Disclaimer: Shingeki no Kyojin ni sus personajes me pertenecen, son propiedad de su respectivo autor; Hajime Isayama.


Habían pasado unos cuantos días desde que Eren decidió darle una "oportunidad" al mayor. Y éste, estaba haciendo el esfuerzo por no asustarlo -demasiado-.

El primer día, decidió hacerle un almuerzo, para que se lo llevara a la escuela. Pero hizo que el microondas explotara y no se pudo.

Sin embargo, Eren agradeció el gesto.

El segundo día, Levi le había comprado un suéter igual al de él, pero rosa pastel, porque según el mayor, el rosa chillón era un color muy limpio para él.

Eren comenzó a usarlo para dormir también.

El tercer día fue por él a la escuela. Se volvió a encontrar al feto de caballo -o algo así, un tal John o Jeff- y lo volvió a golpear, por Eren.

Éste le abrazo por haberlo hecho.

Para el cuarto día Levi empezaba a acostumbrarse a los abrazos del menor.

Al quinto día el mayor visitó a Eren en su trabajo. Le dijo lo bien que se veía con su traje de mesero.

Eren también le agradeció, con un lindo rubor en sus mejillas.

Y el sexto día, estaba por verse.

Había salido algo más temprano de su trabajo, pues quería tener más tiempo con Jaeger antes de que se fuera al restaurante. Era miércoles, podían ver la televisión o algo parecido.

Sin embargo, cuando ingresó a su apartamento, se encontró con algo inesperado -y para nada agradable-.

Había una chica. Una chica de pelo negro y bufanda roja. Al parecer la misma chica que los espiaba de vez en cuando. Estaba ahí, sentada en su pulcra sala. La estaba ensuciando. "Perra" pensó Levi.

Decidió hacer algo.

— ¡Eren, se metió una chica a la casa! —dijo—. ¡Trae la escoba!

— ¿Por qué debería hacerlo? —oyó desde la cocina, donde se encontraba el de ojos esmeralda.

—Puede estar infectada. Además, no la quiero aquí.

—Pues no se va —reclamó, entrando a la sala—. Mikasa y yo estamos estudiando. La próxima semana son los últimos exámenes del ciclo y los más importantes. Tenemos que salir bien sí o sí —explicó, mientras le daba una taza de limonada a la chica.

Mikasa no pudo evitar sonreír con victoria.

— ¿Y tu trabajo? A tu jefe no le gustara que faltes —siguió. Tenía que hallar una forma en que aquella...abominación denominada "chica" saliera de su casa.

—Levi, hoy es miércoles.

—Sí, ¿y?

Eren lo miró incrédulo. —Hemos estado viviendo juntos durante casi dos meses, ¿y no se ha dado cuenta de que tengo los miércoles libres?

Mikasa soltó una risita.

Levi se molestó.

—Ah, tú cállate. Al menos mi nombre no es absurdo —dijo, y se volteó hacia Jaeger—. Nunca me lo habías dicho.

Eren suspiró con fastidio. —Se lo mencione varias veces la primera semana, además, ¿no se le hacía extraño verme caminar por el apartamento cada miércoles por la tarde?

—Pensaba que eras una ilusión.

—Sí.

—…bien. Pero, como sea, Mikasa no se va.

Ackerman volvió a sonreír.

Levi no se iba a dar por vencido. No. Esa era su hogar -y el de Eren, pero más suyo- y no iba a dejar que una abominación de nombre Casa se quedará más tiempo ahí.

Recordó algo. Algo que haría que ese monstruo se largara.

Por primera vez agradeció tener esa cosa llamada "amigos".

—No se puede quedar, hoy es miércoles de películas.

—Levi, fuimos el cine hace unos días.

—No, no en el cine. El último miércoles del mes, La loca, El teñido y yo nos reunimos en la casa de alguno a ver alguna película. —Explico con un tono algo orgulloso.

Eren suspiró. —Levi, usted me dijo que eso era una total perdida de tiemp-..

—No hay tiempo para hablar, Eren. Hoy toca aquí. Vamos, Casa de Eren agarra tus muebles y lárgate. —le escupió a Mikasa las palabras, señalando la puerta.

Ackerman le dirigió una mirada fría, levantándose y dejando un pequeño beso en la mejilla de Jaeger. —Nos vemos mañana, Eren. —Y con suma elegancia, dejó el apartamento.

— ¿Por qué hizo eso?

— ¿Hacer qué?

—No se haga el desentendido, sabe bien lo que hizo.

— ¿Qué?

— ¡Ash! ¡Eso, correr a Mikasa! —gritó ya medio exasperado por la actitud del mayor.

—Eren, no se puede correr a una casa. A menos que sea rodante.

—Levi...—suspiró abatido. Eren pensaba que lo que no tenía el azabache de alto, lo tenía de molesto.

—Tú sabes bien que no hablo con mujeres. No son lo mío—explicó mientras se tomaba la limonada que anteriormente era de Ackerman. Ésta no la había tocado y el mayor no iba a desperdiciar algo hecho por las magníficas manos de Eren.

—No mienta, usted habla perfectamente con Hanji.

—Eren, Hanji no es una mujer, es un algo.

— ¡Levi!

—Bueno, ya. Ella es lesbiana, no cuenta.

—…Algunas veces me gustaría cambiarme de apartamento.

Levi se ofendió y tomó a Eren en un brusco abrazo.

—No, no quieres.

—No, no quiero—contestó, sin aire.

—Oww…. ¡sólo míralos Erwin!

Eren se zafó de los brazos del mayor rápidamente. Hanji y Erwin ya habían llegado.

— ¿Cómo entraron? —preguntó Eren.

—La puerta estaba abierta —contestó la mujer, mientras se echaba en el sillón.

—…Genial, ahora tendré que quemar ese sillón—dijo Levi, viendo como Hanji se acomodaba.

Erwin sólo reía.

—Bien, que esto acabe rápido. Pongan la estúpida película.

~•~

Eren se encontraba muy cómodo, estaba sentado a un lado de Levi y tenía el tazón de palomitas en su regazo. La película en sí no era la mejor, pero estaba entretenida.

Al momento en el cual los protagonistas tuvieron una escena romántica, Jaeger sintió algo en su estómago al recordar un no-muy-bonito evento en el cine hace algunos días. Sintió algo en su mano, volteó y se encontró con la mano del mayor, tratando de entrelazarse con la suya.

Eren la quitó de ahí.

—Eren, toma mi mano, no seas marica.

—Pero…

—Marica.

Al final, tuvo que entrelazar las manos con Levi.


*Renace como el fénix*

HIERBA MALA NUNCA MUERE.

¿PENSARON QUE SE LIBRARÍAN TAN FACIL DE MÍ? PUES NO FJIEHNETHGT.

PD: NUESTRO MATRIMONIO SIGUE EN PIE, ¿OC? OC.