no le faltaba comida pero su situación no le gustaba nada, en esa foto de Potter, debía estar su hija no una de las zorras que estaban con él como ellas las llamaba. Pero no, su hijo estaba en Azkaban, su hija presa por los FAE o por lo menos eso pensaba, se le habían retirado sus apellidos y sus otros hijos junto con su marido la repudiaban, ella que lo había hecho todo por el futuro de su familia, pero no habían sido capaces de ver su sacrificio y la habían expulsado. La mujer no se dio cuenta de como una figura encapuchada dejaba inconsciente al auror que la custodiaba hasta que el hombre cayó al suelo, Molly se fijó y vio a una figura encapuchada con un paquete en un brazo.

- Hola Molly.

- ¿Quién eres?

- Solo soy la persona que libero a tu hija, ella quiere hablar contigo.

Molly vio como aquella persona colocaba un espejo en la pared, al momento el objeto se ilumino dejando ver a Ginny. A Molly se le saltaron las lágrimas al ver a su hija, parecía estar sana y salva.

- Hola madre - la voz de Ginny era fría, sin calor fraternal - ha pasado mucho tiempo.

- Ginny ¿dónde estás?

- Te puedo asegurar que estoy en lugar seguro, he contactado contigo para que sepas que dentro de poco me vengare de Harry Potter, pero debes saber que no lo haré ni por ti ni por Dumbledore.

- Pero que dices, debes vengarte por nosotros, debes liberarme.

- Muy bien, puede que lo haga, pero antes quiero saber una cosa madre ¿qué me dirías si te dijera que estoy enamorada de una mujer y que además me he convertido en FAE?

- No puede ser, mi hija no puede ser una zorra lesbiana ni un monstruo FAE.

- Ves madre, por eso no te ayudare, he decidido tomar el rumbo, crear mi destino y no el que me imponga la gente como tú.

- ¡Desagradecida! ¡Zorra de mierda!

- Tamsin - la figura se retiró la capucha - mira madre, ella es la mujer que amo, es por su mano que te daré muerte.

- Esto es por llamar zorra a la mujer que amo.

Tamsin en ese momento alzo su espada, Molly intento suplicar, pero le valió de poco ya que al momento el arma atravesó su garganta, la mujer en su último aliento miro al espejo para ver lágrimas en su hija, pero ni había eso, en realidad había un rostro de triunfo que no se esperaba. Molly murió siendo odiada por su hija, murió sin poder vengarse de Potter y lo que más le dolía murió siendo odiada y repudiada por el mundo cuando ella solo quería fama y poder tanto para ella como para su familia.

- Tamsin, acaba con el auror y sal del callejón.

- Si cielo.

La espada corto el cuello del hombre cogió el espejo y tras usar un traslador salió del lugar, justo a tiempo ya que en ese momento se apareció Harry ya que al haber sido quien había sellado la magia de Molly sabía que la mujer había muerto, se concentró y supo al momento que Tamsin había estado allí, estaba claro que la mujer había matado a la madre de Ginny, pero los motivos le eran desconocidos, pero estaba clara una cosa, los antiguos estaban cada vez más activos. Aviso a Arthur y a los demás Weasley de la muerte de la mujer, a pesar de todo lo que había hecho estaban tristes y más por saber que Ginny había tenido algo que ver, ahora solo faltaba decírselo al hijo menor de la familia, Harry decidió ir a Azkaban para visitar a Ron y darle la noticia.

La prisión de Azkaban, fría, lúgubre, era cierto que los dementores habían sido expulsados debido a su naturaleza oscura y maligna, pero eso no quería decir que la prisión fuera aterradora. Aun sin la presencia de las horrendas criaturas el clima frío y tantos años siendo los dementores los guardias habían convertido el lugar. Cuando Harry llego a la celda de Ron lo vio tirado en el suelo, con la ropa destrozada y mucho más delgado de lo que solía ser el joven, entro en la celda y el ruido hizo mirar a Ron. La furia del joven al ver a la persona que lo había encerrado en aquel lugar le hizo intentar abalanzarse sobre Harry, pero debido a su debilidad cayó al suelo.

- Veo que aún me guardas rencor Ron, estás aquí ya que te lo buscaste tu solo.

- Vete de aquí maldito traidor.

- Venía para darte la noticia de que tu madre ha muerto, pero si tienes tan poca educación no te contare los motivos de su muerte.

- ¡Mientes!

- No miento Ron, al contrario que tu yo digo la verdad, además, debes saber que quien ha ordenado la muerte de tu madre seguramente haya sido Ginny.

- ¡Mentira! ¡mi hermana jamás haría eso!

- Pero lo ha hecho, es más lista de lo que tú serías en años, se consiguió escapar y poco a poco ha ido haciéndose con poder, pero creo que tu madre no lo acepto y por eso ordeno que la mataran.

- Eso no es cierto, si mi hermana esta libre vendrá a liberarme y acabaremos contigo.

- Lo dudo mucho, eres débil y patético, mucho más que Hermione, al menos con ella la ponía de rodillas para que me diera placer.

- Cerdo - Ron de nuevo intento abalanzarse sobre Harry en vano ya que lo esquivo fácilmente - pelea como un hombre.

- No necesito mis manos para derrotarte idiota - de un movimiento de mano el cuerpo de Ron empezó a levitar - podría aplastarte todos y cada uno de los huesos de tu cuerpo con un simple gesto, pero matarte sería darte descanso y no busco eso, he venido para darte la noticia de tu madre.

Harry salió de la celda y tras cerrarla dejo en el suelo al que fue su mejor amigo, el joven le siguió gritando en vano ya que Harry a paso firme salió de la prisión y se desapareció de lugar, ahora tocaba saber que estaba planeando Afrodita.

Ginny estaba mirándose en un espejo, se encontraba arreglándose el pelo tranquilamente, era cierto que la muerte de su madre no le había entristecido, pero le hubiera gustado que la mujer comprendiera que había decidido su propio destino, que tenía su propio camino. En ese momento entro Tamsin.

- ¿Estas bien cielo?

- Si, aun dolida de que no aceptara mi nueva forma de vida, pero estoy mejor.

- Es duro hacer lo que has hecho, pero por eso te quiero tanto, has sabido sobreponerte y estoy orgullosa de ti.

- Gracias amor.

En ese momento entro Atenea en la sala.

- Hades al espejo, quiere hablar con Ginny.

La joven se incorporó y fue a la sala donde estaba el espejo de comunicación, allí vio que Hades estaba esperando.

- Dentro de poco se producirá el ataque - dijo Hades - quiero que se provoque el caos en el lugar llamado el callejón Diagon.

- ¿Qué quiere de mí?

- Saber que lugar piensas que deberíamos atacar para causar más caos.

- El banco de Gringotts si tenemos las suficientes fuerzas, es uno de los sitios más seguros del mundo mágico, si atacamos hay primero, los otros lugares se quedarán indefensos ya que la gente normalmente intenta ir al lugar más seguro.

- De esa manera esa gente estará indefensa y podremos causar muchas bajas - dijo Atenea entendiendo al momento el plan de Ginny - es buen plan.

- Entonces en ese lugar aparecerán los resucitados para atacar.

Hades corto la comunicación, en ese momento Atenea lanzo una sonrisa a Ginny.

- Es buen plan, pensar que el cuerpo que poseo pensaba que eras una inútil.

- ¿Aún sigue consciente Hermione?

- No, su espíritu fue destruido, te gustaría burlarte de ella ¿verdad?

- No voy a negarlo, Hermione estaba siempre creyéndose superior a los demás, el castigo que le impuso Harry fue cruel pero merecido, pero lo que tú le has hecho es mejor, ser completamente desaparecida sin poder hacer nada, sin que todos sus conocimientos le sirvieran.

- Es cierto, cuando la hice desaparecer era lo que más le dolía, no solo no poder hacer nada, sino que tu hubieras salido triunfante.

Estuvieron hablando tranquilamente, de vez en cuando Ginny y Afrodita se intercambiaban para seguir con la conversación y determinar sus futuros planes. Debían ser muy cuidadosas si querían que todo saliera como ellas querían.

Harry se encontraba en un aula vacía concentrado, se había unido a la magia de las líneas de ley para ver si notaba alguna perturbación en la magia que indicara que iba a pasar. La muerte de Molly era extraña, notaba que algo iba a pasar que no iba a ser agradable. Sintió la magia circular por cada línea ley de Inglaterra, cada persona con magia, pero según buscaba sintió algo que no le gustaba, como si algo estuviera uniendo el mundo real con el inframundo, había diversos focos con la esencia de personas que estaban muertas, se concentró en los focos y abrió los ojos con sorpresa y terror. Ahora comprendía lo que se estaba planeando y era muy grave, provocaría un gran caos. Concentro su poder para avisar a todos sus aliados, para crear diversas proyecciones astrales para avisar de lo que iba a venir. La gente que vio como Harry aparecía de forma astral se quedó algo sorprendida, se notaba que estaba usando mucha parte de su poder por lo que tenía que ser algo serio.

- Hades va a comenzar su jugada, va a resucitar a diversas personas por diferentes zonas, usara varias anclas para mantenerlas vivas, os doy las ubicaciones de las anclas para encargaros, yo me encargare de Dumbledore y de los que aparezcan en el callejón Diagon.

Harry corto la conexión, sabían lo que tenían que hacer, pero él se debía encargar de lo más peligroso, Dumbledore podría provocar demasiado caos debido a sus conocimientos y a su poder.

Se apareció en Gringotts donde ya los duendes estaban avisados de lo que iba a pasar, Ragnok nada más ser avisado por Harry había preparado las defensas al máximo por si había algún problema. Salió del banco justo cuando varias figuras se aparecían por el callejón lanzando hechizos y provocando el caos, varios hechizos fueron a Gringotts pero Harry los detuvo por completo ganándose la atención de los asaltantes. Varios mortifagos le atacaron conjuntamente, pero Harry creo una esfera de energía en su mano que lanzándolas destruyo los hechizos y convirtió en polvo a los tres atacantes.

- Te has vuelto poderoso Harry - dijo una voz, todos vieron que se trataba de Dumbledore - pero este es el fin, hoy verás cómo te derroto y entenderás que debías haber seguido mi camino.

- Inténtalo Dumbledore - Harry vio como Snape se acercaba, pero fue detenido por Sirius, Draco que también se acercaba vio como se interponía su hermana - muéstrame el poder de Dumbledore, si te crees capaz de superarme.

Los combates empezaron, los resucitados vieron como habían sido rodeados con rapidez y facilidad, sabían que habría resistencia, pero no se esperaban que fueran atrapados tan pronto. Severus lanzaba todo su repertorio de hechizos a Sirius, no podía permitir que el que había sido uno de sus tormentos en el colegio resultara triunfante, pero de poco parecía servirle, Black le iba haciendo retroceder poco a poco.

- Me da pena en lo que te has convertido Snape, solo eres un simple peón de Hades.

- ¡Cállate Black!

- Lily estaría avergonzado de ti, en lo que te has convertido, descargabas sobre su hijo tu ira solo porque James te causo daño en el colegio, sé que tengo también culpa, pero tus acciones son despreciables.

- Ella nunca se tuvo que juntar con Potter, ella tendría que haber sido mía.

Sirius no dijo nada más, estaba claro que Snape estaba lleno de resentimiento e ira, pero no se dejaría vencer, se había entrenado durante meses, sabiendo lo que venía, dispuesto a luchar por el futuro del mundo mágico y de Harry, no dejaría que los antiguos se salieran con la suya.

Por otro lado Draco lanzaba todos los hechizos que conocía contra su hermana, Hades le había dado la oportunidad de poder vengarse y quería aprovecharla, pero la experiencia de su hermana era grande y sus hechizos no llegaban a su objetivo.

- Draco, Draco, eso es todo lo que tienes, pero claro, ocupabas tu tiempo en creerte superior y no en mejorar.

- ¡Cierra la boca zorra!

- No Draco, tú eres el que a pesar de todo no has aprendido nada, lo tenías todo, pero lo desaprovechaste, eres débil e inútil, por lo tanto, como la futura señora Black acabare contigo.

Draco entendió que su hermana sería la esposa de Potter, eso sería una blasfemia para él por lo que su rabia se apodero de él y ataco con más fuerza. Pero de nada le servía, Casiopea desviaba o esquivaba fácilmente los hechizos que lanzaba su hermano, apenas se esforzaba, vio como aparecían más fuerzas enemigas por lo que decidió terminar el combate. Draco vio horrorizado como un poderoso hechizo se dirigió hacia él destruyendo sus hechizos y golpeándolo en el pecho. Cuando abrió los ojos vio que se encontraba de nuevo en los dominios de Hades por lo que tuvo que ponerse de nuevo para el ritual que lo regresara al mundo de los vivos. Le sirvió de poco ya que Casiopea destruyo el enlace por lo que Draco empezó a maldecir a su hermana sabiendo que por su fracaso Hades le atormentaría brutalmente.

Snape vio mientras luchaba como el cuerpo de Draco era destruido y la hermana de este destruía el enlace, quería haber ayudado a su ahijado, pero Black no se lo permitía, es más cada vez más se veía peor ya que estaba claro que su enemigo estaba muy bien preparado como si hubiera estado entrenando.

- Vamos Snape, es hora de acabar con el príncipe mestizo.

- Jamás Black ¡Avada Kedabra!

La maldición asesina se dirigió a Sirius, pero este con un rápido movimiento levanto un muro de piedra que fue destruido, pero ayudo al hombre a contratacar con rapidez para incapacitar a Snape, tras eso destruyo el enlace del hombre ignorando los gritos de rabia de su enemigo.

Albus Dumbledore demostraba en el campo de batalla su poder, sus conocimientos y hechizos eran vastos, pocos enemigos le podrían hacer frente, pero frente a él para indignación del viejo había alguien que no solo lo estaba parando, sino que también superando. El viejo veía que Harry se había convertido en un poderoso adversario.

- Solo quedas tu Dumbledore - dijo Harry desviando un hechizo del hombre - ríndete y destruiré el ancla sin que tengas que sufrir.

- Te derrotare y luego hare ver que debías seguir con mis consejos y mis planes.

Era lo que decía, pero Dumbledore sabía en su mente que no iba a ser tan fácil, sabía que Harry se había vuelto poderoso, pero la habilidad que estaba mostrando era mucho mayor de lo que pensaba, se había vuelto más poderoso de lo que había imaginado. Poco a poco incluso lo estaba haciendo retroceder, Harry lanzo un poderoso hechizo hacia Dumbledore que no parecía poder evitar, pero en el último momento una espada desvió el hechizo, todos vieron como para salvar al hombre había aparecido rápidamente Ginny.

- Patético Dumbledore, apártate.

- Afrodita - hablo Harry - o me dirijo a Ginny.

- Creo que eso no importa querido Harry, pero no puedo permitir que elimines el ancla del viejo, aun me puede ser útil.

- ¿Crees que os dejare escapar?

- Claro que no Harry, pero de momento nuestra pelea se tiene que posponer.

Nada más decir eso Ginny desapareció de lugar usando un traslador y llevándose a Dumbledore y el ancla del viejo. Harry entonces al ver que todo había terminado ayudo a las personas para organizar todo. Había multitud de personas heridas y varias personas muertas que Harry sabía que Hades usaría en un siguiente ataque, a pesar de sus poderes no podía evitar el alzamiento de los muertos por lo que tendría que buscar otra manera de impedir los planes de los antiguos, era cierto que habían actuado con rapidez pues de lo contrario las perdidas hubieran sido mucho mayores.

En la guarida de Ginny, la joven apareció y echo al viejo al suelo, estaba realmente enfadada ya que los esfuerzos realizados no habían servido de mucho, había pérdidas y daños en sus enemigos, pero no tanto como a ella le hubiera gustado.

- Pedazo de inútiles, ni provocar varias bajas sois capaz.

Dumbledore cayó al suelo sin poder hacer nada, su magia estaba sellada, vio como entraba por la puerta Hermione, o el creía que era Hermione.

- Hermione tienes que ayudarme, Ginny no sabe lo que hace.

- Cállate viejo, tu perra faldera Granger ya no existe, yo soy Atenea.

Otra FAE, otro miembro de los antiguos, aquello era peor de lo que pensaba, sabía que Ginny había decidido compartir su cuerpo con Afrodita, pero lo de la señorita Granger quería decir que su espíritu había desaparecido.

- Hades está muy enfadado - dijo Atenea ignorando al viejo - eso no es lo que estaba planeado.

- Ya lo sé, pero creo que se me ha ocurrido una idea para liberar a los antiguos.

- ¿Qué piensas?

- Debemos hacer que alguien encienda la vela de Artemisa.

- Pero esa vela está en posesión de Persephone y ella se encuentra en el inframundo con Hades.

- No te preocupes, haremos que la vela venga a este mundo, pero para eso necesitamos tiempo y mantener a Potter ocupado.

- ¿Cómo lo haremos Afrodita?

- Abriremos el portal del Hell, las fuerzas comandadas con Hades entraran y tendremos tiempo para abrir un portal aparte para hacer entra la vela, encenderla y hacer regresar a los demás.

Dumbledore estaba aterrado, el portal del Hell era un mito, una leyenda, lo que se dice que fue el artefacto que se creó para controlar el paso entre la vida y la muerte, más poderoso que el velo del ministerio puesto que si se unía a una persona solo muy pocos lo podrían cerrar.

- ¡No, no podéis hacer eso!

Tamsin que estaba allí en silencio golpe de una patada al hombre en el estómago haciéndolo retorcerse de dolor con lo que dejo de gritar.

- Tamsin, mándaselo a Hades, que él se encargue de este viejo.

- Si Afrodita.

La mujer saco al viejo arrastrándolo dejando a las dos antiguas solas.

- Solo con los muertos no será suficiente.

- Lo se Atenea, es por eso que es hora de que los FAE que estén de nuestro lado se encarguen de entorpecer, hay que ocasionar el caos por todos lados, ataques rápidos y sin magia, está claro que Potter se ha unido a las líneas de ley y por eso fue capaz de averiguar tan rápido lo que estaba pasando, pero esperemos que no sea capaz de hacerlo con los FAE.

- ¿Y si lo es? ¿si detecta nuestros actos antes de que sucedan?

- No le daré tiempo, puesto que yo misma lo enfrentare.

- ¡No! - grito Tamsin entrando en la sala - no, no puedes su poder es demasiado grande, te matara.

- No te preocupes, no lo enfrentare en persona, tengo algo planeado.

- Siento mi subida de tono Afrodita.

- No pasa nada, entiendo que estés preocupada por Ginny, vuestro amor es inmenso.

Estuvieron tranquilamente hablando y planeando, mientras en los dominios de Hades todos a los que el FAE había resucitado estaban siendo torturados por su fracaso, en el suelo tendido llorando y temblando estaba el alma de Draco el cual apenas había durado siendo torturado, ahora veía como era su padrino Snape el que sufría el enfado de Hades, también vio como el alma de Dumbledore aparecía en el lugar y al momento unas cadenas le aprisionaron causándole inmenso dolor.

- Y por fin el más estúpido, ¿estas contento Dumbledore? tu eres el que ha provocado todo esto.

- Lo que hice lo hice por el bien del mundo mágico.

- No me interesan tus lamentos y excusas anciano, pero es tu culpa el poder que Potter alberga y sus numerosos aliados y es por eso que te puedo asegurar que tu alma sufrirá por toda la eternidad.

Dumbledore a pesar de todo no admitía sus errores, mientras veía como Snape era torturado seguía pensando que todo lo que había hecho era correcto. Mientras Hades torturaba a sus prisioneros una figura vigilaba, una figura que durante mucho tiempo había conseguido evadirlo a pesar de estar unida a él, había averiguado sobre los planes de Hades junto con los otros antiguos, se había hecho pasar por ellos, pero a pesar de todo Persephone sabía que no quería lo mismo que ellos, claro que deseaba volver al mundo real pero no provocando una masacre en el mundo ni siendo los crueles que habían sido antaño, no, ella según llegaban las almas a los dominios de Hades sabía que la humanidad había evolucionado, que el mundo de los magos y de los FAE estaba cambiando, ahora más que nunca gracias a Harry Potter, ella no podía soportar aquello y debía encontrar una manera de evitarlo o por lo menos de avisar a Potter de los planes de Hades y del resto de los antiguos.

Harry se encontraba en una reunión con los líderes de las familias mágicas, las familias FAE y los líderes de estos últimos, ahora tenían claro que la guerra con los antiguos estaba cerca y que estaban dispuestos a todo por conseguir sus objetivos.

- Esto va cada vez peor - dijo Frank Longbottom - no solo atacan en nuestros hogares, sino que ahora atacan en público, si lo hicieran en el mundo muggle sería aún peor.

- Y eso no es todo, me han llegado rumores de que se está preparando algo grande de gran envergadura - hablo Trick - los infra-FAE están en movimiento masivo.

- Se están preparando para una guerra, para luchar contra nosotros - fue Harry quien dijo con voz profunda - el último ataque no fue como ellos hubieran esperado y quieren atacar con más fuerza aún, no sé como tenemos que reaccionar, pero no podemos permitir que ataquen el mundo muggle o seremos descubiertos.

- Hay una cosa que de momento si podemos hacer para fortalecernos - fue Frank quien hablo de nuevo - lo hemos dialogado durante varias semanas a espaldas de ti Harry, pero es hora de que recibas los poderes de los demás FAE para así tener una ventaja bastante considerable.

- Es una gran responsabilidad.

- Lo sabemos Harry, pero estamos seguro de que alguien como tu usara ese poder con inteligencia y control.

Harry no sabía que decir, su poder ya era grande, inmenso, pero con los poderes FAE de los líderes y de las familias sería casi insuperable, era cierto que sería una gran arma contra los antiguos y futuras amenazas, pero de esa manera se sentía que iba a ser como Dumbledore y eso no le gustaba.

- No eres como Dumbledore - fue Aife la que intervino - nunca serás como él, has demostrado que a pesar de todo el poder que has acumulado, de todo tu poder político has seguido siendo humilde y bondadoso con la gente, no has querido que las personas hagan tus deseos ni te has impuesto a la gente.

- Gracias abuela.

Las palabras de Aife le llenaron de satisfacción, veía los rostros de los demás miembros de la reunión que estaban de acuerdo con Aife.

- Entonces aceptare las habilidades de los FAE, será un proceso largo por lo que debemos empezar cuanto antes.

Sería mucho trabajo en poco tiempo, muchas habilidades para aprender y dominar, incluso usando el medallón temporal de los duendes el tiempo sería justo ya que no sabían cuando los antiguos decidirían atacar.

Cada habilidad, cada entrenamiento le llevaba a Harry la mayor parte de su tiempo, no solo por sus habilidades FAE sino también a su poder mágico, ahora entendía el motivo por el que los antiguos intentaron hacer desaparecer a los Peverell, el legado de Hecate era de un gran alcance y poder, cada habilidad FAE que aprendía le hacía aumentar su poder mágico ligeramente, algo que para el poder que ya tenía Harry era inmenso, tenía que efectuar ejercicios de control de su magia cada vez que recibía una nueva habilidad. Pero no solo Harry era el que estaba entrenando, las autoridades mágicas y FAE aliadas de Harry se preparaban al máximo, cada amigo de Harry sabiendo lo que iba a venir estudiaba y practicaba con fervor, iban a defender su mundo como fuera.

Las semanas pasaban, cada bando intentaba obtener datos del otro bando, pero eran pocos, los antiguos usaban cualquier medio para que sobre todo Kenzy se infiltrara, tenían claro que la joven la cual ahora era sirenida era muy hábil y peligrosa, gracias sobre todo a Tamsin habían cortado todas las vías de entrada de la que había sido humana, la amiga de la súcubo no podría espiarles de nuevo. Por el lado de los antiguos los intentos de espiar a los amigos y aliados de Harry también habían sido infructuosos, la información que tenían era muy escasa y aunque sus planes de abrir el portal del Hell ya estaban en marcha, iban lentamente y aun les faltaba mucho por hacer. Fue en una de las reuniones de los antiguos que se alargó un poco, en ese momento Persephone consiguió mandar un mensaje a la única persona que sabía que la creería, una persona con la que había sufrido el infierno de aquel lugar.

Aife se encontraba tranquilamente sentada frente a la chimenea, estaba relajada, algo bastante difícil dada la situación que tenían, justo en ese momento el espejo de comunicación que tenía se ilumino con fuerza, con un color que sabía que alguien que no era aliado se quería poner en contacto con ella, vio como una carta aparecía a través del espejo y caía al suelo tras lo cual el medio de comunicación se apagó, la persona estaba claro que tenía prisa o era muy precavida, Aife decidió comprobar con el anillo de los aliados de la familia Peverell para ver si tenía algún hechizo o maldición pero dio que estaba limpio. Tras eso la mujer abrió la carta, reconoció entonces la letra y comenzó a leer.

Querida Aife

Ha pasado mucho tiempo, espero que estés bien. Tengo poco tiempo por lo que seré breve, los otros antiguos planean abrir el portal del Hell para de esa manera que estéis ocupados y puedan hacer llegar la vela de Artemisa, he conseguido ocultarla durante un tiempo, pero ya tienen preparado un ritual para tenerla en su poder y cuando abran el portal la enviaran para de esa manera despertar a los demás en el mundo. Tener cuidado. Te quiero como a una madre.

Persephone

Aife se quedó aterrada, el portal del Hell era muy peligroso, los ejércitos de los muertos que entrarían serían inmensos, si conseguían su objetivo no solo provocarían un gran caos, sino que también conseguirían la vela para entrar en el mundo. Fue donde Harry estaba entrenando y entro.

Harry se encontraba en el sótano de la mansión Peverell entrenando, ahora mismo se encontraba usando las habilidades de las hadas guerreras, había sido Susan quien tras una noche de sexo y pasión le había permitido que copiara su habilidad, el joven ya tenía aprendida también la habilidad de los mesmer, Daphne había sido quien se la había entregado. En ese momento la puerta de la sala se abrió, Harry se dio cuenta de que Aife estaba aterrada, de una manera como nunca había visto a su abuela.

- ¿Qué pasa abuela?

- Debes leer esto cielo.

Harry leyó la carta de Persephone, ahora entendía el miedo de Aife.

- ¿Confías en ella?

- Si Harry, Persephone es una buena persona que se vio atrapada en medio de las guerras de los antiguos, a pesar de ser una de ellos no se comporta como tal y solo quiere ser libre tanto de Hades como de Zeus.

- La vela la liberaría en ese momento podemos ayudarla.

- Me temo que no, Persephone está ligada a Hades y hasta que él no sea liberado de la caja de música no podrán aparecer.

- Ya pensaremos como ayudarla, pero ahora hay que encontrar el portal del Hell para de esa manera estar mejor preparados, si tenemos nuestras fuerzas allí, podremos detener el avance de las fuerzas del Hades.

Harry entonces dio un aviso a todos sus aliados, pero lo hizo pidiéndoles que no se hiciera ver que sabían la verdad sobre el ataque, de esa manera los antiguos no sabrían de la traición de Persephone y si era posible la mujer les podría seguir informando, desde luego era una noticia muy buena ya que era una gran baza. Harry tenía que reconocer que le gustaría conocer a la madrastra de su tía Bo. Sin su ayuda los antiguos tendrían una gran ventaja con la que si les hubieran cogido desprevenidos les hubiera costado mucho luchar.

Ginny se encontraba en una sala meditando, a pesar de ser poderosa parecía que cada vez que meditaba y se concentraba en su ser encontraba en su interior una extraña esencia mágica que recorría su cuerpo, poco a poco la consiguió identificar y noto que se trataba de la magia de sangre que le había quitado la magia, ahora podría ser capaz de romper las leyes de la sangre no solo ella sino con el cuerpo de Hermione y de esa manera Atenea podría también usar la magia de la joven. Eso les daría una gran ventaja, sabía que en cuanto rompiera las leyes de la sangre Harry lo sabría, pero de esa manera tendrían una forma de ganar, necesitaban toda la ventaja que fuera posible. Aviso a Atenea por lo que ambas comenzaron su meditación y entrenamiento para liberarse de las leyes de la sangre impuestas por Harry. Fue un duro entrenamiento y una dura meditación, la magia de sangre recorría su cuerpo por lo que cada vez que conseguían aislarla, el dolor que les desprendía era grande. Fueron días de dolor y entrenamiento, fueron días de suplicio, días en los que pasaban la mayor parte del tiempo intentando liberarse de la magia de sangre y la otra parte descansando, pero al cabo de varias semanas lo consiguieron. Fue Ginny la primera es conseguir deshacer la magia de sangre, tras eso acabo rendida por completa y fue gracias a Tamsin que se recuperó rápidamente, dio las indicaciones para cuando Atenea lo consiguiera hubiera un equipo médico preparado para atenderla, ella como súcubo no había tardado en estar en forma, pero para Atenea sería diferente. Al cabo de varias horas Atenea también se liberó de la magia de sangre y se puso a descansar. Todo eso había pasado y Harry lo sabía, pero no conseguía saber donde se escondían las antiguas por lo que tuvo que seguir con su entrenamiento. Tanto para Ginny como para Atenea les tocaba un duro entrenamiento, era imposible que se pusieran al nivel de Harry con la magia, pero al menos querían intentar tener los conocimientos que se llegaban a tener cuando se salía de Hogwarts, usaban a Dumbledore como profesor y aunque el hombre se quiso negar le sirvió de poco ya que fue torturado al negarse. Ahora estudiaban y entrenaban usando de prácticas al mismo Dumbledore que tenía que soportar recibir los hechizos de las dos mujeres, pero no solo era Dumbledore el que era usado como sujeto de pruebas, Snape, Draco y cada mortifago que se encontraba en los dominios de Hades recibía los hechizos que las dos mujeres aprendían, también para gozo de Ginny podía lanzar hechizos sobre su madre ya que su alma había sido recogida por Hades.

- ¿Por qué haces esto Ginny? - pregunto su madre con voz suplicante - solo he querido lo mejor para ti.

- Has querido lo mejor para ti madre, te daba igual como usaras a tu familia, solo buscabas tu beneficio propio.

- Pagaras por esto zorra.

Un movimiento de varita y el torso de Molly comenzó a sangrar, pero Ginny no paro ahí, infringió a su madre tanto dolor que la mujer quedó inconsciente al cabo de pocos minutos. Todo eso ante la mirada de Dumbledore que no podía creer aquello, no podía creer que la joven Ginny a la que habían aleccionado durante años para que cumpliera los planes que tenían, fuera capaz de torturar de esa manera a su madre, con tal rabia e ira.

- Por favor Ginny, debes parar, esta no eres tú, los FAE te están controlando.

- No viejo, esta sí que soy yo, la mujer que quiere su propio destino, la que quiere tener una vida propia y no dictada por unos manipuladores.

Dumbledore intento decir algo, pero en ese momento Atenea que entraba por la puerta lo silencio de un hechizo.

- Cállate viejo - luego se dirigió a su compañera - Ginny hay reunión, quieren hablar con Afrodita.

Afrodita tomo el control del cuerpo de Ginny y tras dejar encerrados e inconscientes a los prisioneros acompaño a Atenea a la sala del espejo. Los antiguos se reunieron para hablar.

- ¿Cómo van los planes Atenea? - pregunto Zeus.

- Dentro de poco el portal del Hell estará listo para abrirse.

- ¿Dónde será colocado?

- En los terrenos de Hogwarts, sabemos que para la última prueba del torneo de los tres magos habrá un laberinto en los terrenos del colegio, por lo que usaremos un aliado que tenemos dentro para establecer el portal y causar el mayor daño posible, como habrá mucho público decidirán sobre todo defender en vez de atacar.

- Está bien - hablo Hades - dentro de poco todas las fuerzas estarán listas, el ejercito de muertos más grande que este mundo ha visto surgirá sobre la tierra.

- Y usando ese tiempo podremos traer la vela a este mundo, no necesitamos encontrar a Persephone, ahora con la magia de los cuerpos que poseemos podremos traerla hacia nosotras.

- Entonces prosigamos con nuestros planes y vosotras mejorando vuestra magia, será una baza a tener en cuenta.

La comunicación se cortó y las dos antiguas volvieron a practicar los hechizos, esta vez combatieron la una contra la otra para pensar en diferentes estrategias para usar, sabían que si querían vencer a Harry debían no solo ser poderosas, sino ser creativas, usar métodos que esperaban que no conociera el joven. Sabían que usando hechizos normales y conocidos no tendrían ninguna oportunidad, por eso cuando aprendían algo nuevo practicaban nuevas formas de usarlo, eso era lo que perdía a muchos magos que solo se limitaban a aprender el hechizo de forma básica. No cometerían ese error, experimentarían de todas las formas que se les ocurriera para de esa manera ganar la guerra.

El laberinto de Hogwarts estaba preparado, habían usado el campo de quidditch para de esa manera crearlo, grandes muros impedían ver de un camino a otro, varias criaturas y obstáculos mágicos se estaban preparando para que los campeones tuvieran diversas pruebas antes de conseguir llegar al centro del laberinto donde se encontraba la copa del campeón. Una figura envuelta en la magia de un talismán de ocultación se movía a través del laberinto, usando un traslador había llegado a Hogsmeade, con cuidado tallo varias runas en el suelo, cerca de la entrada para que cuando comenzara el ataque el caos cundiera entre los asistentes a la última prueba. La figura entonces regreso al colegio y con cuidado volvió a su dormitorio, donde se tumbó en su cama con cuidado de no despertar a sus compañeros de cuarto, su venganza contra Potter se llevaría pronto por todo lo que les había perjudicado tanto a él, como a su familia como a sus amigos.

La oscuridad, la desesperación y odio llenaban la prisión de Azkaban, pero nada parecido a lo que se aproximaba lentamente en un grupo de barcos, una figura encapuchada fue la primera en descender y con un movimiento de varita se deshizo de los primeros guardias, se quitó la capucha y se vio que se trataba de Dumbledore que al instante tubo a su lado a Ginny.

- Bien hecho viejo, encárgate de los demás guardias y sistemas de seguridad.

Dumbledore tuvo que hacer lo que le decía la muchacha, estaba bajo el control de los antiguos y no había forma de liberarse. En la zona ya no había dementores, en su lugar se había reforzado la prisión con aurores, encantamientos y poderosas runas, pero a pesar de todo Dumbledore se deshacía de todo, no le era fácil, pero su poder y experiencia le bastaba para incapacitar a los hombres que intentaban detenerlo, no los mataba ya que a pesar de todo estaba en contra de asesinar a no ser que fuera por el bien común como él decía y ahora no era por el bien común, más en concreto por su bien común.

Por su lado Ginny se encargaba de liberar a los prisioneros, serían refuerzos y tropas para su ejército, un ejército de gran número y poder. La joven entonces vio en una celda a su hermano Ron.

- Hola Ronald, ha pasado mucho tiempo.

El joven se incorporó a duras penas, en ese momento vio a su hermana.

- Ginny ¿qué haces aquí?

- Estoy liberando a los presos de Azkaban.

- Entonces es mentira que tu mataste a mama, Potter solo quería hacerme sufrir.

- En realidad eso es verdad, mama no acepto que me volviera FAE y lesbiana.

- ¡Zorra!

Ron intento atacar a duras penas, pero un movimiento de varita de su hermana lo dejo contra la pared, el joven no entendía como su hermana volvía a tener magia. En ese momento vio como llegaba Dumbledore, el joven pensó que estaría salvado, pero cuando comenzaron a hablar se dio cuenta de que algo iba mal.

- Los presos están libres.

- Bien viejo, ahora solo tienes una cosa que hacer aquí, acaba con Ron, pero hazlo de tal manera que sufra.

Ron no podía creer aquello, era cierto, su hermana había ordenado la muerte de su madre y ahora le hacía lo mismo a él, miro suplicante al profesor Dumbledore.

- Por favor profesor, no puede hacerlo.

- Lo siento joven Ronald, no puedo negarme a los FAE soy su esclavo.

- No, eso no es posible, usted es el mago más poderoso.

No pudo decir más ya que al momento varios hechizos lacerantes cubrieron el cuerpo de Ron, diversos hechizos de tortura y cuando el joven iba a quedar inconsciente Dumbledore terminó con su vida. Al momento Ron abrió los ojos y se vio en el tártaro bajo los dominios de Hades que comenzó a torturar su alma, todo ante los ojos de su madre que vio horrorizada como no podía hacer nada por su pequeño.

La noticia del asalto a Azkaban se hizo eco al día siguiente, no salió a la luz quien estaba detrás del ataque, pero el mundo mágico estaba en alerta máxima. No era raro al cabo de unos días ir por las zonas del mundo mágico y saludar a algún auror que controlaba la seguridad y la vigilancia. Se habían habilitado diversos puntos para que si se produjera un ataque la gente estuviera protegida y segura, las zonas estaban protegidas por diversos encantamientos y runas proporcionados por Harry junto a las familias aliadas, Trick y los duendes de Gringotts, eran defensas que separadas eran formidables pero juntas esperaban que fueran inexpugnables. Las fuerzas de aurores y otros grupos no solo se preparaban mágicamente sino también físicamente, el enemigo era temible y todos querían estar preparados, estrategias y acciones se planeaban según como pensaban que iba a atacar el enemigo.

El día de la tercera tarea se acercaba, todos se preparaban para el gran acontecimiento, los cuatro campeones pasaban sus respectivos días entrenando, no para ganar un torneo que ahora casi apenas importaba sino para todo lo que iba a venir, querían evitar una guerra masiva y como campeones debían dar ejemplo a otros estudiantes. Harry miraba desde la ventana del despacho de dirección, los terrenos aquella mañana estaban tranquilos, pero sus ojos estaban posados sobre todo en la figura de un alumno de Durmstrang.

- ¿Estás seguro Harry?

- Si directora, se ha encargado de tallar las runas para hacer aparecer el portal del Hell, ha pasado información a los antiguos, por suerte llevo semanas conociendo sus movimientos por lo que he podido hacer que parte de la información sea falsa.

- ¿Sabes cuál es el motivo por el que lo hace?

- Aun no, debo reconocer que es un misterio, sé que es un alumno modélico de su colegio, buenas notas, ni un solo comentario negativo, es huérfano, pero no he encontrado los documentos de cuando fue dejado en el orfanato, no sé nada de sus padres, es como si alguien o el mismo hubiera querido ocultar sus orígenes.

- Entonces debemos tener cuidado.

Harry entonces salió del despacho, ni se inmuto cuando el cuadro de Dumbledore intento llamarlo, no tenía ganas de escuchar las palabras del viejo. Minerva vio divertida la escena y cuando Harry salió del despacho ella se dirigió al que fue su mentor.

- No te servirá de nada hablar.

- Fracasará y verá que yo tenía razón.

- Más te gustaría viejo, pero estoy segura de que Harry triunfara.

- ¿Qué te hace estar tan segura?

- Confió en él, confió en Harry como confiaba en ti, pero al contrario que tu Harry no guarda secretos ni se cree con derecho para decidir por las personas.

El hombre ya no dijo nada, aquello era un golpe bajo, Minerva siempre le había apoyado, cierto que en ocasiones le había cuestionado, pero nunca había tan estado tan en contra como ahora estaba, pero se equivocaba y lo vería, todos lo verían.

Harry bajo por las escaleras y llego a la entrada de la sala común de Gryffindor, tras decir la contraseña a la señora gorda entro y vio que en la sala había reunión.

- Neville ¿pasa algo?

- No es nada Harry, estábamos hablando sobre el torneo y los últimos sucesos que han sucedido.

- Es normal, todo está siendo muy precipitado y confuso para algunas personas.

Los dos amigos salieron tranquilamente hablando, en el camino al gran comedor se cruzaron con un grupo de alumnos Durmstrang, Harry sutilmente se quedó mirando a uno de los alumnos, debía averiguar quien era para saber el motivo por que ayudaba a los antiguos.

Los días seguían pasando, las fuerzas de seguridad habían sido aumentadas, las excusas eran por el número de personalidades importantes, pero escondidas y camuflabas estaban el triple de fuerzas ya fueran FAE o aurores, había incluso varios magos que se habían prestado voluntarios, claro que antes habían sido investigados, pero todos habían pasado las pruebas. Por su lado los antiguos habían preparado un grupo de sus aliados para que a la vez que atacaban desde el exterior de Hogwarts y se infiltraban, Afrodita y Atenea se pondrían donde aparecería el portal para tomar la vela de artemisa y usando su poder harían que el resto de antiguos regresaran, a la vez las fuerzas de muertos emergerían por el portal del Hell y entrarían atacando a la gente.

Llego la noche anterior al torneo y Harry se encontraba tranquilamente en su habitación, estaba a punto de irse a dormir cuando el espejo de comunicación se encendió y vio que se trataba de Ginny.

- Con quien tengo el placer de hablar, ¿con Ginny o con Afrodita?

- ¿Eso importa Harry?

- Supongo que no, pero si quiero dirigirme a ti tendré que saber con quien hablo.

- Soy Ginny.

- ¿Y qué quieres Ginny?

- Solo desearte suerte para la tercera prueba.

- Por favor Ginny, sabes perfectamente que no llamas por eso.

- Cierto, pero no voy a decir abiertamente que al igual que sabes que mañana vamos a atacar, nosotros sabemos que sabéis del ataque.

- Dime que quieres.

- Ríndete Harry, rendiros y os daremos una muerte noble y rápida, mis hermanos están entre tus aliados y no me gustaría verlos morir en batalla.

- O podéis rendiros vosotros y tampoco habría batalla.

- No va a ser tan fácil Harry, hay mucha gente que quiere tu cabeza.

- ¿Acaso estas preocupada por mi Ginny?

- Claro que no, pero esperaba que al menos pudiéramos tener una conversación civilizada antes de mañana.

- Si hubieras sido de esa manera sin intentar engañarme ni manipularme las cosas puede que hubieran sido diferentes.

- Cierto, pero estaba claro que tanto Dumbledore como mi madre no lo veían así, es cierto que yo tampoco, pero estaba cegada.

- Lo sé, pero el castigo te lo merecías.

- Y es por eso que quiero hacerte sufrir por lo que me causaste, pero no lo hare por mi familia, lo hare por lo que creo y ahora creo en los antiguos.

- Bueno Ginny, lo único que me queda decirte es que disfrutes de la última noche.

- Lo mismo te digo Harry.

En verdad los dos solo descansaron, Ginny abrazada a Tamsin, abrazada a la mujer que se había convertido en el amor de su vida. Por su lado Harry se tumbó en la cama y descanso tranquilamente, no habría sexo esa noche, solo habría paz para intentar ganar la guerra que iba a tener lugar.

El estadio rugía, el día de la última prueba había llegado, Harry estaba junto a los otros tres campeones, todos sabían que esa prueba sería una farsa ya que sabían del ataque por lo que al laberinto irían los cuatro juntos para evitar sorpresas y que fueran atacados de uno en uno. Harry sabía que un gran número de aurores y FAE estaban por los terrenos camuflados para cuando comenzara el ataque. Vio donde las familias como estaban juntos sus padrinos y a su familia materna, incluso Petunia había ido a animar a su sobrino. Harry brevemente miro a un lugar donde los alumnos de Durmstrang estaban sentados, allí estaba el alumno que ayudaba a los antiguos, sabía que el alumno ya había terminado su trabajo por lo que estaría esperando los sucesos que iban a tener lugar. El anuncio para la entrada al laberinto comenzó con un fuerte pitido, fueron entrando en orden según su posición, pero cuando estuvieron los cuatro dentro se juntaron para pasar el laberinto.

- Y ahora a buscar el portal ¿sabes dónde está Harry?

- No en concreto Fleur, está muy bien protegido, pero por suerte siento ligeramente su magia para que podamos llegar sin problemas.

- Entonces guíanos Harry, pero con cuidado.

Los cuatro campeones se pusieron en marcha, cada uno iba vigilante de que al otro no le sucediese nada y a la vez estaban vigilándose ellos mismos. Sortearon las trampas y enigmas con cuidado, hasta que llegaron a un portal de color negro con runas que cada vez eran más brillantes, el portal estaba a punto de abrirse y debían detenerlo.

- Los cuatro campeones, que gran honor.

Ante ellos apareció Ginny cuyos ojos brillantes indicaban que el control del cuerpo lo tenía Afrodita.

- Afrodita, esto ha terminado.

- No lo creo - la FAE uso todo su poder, al momento un grupo de veinte infra-FAE apareció atravesando las barreras de Hogwarts, Harry sintió que la magia de Dumbledore les estaba ayudando - entretenerlos, acabar con los otros tres salvo Potter, él es mío.

Antes de comenzar a luchar Harry realizo un movimiento para que se supiera que el ataque había empezado, la gente del público se refugió salvo aquellos que se quedaban a luchar en la batalla por su libertad, al momento aparecieron varias docenas de FAE, magos y más simpatizantes de los antiguos.

Casiopea se dirigió hacía el alumno de Durmstrang que había ayudado a los antiguos, misteriosamente este no huyo y le dedico una sonrisa que si no fuera por la malicia que desprendía parecería amistosa.

- La heredera Malfoy, nunca he tenido el placer de presentarme en persona, soy Regulus Lestrange.

Casiopea entonces se dio cuenta de que estaba ante su primo, sabía que su tía había tenido un hijo, pero no se sabía que había sido de él, ahora lo tenía claro, había sido ocultado hasta que llegara el momento.

- Bueno Regulus, no pasaras de aquí.

- No lo creo, al contrario que el patético de tu hermano soy mucho más inteligente.

Era cierto, se notaba que estaba bien versado en la forma de lucha de la familia Black, sus hechizos los usaba de forma inteligente y atacaba incluso mezclando la forma de la lucha Black con la Lestrange.

Los duelos se repartieron por toda la zona, todos vieron como Dumbledore se aparecía, pero al momento Sirius, junto con Aife y Trick le enfrentaron.

- No pasaras Albus, no dejare que dañes a mi bisnieto.

- El rey sangriento, te derrotare y volveré a hacerme con el control de este colegio.

- No lo creo, hoy pagaras por los crímenes contra mi familia.

Mientras en el portal Harry y Ginny se enfrentaban con todo su poder, la joven tenía un ojo de cada color lo que demostraba que el cuerpo estaba en completa sintonía con las dos almas y que a la vez luchaban usando los poderes de las dos.

Vieron como las runas del portal adquirieron todo su poder, por donde los muertos empezaron a emerger obligando a los cuatro campeones a retroceder, a cada segundo las fuerzas de los muertos aumentaban, pero como el laberinto ya estaba caído se pudo defender mejor. En ese momento Harry aprovecho y retrocedió para ponerse lejos del alcance de sus oponentes. Al ver eso algunos atacantes se confiaron hasta que Afrodita se dio cuenta de que Harry estaba usando su poder para interferir de alguna manera en el portal, pero lo que más alarmo a la mujer era que para hacer lo que estaba haciendo debía tener un aliado en el otro lado. Solo se le ocurría que pudiera ser Persephone, esa mocosa siempre ocasionando problemas. Intento intervenir, pero fue detenida por Amelia Bones.

- Hola Afrodita, me temo que no vas a pasar de aquí.

La antigua maldijo, las habilidades de la mujer que tenía enfrente eran muy grandes, lo sabía por los recuerdos de la gente a la que había interrogado, pero lo que no se esperaba era que a su lado estuviera Ciara, la líder de las hadas guerreras, dos poderosas adversarias contra las cuales no podía descuidarse. Mentalmente aviso a sus aliados para que intentaran detener a Harry.

Los ataques contra Harry se encrudecieron, pero una poderosa barrera de magia creada por la misma magia de Hogwarts protegió al joven, los atacantes que podían lo intentaban con todas sus fuerzas, pero parecía que nada servía, los que tenían el poder para intentarlo no podían intervenir ya que eran detenidos. Harry vio que todo parecía ir a la perfección, pero al momento escucho como una música empezaba a sonar, conocía la música, era la de la caja de música que encerraba a Hades, pero eso no era posible, solo Bo podía abrir la caja. Sintió entonces que Tamsin era quien estaba abriendo la caja, en su cuerpo un poderoso encantamiento le hacía poder usar el objeto que solo Bo podía usar. Dio la orden mental de que atacaran a la mujer, no se debía permitir que Hades apareciera o los muertos aumentarían su poder, pero Afrodita hizo que las defensas en torno a Tamsin aumentaran lo que hizo que Harry tuviera que preparar una nueva estrategia, decidió centrarse completamente en cerrar el portal, aún tenía un as en la manga, el poder del maestro de la muerte le permitiría combatir a Hades y cerrar el portal del Hell a la vez, pero tenía que usar mucho poder y era un riesgo muy grande para su núcleo mágico, pero era la única solución, mentalmente aviso a todos sus aliados de lo que iba a hacer. Algunos lo miraron con miedo a perderlo, otros con agradecimiento con ser tan valiente, pero todos sabían que era lo que Harry tenía que hacer y no había otro modo, sabían que el joven estaba dispuesto a sacrificarse para salvarlos.

La música de la caja prosiguió hasta que se escuchó un resorte dando a entender que la caja estaba abriéndose, de repente en una bruma apareció la figura de Hades haciéndose a cada segundo solido hasta que estuvo completo, pero lo que más sorprendió fue que al lado de Harry apareció Persephone que comenzó a ayudar al joven Potter para furia de Hades.

- ¡Pagaras por tu traición! - el grito de Hades se escuchó por todo el terreno de batalla con una furia inigualable - Afrodita yo me encargo de Potter.

Los muertos hicieron paso a Hades, algunos intentaron pararlo, pero de un solo gesto aquel que se enfrentaba al FAE que controlaba a los muertos caía fallecido. Pero en ese momento el poder de Harry se convirtió en una columna de luz, magia negra, magia blanca y magia antigua se mezclaban en el cuerpo del joven, el poder que irradiaba era inmenso, un poder como nadie había sentido en el campo de batalla, en realidad casi nadie, ya que Hades sabía que ese era el poder del legado de Hecate, tendría que enfrentarlo, esperaba que el poder del joven no fuera como el de su antepasada o no tendría ninguna oportunidad.

- Yo Harry James Potter hago un llamamiento e invoco a un combate a Hades, será un combate a muerte y el ganador decidirá por el ejército del perdedor.

Lo había hablado con sus aliados, si Hades regresaba quería luchar contra él de tal manera, para evitar muertes innecesarias, sabían que Hades preferiría tener esclavos a muertos, además, el orgullo del FAE le haría aceptar el duelo ya que los que le conocían sabían que, aunque fuera de los que solo actuaban cuando fuera necesario su orgullo se imponía.

- Acepto el desafío Potter.

No quería hacerlo, pero Hades sabía que de no hacerlo sus subordinados no confiarían en los antiguos, los demás duelos pararon, si los dos líderes se enfrentaban el ganador saldría de quien ganara el duelo. En ese combate se decidiría quien sería el ganador de la guerra.

- Dado que he sido el retado indico que no uses tu magia, usaremos las habilidades de los FAE que poseemos.

- Acepto Hades.

Los dos adversarios quedaron frente a frente, detrás de Harry sus aliados y amigos, detrás de Hades los subordinados de este, Ginny miraba con expectación, hubiera sido ella quien hubiera deseado luchar contra Harry, al igual que ella otros muchos en el ejercito de Hades. En el lado de Harry todos estaban intranquilos, Persephone que también había aparecido tenía la vela de Artemisa en sus manos, no permitiría que callera en manos de los antiguos y de sus aliados, la mujer veía a Potter, era increíble, su aura de poder era inmensa, sin su magia era muy poderoso, con su magia era de un poder que incluso varios antiguos juntos no podrían igualar.

Fue Hades quien usando su poder empezó el ataque, una luz azulada que empezó a desprender su mano ataco a Harry, pero este contrataco moviéndose a gran velocidad, a la velocidad de las hadas guerreras. Con un parpadeo se colocó detrás de Hades y tras eso silbo haciendo que Hades cayera al suelo.

- ¿Hada guerrera y sirénido?

- Espero Hades que no te hayas olvidado del poder de Hecate.

Claro que no se había olvidado, pero no era posible que Potter hubiera aprendido las habilidades de tantos FAE en tan poco tiempo, lo que Hades no sabía era que, usando el amuleto de los duendes, Harry había acelerado su entrenamiento de tal manera que al menos una docena de habilidades FAE recorrían su cuerpo y era capaz de controlar. Era su carta del triunfo. Las habilidades de Daphne, Susan, Neville, sus amigos, las habilidades de sus aliados, no las iba a desaprovechar, terminaría con aquel combate en cuanto tuviera oportunidad. Durante varios minutos Hades luchaba con todo lo que tenía, pero a pesar de su vasta experiencia no era capaz de igualar a Harry y termino jadeando a los pies del joven Potter.

- Esto no ha acabado, regresare y acabare contigo.

- No lo creo Hades, esto acaba con el poder que Ysabeau me ha otorgado.

Entonces unas llamas salieron de la boca de Harry, el poder del Pyrippus, el caballo infernal con el que era simbolizado Hades, ese poder que el antiguo había traspasado a su hija lo estaba destruyendo, al cabo de unos segundos Hades quedo desintegrado por el poder que el antiguo esperaba que le hubiera ayudado a conquistar el mundo. La batalla había terminado, las fuerzas de Hades sin el control de su seño no sabían que hacer, Harry usando el poder del maestro de la muerte retuvo a los muertos y los hizo volver a través del portal del Hell, Dumbledore quiso resistirse, pero le sirvió de poco y tuvo que irse despotricando contra Harry, los FAE que se habían aliado a Hades se rindieron al momento y decidieron que no tenían problemas en ser ajusticiados allí mismo, al final solo quedaron Afrodita, Atenea y Tamsin.

- ¿Qué vas a hacer con nosotras?

- Antes de todo quiero hablar con Ginny.

La FAE intercambio la mente con la joven Ginny.

- ¿Qué quieres de mí?

- Afrodita morirá aquí hoy, pero debes saber que tu si quieres puedes salvarte.

- ¿Por qué lo harías?

- Porque veo el amor que sientes por Tamsin, si tu mueres, ella muere y al revés es igual.

- ¿Cuál sería mi castigo?

- Os exiliaría a una isla, allí usando los poderes de la sangre os impondré que seáis las guardianas del portal del Hell, viviréis apartadas de la sociedad FAE, humana y mágica, pero al menos viviréis juntas.

Las dos se miraron, lo consultaron con Afrodita y decidieron aceptar, Atenea decidió morir tanto en cuerpo como alma, el cuerpo que ocupaba no tendría alma por lo que no lo iban a dejar vivo como una cascara vacía. Harry cogió la vela de Artemisa, uso el poder de la vela no para despertar a los antiguos sino para hacerlos desaparecer, no a todos ya que Persephone estaba siendo protegida por la magia de Harry. Al cabo de unos segundos los antiguos habían desaparecido de la faz de la Tierra y de su plano de existencia, cierto que Zeus y Poseidón quisieron resistirse, pero no les sirvió de nada, les alcanzo la muerte al igual que a los otros. Tras terminar Harry sonrió mirando al cielo, había terminado, había usado una gran cantidad de poder y estaba fatigado, no cayo al suelo ya que Persephone impidió que se golpeara, la guerra había terminado y ahora solo quedaba enterrar a los muertos y sanar heridas.

El castillo de Hogwarts estaba lleno de movimiento, claramente el torneo se había suspendido a pesar de las quejas de algunos miembros del ministerio, pero usando el poder que Harry tenía, esas personas habían retrocedido. Los representantes de Harry, ya que este estaba inconsciente, se habían encargado de hacer retroceder a esas personas.

La salud de Harry era estable, pero aun tras un par de días tras la batalla seguía inconsciente, su núcleo mágico y sus fuerzas estaban bastante bajas, pero gracias a los cuidados de Lauren iba poco a poco recuperándose. Era de tal manera que al cabo de un par de días más el joven despertó. Era de noche, el joven abrió los ojos, vio que a su lado Casiopea descansaba, seguramente esperando a que Harry despertara, el joven alzo su brazo y toco a Casiopea para que se despertara, la joven al sentir el tacto de Harry despertó.

- Harry, no te levantes, ya aviso a Lauren.

La mujer cogió el teléfono y al momento avisó a la doctora de que Harry había despertado, al cabo de medio minuto la mujer llego.

- Harry voy a revisar tus signos vitales y tu estado, sigue mis indicaciones.

- De acuerdo Lauren.

Fueron varios minutos de exploración, estaba claro que durante los cuatro días que había estado inconsciente su magia le había ayudado a recuperarse, eso y los tratamientos de Lauren hacían que sus constantes estuvieran a la perfección, lo único era que Harry tenía bastante hambre por lo que al cabo de cinco minutos le llevaron algo de comer, según Lauren no debía comer mucho para que su organismo se fuera acostumbrando poco a poco y así fuese alimentándose cada vez más. Cuando tuvo suficientes fuerzas para levantarse también empezó a recuperar sus fuerzas usando sus habilidades súcubo, por lo que las mujeres estuvieron muy de acuerdo. Casiopea, Susan, Aife, Narcisa, Fleur, Daphne e incluso Persephone se decidieron turnar para ayudar a recuperar a Harry.

Tras varios días más se celebraron los funerales por los caídos, por suerte había pocas bajas, pero los horrores de la guerra siempre estarían ahí, Casiopea había tenido que acabar con su propio primo, había sido un duro combate pero al final había salido vencedora, Dumbledore había sido derrotado por las fuerzas conjuntas de Sirius, Aife y Trick, el viejo mago antes de ser derrotado completamente seguía con sus discursos sobre el bien común, hubo otros muchos combates pero todo paro cuando Harry derroto a Hades, es cierto que algunos infra-FAE no aceptaban pero fueron juzgados y ajusticiados.

La guerra había terminado, los cambios en la sociedad FAE y el mundo mágico ingles se habían puesto en marcha, por primera vez desde hacía más de mil años las colonias inglesas de los FAE no deberían escoger si ser de las sombras o de las luces, los cambios en el mundo mágico ingles sin ningún tipo te interferencia también progresaban, poco a poco tras años de ignorancia sobre el mundo muggle el mundo mágico ingles se ponía al día con respecto a los avances sobre tecnología, los nuevos cursos se habían implementado en Hogwarts, las clases que el colegio milenario no podía implementar se habían decidido realizar en algunos terrenos de la familia Peverell que Harry gustoso había entregado, se había levantado una instalación para dar clases que al cabo de medio año estaba en funcionamiento.

El tiempo paso y las heridas de guerra fueron cicatrizando, tanto las físicas como las psicológicas, durante ese tiempo Harry formalizo las relaciones que tendría según los títulos que tenía. Cuando Harry se graduó en Hogwarts se decidió hacer una boda múltiple con las que serían sus diferentes esposas, Bajo el título Potter tendría dos esposas que serían Fleur y Daphne, con ellas tuvo dos hijos y dos hijas respectivamente, el título Slytherin fue para Séptima y Luna, la joven Ravenclaw se convirtió en su novia tras un par de años de la batalla final, Séptima le dio un hijo y Luna un hijo y una hija, el título Hufflepuff lo heredaron los dos hijos que tuvo con Susan y Amelia, fue la relación más curiosa ya que tía y sobrina compartían el mismo título, Casiopea como señora Black le dio un hijo, el titulo Black solo fue a una esposa ya que Narcisa decidió casarse con Sirius tiempo antes de la boda de Harry, la boda de Sirius fue una boda doble ya que aparte de Narcisa contrajo matrimonio con Evony, por último el título Peverell fue a Persephone con la que desarrollo una relación muy rápida, una fuerte conexión entre ellos desde que se vieron por primera vez, también ese título fue a su última esposa Tracey Davis, una Slytherin muy amiga de Daphne, con Persephone tuvo dos hijos varones y con Tracey tuvo un hijo y una hija. Pero no solo Harry fue quien decidió también casarse ese mismo día, su amigo Neville contrajo matrimonio con Astoria Greengrass y con Hannah Abbott, tuvo un hijo y una hija con ambas de sus esposas. Fue una ceremonia que se realizó en los terrenos de la mansión Peverell, los dos centenares de invitados se congregaron en un gran número de mesas, miembros de la sociedad FAE se reunían con simples muggles, los magos de sangre pura se sentaban al lado de mestizos e hijos de muggles, incluso Petunia y Dudley estuvieron en la ceremonia y posterior celebración, Vernon había muerto un año antes por un ataque al corazón pero había fallecido pidiendo perdón a su sobrino por el dolor y el daño que le había causado durante su infancia.

Los años pasaron felices para Harry y su inmensa familia, cada nacimiento era recibido con gran alegría, incluso después de años de exclusión en una isla Tamsin y Ginny les felicitaron por la familia, la pareja de lesbianas habían tenido una hija y un hijo, cada una de ellas había dado a luz a cada uno de sus hijos, como regalo al ver su arrepentimiento Harry otorgo a Ginny la capacidad de las valquirias, ahora la que había intentado manipular su vida estaba fuera de venganza y de odio, era feliz con una familia y ese fue el regalo de Harry, que pudiera estar con su amada y sus hijos durante el tiempo que tuvieran.

Cuando Harry llevo a su primer hijo a Hogwarts no pudo evitar acordarse de sus años en el colegio, pero sobre todo del año que le cambio por completo, su cuarto año con el torneo de los tres magos, el año en que durante el verano descubrió la verdad que le ocultaban y como tras eso su vida había cambiado enormemente. No sabía lo que el destino le tendría deparado, pero una cosa tenía asegurada, protegería su futuro, el de su familia y el de la sociedad FAE y mágica que tanto le había dado.

Por fin ha terminado, espero que les haya gustado la historia y hayan disfrutado al igual que yo he hecho al escribirla. Gracias a Guest, Leonardo Lumiere Sharksun, Viento25, Mariposa de Cristal y otras muchas personas que me habéis escrito. Me gustaría sinceramente nombraros a todos, pero creo que sería demasiado largo. En cuanto a mi futuro no tengo aun decidido si voy a seguir escribiendo o me tomo un descanso, tengo algunos proyectos en mente, unos son historias largas y otros simples one-shots pero no sé que hacer, ya que mi tiempo es últimamente bastante escaso. Lo único que puedo decir para terminar es gracias por todo vuestro apoyo, que sigáis disfrutando de una buena lectura tanto de mi como de otros escritores.