Happy Three Friends Es un pueblo de lo mejor, en especial si solo quieres gozar! Lo tiene todo el mar, los bosques, montañas, Todo hombre! Es lo mejor de lo mejor!.- Decía un hombre al mismo tiempo que se fumaba un puro. Es verdad, no hay nada mejor que Happy Three ese pueblo es ideal para todos!-Respondía otro con entusiasmo.

En definitiva Happy Three es un pueblo que lo tiene todo. Incluso las mismas personas eran de lo mejor, amables, bondadosas, casi perfectas Quien no quisiera vivir en un lugar como ese, cierto?

Felicia Thomson, también conocida como Flaky, una joven estudiante de 15 años, pelirroja, ojos naranjas casi amarillos, cuerpo algo voluptuoso, de estatura pequeña y pelos rebeldes, tenía su uniforme su falda negra, calcetines arriba de la rodilla, zapatos negros, con blusa blanca, suéter estilo escoses y su boina con el símbolo de la escuela, se dirigía a la escuela El Colegio Del Estudiante Happy Three, haciendo honor al pueblo al ser la única escuela del mismo. Era una escuela extraña, con un Sistema educativo distinto, a los alumnos se les separaba por sector, el sector c: Primaria, que contaba con 5 niveles, los cuales se dividían en 5 grupos; El sector B: Secundaria, el cual tenía 3 Niveles, separados en 6 grupos y el sector A: Preparatoria, con 3 Niveles, separados en 8 grupos. Había muchas universidades en Happy Three, pensó Flaky, posiblemente o era necesario aquel nivel. Al estar apunto de llegar mira aquella negra y dura reja de acero, con un grabado de flores, el cual había sido invadido por una enredadera cubierta de hojas, raíces y flores. Por dentro se encontraba llena de estatuas, murales, árboles y flores era hermoso como un jardín encantado. Lugo estaba el edificio parecía un Castillo antiguo, lleno de adornos de concreto, y ladrillos, con hermosas ventanas decoradas. Era un encanto. Al llegar los alumnos se encontraban caminando o sentados. Fue hacia su locker, para así poder dejar sus libros y cuadernos. De camino se encontró con Petunia Hamilton, una de sus amigas más cercanas:

Hola Petunia!- Dijo Flaky abrazándola, Petunia era una muchacha alta, de cuerpo voluptuoso, cabellos azul y ojos violetas, era muy inteligente y atlética, además era mayor que Flaky por 1 año lo cual significaba que tenía 16 años, e iba en el sector A, nivel 1.

-Flaky mi flaquita- dijo con cariño y se fundió con ella en un abrazo, no es como si hubiera pasado mucho tiempo, es que eran como hermanas, solo que con menos peleas.

-Mis pequeñas!- Interrumpió Giggles metiéndose en el abrazo, fue bienvenida. Giggles, más bien, Ginger Meyer una chica de 15 años, pelo ondulado y rosa, ojos verde esmeralda y de estatura baja, su cuerpo parecía el de una niña. A pesar de traer el uniforme lo combinaba con un moño grande y una bufanda, parecía una muñeca- Ya escucharon quien vendrá a la escuela?

-Quien? – Pregunto Petunia con un interés fingido.

-Ay que chistosita!- se burló Giggles- Es de tus sector me sorprende que no lo sepas.

-Ahh si A ver dime quien es? – Reto petunia.

- Es un chico del sector A Nivel 2 grupo 5. Se llama Frederick Pickles, pelo verde, ojos olivo, alto,- dijo Giggles soñando con el chico que desconocía.

-Vaya pues si estas informada- Dijo con la boca abierta Petunia al ver hasta donde llegaban los alcances de su amiga por obtener información.

-Militar…-Pensó en voz alta Flaky.

-Lo conoces? Entonces si debo informarme- Pensó Petunia con ciertos escalofríos al sentirse tan antisocial.

-No, bueno si ya lo conocía, el no vendrá a la escuela Giggles, el regresara. Es primo de Mr. Pickles-Dijo Flaky pensando en que posiblemente ya conocía al chico pero no podía recordar de dónde.

-De donde lo conociste? Es guapo?- Preguntaron Giggles y Petunia casi coreando.

-Ehh..- La pelirroja empezó a recordar- Si fue en su último día de escuela, su padre lo mandaba a la Escuela Militar, yo pase todo el día con él, pero eso fue hace años- Dijo Flaky.

-Chicas Hola!- Grito Lumpy haciendo a estas asustarse, Lumpy o Leonard Blue un chico alto de cabellos celeste, con mirada distraída, de apenas 17 años era gran amigo de las tres chicas pero no quitaba que fuera tan distraído.

-Ve con tus amigos del sector A nivel 2 anda!- Dijo petunia, dando a conocer sus celos.

-Estas celo..- Dijo Lumpy dejando inconclusa la frase- Olvídalo- Reprocho sin darle importancia- Están hablando de Flippy no?

-Si? Si él es Frederick- dijo Giggles.

-Ahí esta- dijo mientras agitaba la mano y gritaba su nombre a todo lo que daba- Flippy compadre ven acá!

El joven peliverde se acercó dejando atrás con una señal a sus amigos, sonriendo, las chicas no pudieron evitar sentirse atraídas por el joven de suéter militar por encima del uniforme.

-Que belleza – ronroneo Giggles al verlo. Petunia la miro con el gesto de él es mío, al momento que lo miraban seductoramente.

-Hola chicas es un gusto soy Frederick, pero llámenme Flippy si?- Al mirarlas a todas, miro a Flaky y clavo su mirada en ella, la recordó – Tu! Flaky!- Dijo abrazándola fuertemente, Giggles y Petunia casi lloran al ver a su "Hombre" con los brazos puestos en otra mujer.

-Q-Que? Que haces?- Dijo Flaky enrojecida -Acaso no me recuerdas? Soy yo Flippy! Pasaste el ultimo día conmigo –Dijo el con una cara triste. -Si te recuerdo pero no somos, tan amigos, supongo…-Dijo algo avergonzada, no es que no quisiera a Flippy, simplemente que había pasado mucho tiempo y realmente no fueron amigos más que un día.

El timbre sonó y todos fueron para sus sectores, recogieron sus cosas y se dirigieron a sus salones. Si bien Happy Tree si era algo extraño, pensó la pelirroja recordando cuando entro a un sector (una parte de la escuela) completamente solitario. Ningún alumno, ningún maestro, nada. Fue realmente extraño porque la escuela se divide por partes, llamadas sectores en los cuales se encuentran los salones, divididos en grupos. Por lo general todos tienen un centro donde se encuentran los lockers, las entradas/salidas y baños. La escuela se unía por fuera donde los alumnos de diferentes sectores se encontraban. Ahora que lo pensaba bien Flaky no recordaba por que se encontraba en aquel lugar…Todo resultaba tan confuso cuando lo pensaba. Más cuando pensaba que la escuela era casi un palacio lleno de pasadizos y salones sin recorrer.