Hey, hace mil años que no publicaba nada aquí, así que hoy decidí cambiar eso... Espero que la historia que les traigo sea de su agrado :)

Como deben saber Teen Wolf no me pertenece, le pertenece a Jeff Davis y a Mtv y yo simplemente lo uso con fines recreativos no lucrativos ;)


Stiles estaba cansado. Muy cansado, pues las esperas nunca se le habían dado bien y por mucho que intentara armarse de paciencia con el asunto de Derek tiene que superar sus problemas emocionales, él ya estaba cansado de que Derek le rehuyera con las mismas excusas de siempre: "Soy mayor que tú, Stiles." "Yo no te convengo, de seguro debe haber alguien mejor para ti." "No creo que esto resulte bien..." "Stiles no estoy preparado para empezar otra relación." "Confío en ti, Stiles, más que en nadie, pero..."

No, Stiles no iba a seguir esperando a que Derek tuviera el valor de dar el primer paso. Era hora de tomar cartas en el asunto y así lo hizo. Por eso estaba frente a la puerta del loft en el que ahora vivía Derek. La puerta se abrió sin que él alcanzara a dar aviso de que estaba allí, pero era obvio que algo así pasara pues estaba visitando a un hombre lobo, súper oído y esas cosas de hombres lobos que apestan algunas veces (la mayoría, según Stiles).

Derek se lo quedó mirando y no hizo ningún amago de moverse de la puerta, bloqueándole la entrada a Stiles. Pero Stiles no vino hasta su loft para rendirse tan fácilmente, así que se llenó de valor e invadió el espacio personal del hombre lobo y sin decir ninguna palabra, porque él ya había intentado convencer a Derek con ellas y no había funcionado, decidió optar por las acciones esta vez. Por eso en ese momento Stiles estaba besando a Derek, quien sorprendido dio un paso atrás haciendo que ambos entraran por completo al loft. Stiles en ningún momento soltó a Derek ni dejó de besarlo. Derek intentó resistirse, pero Stiles fue tan insistente que terminó cediendo a la pasión de aquel beso y Stiles gimió de placer al sentir que Derek ya no se resistía, que al fin aceptaba lo que sucedía entre ellos dos.

Su lobo amargado (sí, Stiles iba a comenzar a utilizar pronombres posesivos desde ahora en adelante) intentó detener el beso y eso no se supone que no debía pasar, no cuando las cosas parecían estar bien encaminadas, por qué Derek no quería darse a la razón. Stiles lo haría entrar en razón, lo haría entender que valía la pena darle una oportunidad a lo que había entre ellos. Por lo que hizo un ruidito de protesta y continuó besándolo con más fervor que antes, pero una risita femenina lo distrajo y sin soltar a Derek abrió los ojos y se encontró con Cora, quien sonreía divertida.

— Oh, no se preocupen por mí… Continúen con lo suyo, de todas formas yo ya me iba —dijo y Stiles quiso morir de vergüenza—. Nos vemos, hermano. Y no te diviertas demasiado, recuerda que yo también vivo aquí —se despidió y se fue riendo.

— ¿No podías haberme avisado antes de que estabas acompañado? —reclamó sonrojado Stiles.

— Pues, si no mal recuerdo, tú no me diste ninguna oportunidad para hacerlo —respondió con una sonrisa picarona.

— ¡Ugh, eres de lo peor! —exclamó Stiles.

— Mientes —le dijo Derek aprisionándolo contra la puerta para luego besarlo con delicadeza.

— Más te vale que recuperemos todo el tiempo perdido, porque ya te espere demasiado y no sé si pueda dejar de besarte ahora que al fin sé cómo saben tus labios —Derek sonrió al escucharlo y sin aviso previo alzó a Stiles, quien inmediatamente rodeó con sus piernas la cintura del lobo y lo besó mientras Derek los llevaba hasta su cama. Stiles sonrió en aquel beso, porque supo que al fin estarían juntos y no sería solo en aquel momento si no que estarían juntos toda la vida y aunque sabía que las cosas no siempre les serían fáciles al menos se iban a tener el uno para el otro.