AMOR ENTRE HERMANOS
Capítulo 1: ¡ POR QUE A MI!
Era una tranquila mañana en el santuario de las amazonas, ya habían pasado dos años y medio desde que la familia azul encontró a su especie y comenzaron a vivir en lo salvaje.
Todos estaban ocupados en sus deberes diarios, Perla estaba acompañando a Blu en su entrenamiento para que algún día pudiera proteger también a la tribu, mientras que los niños se quedaron a disfrutar el día en el árbol. Carla se quedó encerrada en su cuarto escuchando su Ipod mientras que sus hermanos…
Tiago: "Hey Bia ¿qué haces? deja de leer esa basura y vámonos de aventura"
Bia: "No es basura se llama conocimiento, pero claro tú no sabes de eso, no tienes nada en la cabeza, - *se ríe* – Pero está bien, vamos ¿y adonde quieres ir?"
"No lo sé, ¿qué tal si damos un paseo en los pantanos?, espantamos a los lagartos y listo. ¡Vámonos!"
"¿No sería algo peligroso? Si los enojamos muchos podrían atacarnos"
"Jajajajaja, para eso volamos rápido y les echo estiércol para distraerlos, vamos es peligroso pero es seguro, bueno casi seguro"
"Mmmm de acuerdo vamos, pero tengo hambre, ¿qué podemos comer?"
"¡Vamos hermana! Come una nuez y vámonos"
"Mmmmm... naaa, quiero un mango"
"Bueno, entonces cómelo"
"Pero no cualquier mango, de los que tienen los monos, ¿o no puedes con el reto de traerme uno?" – dijo Bia en forma de desafío
"Jejeje, será pan comido"
Ambos hermanos emprendieron el camino hasta una zona fuera de la arboleda de nueces de Brasil.
Pasaron cerca de tres horas en llegar porque iban disfrutando del paisaje, Bia le gustaba apreciar la belleza de la selva, mientras que Tiago estaba haciéndole bromas a todo aquel que se encontrara en su camino.
En esos momentos a Bia le llegaron ciertos impulsos por ver a Tiago tan fuerte y ágil por la gran destreza que mostraba al pasar entre las lianas sin enredarse.
"Tiago, eres tan guapo, quiero mostrarte cuanto me importas, mmmmm, te ves muy excitante, serás mío, no teme escaparas hoy" – pensó ella con deseos de lujuria, pues se sentía atraída hacia su hermano
Cuando llegaron empezaron a buscar a algún grupo de monos hasta que encontraron uno que estaba disfrutando de unos jugosos mangos petacones.
"Muy bien... veamos si lo logras" – dijo Bia retándolo
"Okay" – dijo Tiago confiado preparándose para ir por el mango
"y Tiago... si lo logras... te ganaras algo muy... especial" – dijo ella con voz coqueta
"Jajaja ¿algo especial?, ¿te encuentras bien?" – dijo algo nervioso por la forma de hablar de su hermana
"Mmmmmm... siiiii... anda, ve rápido, sino no te daré tu ... premio ..." – dijo ella dándole una mirada lujuriosa
"Eehh, okay" – dijo Tiago un poco extrañado por la forma de hablar de Bia
Tiago fue volando a donde se encontraban los monos, y con su gran destreza para bromear y escaparse logró ahuyentarlos y así tomar el mango sin problema alguno. Uno vez teniendo el mango en su poder, regresó con Bia.
"Hermana, regrese" – dijo Tiago en forma victoriosa
"¿si, y el mango?" – preguntó Bia
"Aquí está" – dijo Tiago sacando el mango
"¡Guao! si pudiste" – dijo sorprendida – " gracias guapo..." – mencionó con voz coqueta
"¡¿Que?!" – * Tiago se apena y se pone rojo*
"Dije…" - *se le acerca* – "gracias guapo" – de la nada le roba un beso en el pico
"¡Oye! ¡¿qué hiciste?!" – dijo Tiago sorprendido y algo molesto por la repentina acción de su hermana
"Aaaayyy, no te hagas el tonto, que bien que te gustó" – dijo ella con mirada coqueta
"¡¿Gustarme?!" - se apena y se sonroja – "¡pero tú eres mi hermana!"
"Eso no significa que no pueda hacer esto" – se le avienta y lo vuelve a besar, pero abrazándolo, haciendo que Tiago tirara el mango
"¡Espera!" – *exclamó Tiago*
"¡Besas increíble!" – dice Bia más excitada que antes
Tiago avienta a su hermana y dice – "¡No, esto no está bien!"
"¿Por qué?" – dice Bia poniendo una mirada triste
"¡Porque eres mi hermana y eso no debemos hacerlo!" – dijo Tiago tratando de convencer a su hermana
"¡¿Quién lo dice?!" – preguntó molesta, casi indignada – "¡Nadie me prohíbe que yo te quiera!"
"¡Si, pero no de esa manera, en besarme en mi pico!"
"No te hagas el respetuoso con migo, sé que no te puedes resistir a mí"
Bia se pone ruda, se le vuelve a aventar y lo tumba hasta el suelo de la selva, Tiago cayó de espaldas y se sentía adolorido, y Bia cayó encima de él. Se golpearon tan fuerte que Tiago se desmayó por un par de horas.
Aaaaauuu, mi cabeza, pero que pasó…
Bia se despertó antes pues no recibió tan fuerte el golpe de la caída porque cayó en Tiago
Espera, ya recordé…
Bia comienza a buscar con la mirada a Tiago, apenas gira la cabeza nota que está dormido
Este es mi oportunidad
Bia aprovechó que su hermano estaba inconsciente por el golpe, y empieza a besarlo en las mejillas pero sin despertarlo, poco a poco fue recorriendo todo su cuerpo con ligeros besos, pero a ella la estaba excitando todo lo que hacía.
Estando así, ella no tenia deseos de detenerse, fue bajando cada vez más dando largos y apasionados besos al ir bajando por su cuello, luego por el pecho hasta llegar al estómago, entonces… Tiago despertó
Que… ¿Qué paso?, ¿Bia?, ¡¿Qué estás haciendo?! ¡DEJAME!
Bia, al escuchar que Tiago despertó, rápidamente se sentó arriba de Tiago dejándolo inmóvil de pararse
"¡Ahora sí, no te me escaparas!"
"¡Espera, déjame!" - trata de zafarse desesperadamente
"¡¿Asique te vas a hacer el difícil?!" – dijo Bia con voz desafiante
"¡Hermana por favor, algo me pasa y no es normal, por favor suéltame!"
"Mmmmmm, jejeje, creo que ya sé que te pasa..." – dijo ella con voz lujuriosa
Tiago comienza a pensar – "que me pasa, siento que algo me está creciendo entre mis piernas, dios debo hacer algo" – luego dice con desesperación – "¡Bia por favor suéltame!"
Le susurra al oído – "Solo déjate llevar..." – le da otro beso en la boca
"Espera, hermana por favor, si alguien nos descubre… ¡por favor déjame ya!"
Bia al darse cuenta de que Tiago no iba a ceder, decidió detenerse, pero no sería lo último que sabría de ella…
"Okay, te perdono por hoy" – terminó diciendo triste y algo resignada – "Jajajaja, ya tendré otra oportunidad..." – pensó por un momento Bia
"Bien, gracias, ahora me iré a dormir un rato… y por favor, ¡déjame en paz!"
"Okay, okay, ya tranquilo, no lo volveré a hacer" – dijo Bia cruzando los dedos, sin que Tiago la viera y luego pensó – "Esto es solo el comienzo…"