Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Masashi Kishimoto.

Capítulo 12. Agradecer es dificil.

Pasaron los días y Temari evitaba a Shikamaru como podía. Apenas salía de su habitación y era Ino la que salía a hacer sus cosas por ella. No le hacia mucha gracia que trataran a su mejor amiga como una sirvienta pero ese era el acuerdo. Ino debía hacerse pasar por la doncella de Temari si quería vivir en el palacio Nara. Ya era de tarde e Ino entraba en la habitación con ropa nueva para Temari.

- La señora Nara me ha dado estos kimonos para ti, dice que si vas a convertirte en princesa es mejor que vistas como tal. – Dijo, con una sonrisa.

- No me interesa mucho la ropa, la verdad… - Dijo Temari con un deje de aburrimiento en la voz.

- ¡Pero si la ropa de aquí es preciosa! Mira que tela, que colores, que bordados. Ojalá pudiese vestirme yo con semejantes cosas…

- Si los quieres puedes ponértelos. – Dijo, dándose la vuelta sobre el costado.

Ino la miró con algo de odio. La verdad era que Temari tenía ganas infinitas de salir a explorar el palacio, pero tenía miedo de encontrarse con Shikamaru. Le resultaba bastante extraño que no hubiese ido a visitarla en lo que iba de semana, la ultima vez que lo vio fue cuando discutieron por la liberación de Ino, y aún no había tenido la oportunidad de darle las gracias.

- No entiendo porqué te asusta tanto hablar con él. – Dijo Ino.

- ¿Qué? No me asusta, ¿Qué te hace pensar eso? – Dijo Temari claramente sonrojada.

- No será… ¡¿Te gusta Shikamaru?!

- ¡NO! – Gritó Temari, tapándole la boca a Ino de un salto. – Es solo que… yo creo que le he gritado mucho y al final… no es tan mal tío… ¿Entiendes?

Temari soltó a Ino y esta asintió, sonriendo. Comieron y antes de irse las dos a dormir, Temari le pidió a Ino que la vistiera con uno de los kimonos de color negro y púrpura. Se disponía a ir en busca de Shikamaru para darle las gracias, y esperó a que todas las luces estuviesen apagadas para no encontrarse con nadie en los pasillos.

Mientras Temari caminaba por los pasillos oscuros en busca de algo que pudiese indicarle donde se encontraba la habitación de Shikamaru, se empezaron a escuchar pasos que se acercaban y de repente asomó una pequeña luz por el pasillo. Debido al miedo de que la descubriesen abrió la primera puerta corredera que vio y se metió dentro del cuarto sin mirar siquiera lo que había dentro. Esperó a que la luz del pasillo desapareciese y entonces miró detrás suya para saber si había molestado a alguien, que esperaba con toda su alma que no. Para su sorpresa estaba ni mas ni menos que Shikamaru tendido sobre un futón, sin la manta por encima.

Tenía el pelo liso revuelto alrededor de la cabeza y un yukata de color verde oscuro, estaba tumbado boca arriba, con las manos por detrás de la cabeza. La verdad es que no parecía que estuviese durmiendo, sino más bien descansando.

"Bueno, está dormido así que mejor vuelvo mañana" Pensó Temari.

- ¿Qué haces aquí?

- ¿¡EH!? – Gritó Temari.

- No grites, es molesto.

- Pensé que estabas durmiendo.

- Lo estaba, pero entraste tú y bueno… - Dijo Shikamaru, sentándose. - ¿Y bien? ¿Intentabas escapar y te pillaron?

- Quería darte las gracias, pero veo que no está de humor el señorito. – Dijo Temari, abriendo la puerta, dispuesta a irse.

En ese momento Shikamaru se levantó lo más aprisa que pudo, cogió a Temari, le tapó la boca y cerró la puerta de golpe. Temari empezó a jadear un poco pero se dio cuenta de que una luz se acercaba con rapidez por el pasillo y paraba justo delante de la puerta de Shikamaru.

- Señorito Nara, ¿Está usted bien? He escuchado ruidos…

- Todo bien, gracias.

Shikamaru soltó a Temari y se dirigió al fondo de la habitación, donde cogió una extraña mesita y unas cajas con fichas e invitó a Temari con la mano a que se sentara allí con él.

- ¿Te Gusta jugar a Shōgi?

- No. No sé lo que es.

- Oh. Siéntate, te voy a enseñar.

Temari se sentó, y poco después entendió relativamente la manera de jugar. Se le daban bastante bien las estrategias y podía ver que a Shikamaru se le daba mil veces mejor que a ella, quizás en el fondo no era tan estúpido, pensaba.

- Gracias, por lo de Ino y por lo de ahora. – Dijo, muy bajito, levantó la vista y vio como Shikamaru esbozaba una pequeña sonrisa de lado y pensó que era muy bonita.

Buenas tardes! He decidido no publicar esto con una fecha concreta, simplemente lo subiré cuando pueda, puesto que estoy de vacaciones y no controlo bien mis horarios, siento las molestias que esto os pueda ocasionar :( Espero que os guste el capítulo! Ya queda poco para terminar. Un beso y dejen reviews.