Cap. XV

Desde Cero

Ahí estaba otra vez, en medio del bosque con raspones, un par de cortes, tierra y polvo en su ropa y cabellos, se puso de pie, con dificultad, el cuerpo le pesaba y se sentía demasiado débil, se apoyó en un tronco cercano, su mano sintió el tacto rugoso y pegajoso del tronco del árbol, la quitó, no le apetecía tener la mano llena de sabia, a pesar de que sabía que todo era un sueño más… Porque lo era, ¿verdad?

—Es un sueño—susurró, más para sí misma que para alguien más—. Es solo otro sueño, en cuanto me haya tranquilizado despertaré en mi cuarto, en medio de un desastre y mis hermanas vendrán a verme.

Cerró los ojos y se concentró en el ambiente, para tranquilizarse, sintió en su piel la humedad del bosque, probablemente había llovido hace poco, el tacto rugoso y húmedo de la tierra en las plantas de sus pies, estaba descalza, eso era nuevo, el aroma a tierra húmeda, el aroma a flores silvestres y rocío, un extraño aroma a quemado, débil, negó con la cabeza y se concentró en escuchar, el sonido del viento al pasar entre las hojas, el sonido de las pisadas de los animales en el bosque, el batir de las alas de un búho, a lo lejos, el murmurar de un río, la voz de Brick llamándola, el aullido de un lobo… ¡¿La voz de Brick llamándola?!

Abrió los ojos de golpe y eso le valió uno de los mareos más fuertes que había sentido, se apoyó en el árbol nuevamente y una imagen le taladró el cerebro.

Son dos niños, un chico, de cabello negro y ojos verdes, y una chica, de cabello rojo y ojos rosa con destellos celestes, no deben tener más de 10 años; ríen y juegan, él la mira, se le acerca, atrapa su rostro con una de sus manos y la besa, se separan rápidamente, él sonrojado y nervioso, ella confundida y sonrojada, el niño quiere escapar, pero ella lo toma de la mano, él voltea a verla y ella le sonríe.

Abrió los ojos nuevamente y se separó del árbol, ¿qué había sido eso? No lo sabía y, por el momento, no le interesaba, giró sobre sí misma y se adelantó un par de pasos, con cuidado, la luz de la luna no penetraba en ese reducido espacio de bosque, avanzó un par de pasos y se cayó, una esquirla de vidrio clavada en su pierna, maldijo en silencio y se la arrancó, ahogó un grito y se puso de pie, avanzó, cojeando, se coló entre dos árboles y chocó de narices contra alguien, cayendo ambos al suelo, había chocado contra alguien más alto que ella, más grande que ella, de cabello negro azabache y de ojos verde jade… ¡Genial! Le acababa de romper la nariz a Butch.

— ¡Bravo! Ahora Brick me debe una recompensa—Blossom observó, anonadada la forma en que la nariz de Butch volvía a su forma original, dejando solo un rastro de sangre para recordarle que de verdad le había roto la nariz al chico—. Vamos rosita, no es la primera vez que me rompen algo, ya me acostumbre, no te pongas así.

Bueno, ahora sí estaba segura de que no estaba soñando, todo lo que recordaba, todo lo que había soñado, sucedió. Cerró los ojos y dejó que las lágrimas rodaran por sus mejillas, pudo evitarlo, pero no lo hizo, todo por cerrarse, por obligarse a olvidar sus sueños, por negar su naturaleza. Se abrazó a sí misma y ahogó los sollozos que luchaban por escapar de su boca, sollozos que ahora morían en su garganta y que, sin embargo, Butch notó.

El moreno se incorporó lo más rápido que pudo, se acercó a la pelirroja y la observó, pequeña, vulnerable, una imagen tan extraña, tal vez no se comparaba con lo que Brick había visto, tal vez, para él, no se comparaba a ver a Buttercup llorar, pero bastaba para tocarle el corazón a cualquiera, y él no era inmune a la compasión, la miró nuevamente, cortes en los brazos, rasguños en el rostro, mangas rasgadas, ropa mugrienta, pies descalzos… y un gran charco de sangre formándose bajo sus pies.

No tuvo que pensárselo mucho, tomó a la pelirroja en brazos y se encaminó lo más rápido que pudo hacia el campamento improvisado que habían montado a unos 70 metros del lugar donde encontró a la pelirroja, la respiración de la chica comenzó a ralentizarse, y Butch podía sentir su vientre húmedo debido al flujo de sangre de la pierna de Blossom, la pelirroja se estaba desangrando y, por primera vez en su vida, Butch envidió los poderes de sus hermanos, la súper velocidad de Boomer le habría permitido llegar al campamento más rápido, eso, si podía evitar ir tropezando por el camino, tal como le estaba pasando ahora mismo, aunque, podría hacer uso del poder de atravesar cosas para pasar entre los árboles sin chocar con nada, pero había un problema, si abusaba de ese poder, ¿podría terminar en el centro de la Tierra? Siempre se había preguntado si el poder de atravesar objetos sólidos incluía también el suelo… Por otro lado, los poderes de Brick también le habrían servido, podría haberse convertido en un águila o algo así para llegar al campamento, aunque, teniendo en cuenta que habría podido volar, eso de transformarse en ave podría haber sido algo estúpido; además, el fuego le habría permitido ubicar el campamento y dirigirse rápidamente a él, sin ningún trámite y sin tiempo a desvariar como lo estaba haciendo justo ahora.

— ¡Concéntrate Butch!

—Butch—la voz de Blossom le llegó en un tono suave y cansado, la estaba perdiendo—. ¿Están todos bien?

—Tranquila rosita, tus hermanas están a salvo, Luis y Laura llegaron justo a tiempo para salir, Boomer también está bien, yo estoy aquí…

— ¿Brick? No lo vi al caer…

—Eso iba a decirte, el idiota está bien, ¿recuerdas lo que te dije, sobre la recompensa?

—Sí, claro— ella cerró los ojos con fuerza y frunció el ceño—. No le digas idiota.

Butch rio y ella sonrió en sus brazos.

—Lo que digas rosita—atravesó un arbusto y se asomó a un sendero más transitable—. Ya casi llegamos, resiste un poco.

Pero ella no contestó, Butch la miró, al tiempo que aceleraba el paso, ella tenía los ojos fuertemente cerrados, inspiró hondo y luego dejó caer su cabeza hacia atrás, como si se rindiera.

— ¡¿Rosita?! ¡¿Blossom?!—sin respuesta, Butch sintió su corazón acelerarse, no iba a perderla, no iba a perder a aquella chica que se había convertido en parte de su familia, las hermanas Utonium eran unas extrañas, complejas, pero hermosas criaturas, cada una de ellas se había colado en su corazón de una forma extraña y diferente, Buttercup le había robado el corazón, definitivamente, sus muecas, burlas, golpes y sonrisas lo habían enamorado, Bubbles era como una hermanita cariñosa que siempre lograba sacarle una sonrisa a todo el mundo, y hacía a Boomer feliz, lo comprendía e, incluso, lo defendía; Blossom, por otro lado, comenzó siendo una especie de hermana menor rebelde, aquella con quien nadie puede tratar, pero terminó abriéndose un poco ante ellos y ahí Butch descubrió a una de las chicas más fuertes que conocía, una persona inteligente, sarcástica, que, sin embargo, no lo cansaba ni le estorbaba, sino que apoyaba en todo a todos y le brindaba una oportunidad a todos, descubrió a aquella que parecía haberle devuelto la felicidad a su hermano mayor—. Resiste Bloss… resiste… por favor…

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Butch agradeció al cielo sus poderes, de otra forma no habría salido vivo de la paliza que le dieron todos y sí, cuando digo todos, me refiero realmente a todos. El pobre moreno había pasado de una paliza a otra, claro que, la primera había sido sin querer.

Uno creería que las despedidas habían durado mucho entre una y otra, pero no era así, el tiempo parecía ir más lento, permitiéndoles ese pequeño espacio para dejar todo en claro, pero una vez las despedidas terminaron, no paso mucho para que los ocho estuvieran reunidos y se encontraran con otro problema; la puerta. La dichosa llavecita no aparecía y la increíble puerta de vidrio parecía estar hecha a prueba de todo, incluyéndolo, o tal vez solo estaba debilitado por el sedante y el peso que llevaba. No supo cuánto tiempo estuvieron junto al cristal, golpeando y empujando, pero pronto, desde la esquina, unas gigantescas lenguas de fuego comenzaron a asomarse, acariciando y consumiendo todo lo existente en el estrecho pasillo y acercándose demasiado rápido, comenzaron a empujar la puerta en la desesperación, el fuego se acercaba, rápido y fuerte, abrazó a Buttercup con todas sus fuerzas, que, en ese momento, no eran muchas, y cerró los ojos para no ver su fin, sintió el calor golpearle en el rostro y luego… aire… Sin saber cómo todos estaban en el aire, apretó a Buttercup contra su cuerpo y giró, para recibir todo el impacto de la caída y evitar que la morena se lastimara.

Y sí, se golpeó y mucho, de hecho, podría decirse que se rompió todos los huesos del cuerpo al aterrizar sobre un tronco de árbol caído… Sí, era prácticamente irrompible, pero eso no significaba que el destino debiera ponerle pruebas tan difíciles; luego de "rearmarse" encontraron a los rubios, tuvieron suerte, Boomer aterrizó sobre un tronco podrido, amortiguando su caída, olían fatal, pero estaban completos. En cuanto a Luis y Laura, tuvieron suerte, Brick sacó lo último de fuerzas que le quedaban para atraparlos en el aire y permitirles aterrizar sin un rasguño, él también parecía ileso, inconsciente, exhausto, golpeado, con cortes y rasguños, pero sin heridas de gravedad. Pero Blossom no aparecía, la buscaron, pero sin alejarse mucho del lugar, para no perderse.

Para cuando Brick despertó y descubrió que la ojirosa no estaba no tardó mucho en adoptar el papel de líder, él y sus hermanos se encargarían de buscarla, mientras que Luis y Laura montaban el campamento y Bubbles se quedaba cuidando la pierna herida de Buttercup.

Lo primero que hizo Bubbles al oír el ruido de las pisadas de Butch fue pararse frente a su hermana mayor, como para protegerla, al ver el largo cabello naranja de Blossom, ambas se lanzaron hacia el moreno y, técnicamente hablando, le arrebataron el cuerpo de la pelirroja, Bubbles se apresuró a vendar la herida sangrante y realizar un torniquete para evitar que se desangrara, Luis y Laura le humedecieron el rostro y la frente, tratando de bajar la fiebre que Butch no había sentido y luego la llevaron a reposar en una de las tiendas. Butch creyó que ya estaba todo bien y que él podría cambiarse de ropa pronto… No estaba preparado para lo que sucedió…

— ¡¿Es que estas demente?!—Laura se abalanzó sobre él, tirándolo de los cabellos y gritando, ante el desconcierto de los presentes—. ¡¿Por qué no llamaste a Brick o a Boomer?!—y Butch pudo notar la forma en que Luis y Buttercup lo miraban, como comprendiendo lo que decía Laura, aunque él no entendía nada—. ¡Pudo haberse desangrado! ¡¿Te tropezaste?! ¡Las sacudidas empeoraron el sangrado!

Y ahí Butch comprendió todo, quiso decir que no había pasado, que ella estaba ahí, a salvo, débil, pero viva, que su pensamiento racional había sido bloqueado por la desesperación… Pero, ¿tú podrías decir algo con dos humanos golpeando tu rostro y dos superpoderosas enfadadas destrozándote el cuerpo?

Sí, lo dejaron hecho polvo, sobretodo la rubia y la morena, pero lo peor fue cuando sus hermanos llegaron, aún no había terminado de recomponerse (Sí, así de crueles fueron Bubbles y Buttercup) y ya tenía a Boomer sujetándolo por la espalda mientras Brick le enseñaba lo orgulloso que estaba de su "rescate".

A veces Butch deseaba que nadie supiera sobre su poder de curación, así no podrían golpearlo hasta dejarlo hecho trizas sin el temor a que algo malo le sucediera, pero claro, era imposible que algo malo le sucediera si casi instantáneamente su cuerpo comenzaba a regenerarse, y digo casi porque se tomaba una fracción de segundo para evaluar los daños y decidir por dónde empezar.

Butch suspiró, si tan solo tuviera súper fuerza podría habérselos quitado de encima sin ningún problema, ya quisiera él tener ese poder… Un momento… Lo tiene y siempre lo ha tenido, Butch rodó los ojos y a punto estuvo de regresar al Laboratorio y tirarse del acantilado a ver si por fin se lastimaba de gravedad, a veces sus hermanos y Buttercup tenían razón.

—Es que a veces eres un idiota Butch.

— ¿Apenas te das cuenta?

Butch no tuvo que girarse para distinguir la burlona voz que lo atormentaba, frunció el ceño y cerró los ojos. Buttercup se sentó junto a él, en el solitario tronco al que había sido recluido luego de la paliza, soltó una carcajada.

— ¿Qué?—gruñó él, no estaba de humor para aguantar sus burlas—. ¿Te causo gracia?

—Sí, un poco, sí— ella sonrió—. Estás aquí, fingiendo enfado con todo el mundo, tratando de hacernos creer que debemos pedirte perdón, y tal vez tengas razón, pero eso no quita el hecho de que fuiste un completo descuidado cuando la encontraste.

— ¿En serio?—un bufido, sarcasmo total en la pregunta—. Ella podría estar muerta en este momento si no la hubiera traído tan deprisa.

—No quiero bajarte de tu nube Butch, pero las sacudidas que le diste en tu camino hacia aquí le desgarraron la herida y provocaron una mayor pérdida de sangre—se mordió el labio—. Lo siento, me excedí al golpearte de esa forma—su voz se quebró—, pero es mi hermana y quiero que esté a salvo…

—Ya, no llores verdecita—Butch se incorporó sobre el tronco y acarició el rostro de la chica, ella desvió la mirada y se limpió las lágrimas que amenazaban con deslizarse por sus mejillas—. Sí, lo sé, tienen razón, fui un completo y total idiota, en cuanto a los golpes… de cualquier forma, soy prácticamente inmune al dolor físico, parte de las ventajas de estos poderes, supongo, solo algo muy fuerte podría despertar mis dormidos receptores del dolor, si es que no han muerto aún.

Ella sonrió, negando con la cabeza. Butch le sonrió, lo que le había dicho era un 95% cierto, pero no era por sus poderes por lo que el dolor ya no lo afectaba, de hecho, estaba 100% seguro de que ni a él ni a sus hermanos les afectaba ya el dolor físico, solo era cosa de conocer la razón, pero, por ahora, estaba bien así.

—Anda torpe—Buttercup se puso de pie y le hizo una seña para volver a la fogata—. Brick quiere disculparse, pero no sabe cómo.

— ¿Y qué? ¿Eres su palomita mensajera?—una oleada de celos lo recorrió de la cabeza a los pies, contó mentalmente hasta 10 para que no se notara en su voz—. Estoy bien aquí, gracias.

— ¿Celoso?—ella arqueó la ceja izquierda, él la fulminó con la mirada y negó con la cabeza—. Tal vez eso influya, después de todo, solo había que ver la cara de Brick cuando Blossom despertó y le dijo a todo el mundo que tú eras su héroe.

Los ojos de Butch corrieron a capturar el rostro de la morena, si Brick estaba celoso, pues ella también lo había estado, de hecho, lo seguía estando. Butch dudaba mucho que la pelirroja hubiera usado una frase como "mi héroe", pero, al parecer, eso es lo que la morena había entendido y él odiaba cuando la gente realizaba juicios apresurados. Se puso de pie y la abrazó por la espalda, el cuerpo de Buttercup pareció relajarse, Butch sonrió, tal vez ya era tiempo de decirle lo que sentía, pero apenas ese pensamiento cruzó su mente Buttercup se tensó nuevamente y se apartó de él.

—Anda espanto, los chicos nos esperan.

Y se alejó, otra vez, como cada vez que él estaba dispuesto a decirle que la amaba, tal vez ya era hora de que le preguntara a Blossom cómo evitar que la morena leyera sus pensamientos.

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— ¿Por qué debo dormir con ustedes, horrorosos, cuando Luis y Laura pueden dormir juntos?

— ¿Estás insinuando algo?

—No, solo digo que—Butch se acomodó como pudo en el reducido espacio entre Boomer y Brick—, que deberíamos usar la otra carpa y dormir de dos en dos, después de todo, somos 6 sin contar a…

—Ya dije que no Butch, no vamos a molestarlas, deben de estar durmiendo ya; además, debemos proteger las provisiones de la lluvia y el sol, ahora, ¿nos dejas dormir de una vez por todas?

Butch gruñó ante la respuesta de su hermano mayor y dio una vuelta sobre sí mismo, tratando de hallar una posición cómoda para dormir, el rubio a su lado se alejó un poco de él y se giró, mirando a la "pared" de la tienda, al igual que había hecho Brick.

—Por lo menos dos de nosotros están cómodos, ¿no?—Boomer gruñó por lo bajo, mientras que Brick se incorporó, tomó su bolsa de dormir y salió de la carpa, no sin antes fulminar con la mirada a su moreno hermano—. Bueno, pero no es para que se pongan así.

—Mira Butch—Boomer suspiró—. Mejor duérmete ya, necesitamos descansar y pensar en lo que haremos a continuación, nos tenemos que mover si no queremos morir en medio del bosque. Así que, sé un poco más consciente o juro que lo que te hizo Brick hace un rato te parecerá un carnaval de azúcar, flores y muchos colores comparado a lo que te haré yo.

Dicho esto el rubio giró sobre sí mismo y cerró los ojos, más que dispuesto a cumplir su amenaza si Butch decía algo más, pero pasaron los minutos y el moreno no daba señales de vida, Boomer comenzó a dormirse, inspiró hondo y se acomodó, ya entraba en la fase de sueño cuando unos sonidos parecidos a sollozos lo despertaron, escuchó con atención y descubrió, con asombro que provenían de la persona junto a él.

¿Podría ser posible? ¿Su hermano mediano, llorando? Se incorporó, preocupado y giro hacia Butch, cuál sería su sorpresa al darse cuenta que el moreno estaba profundamente dormido y que lo que se oían como sollozos, no eran más que risas. ¡¿Butch se reía dormido?! Esto lo superaba, Boomer sintió sus mejillas enrojecer, no supo si por vergüenza o ira, solo supo que se dejó llevar por el instinto, le dio un zape a su hermano en la cabeza, despertándolo y luego masculló un "Idiota" al tiempo que se volvía a acostar; dejando a un confundido y somnoliento Butch mirándolo como si el rubio fuera la cosa más extraña del mundo.

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— ¿Creen que sea sincero?

—No lo sé Bubbs, duérmete ya—Buttercup rodó los ojos y le dio la espalda a su hermanita pequeña, solo para encontrarse con una pensativa pelirroja a su otro lado—. ¿Estás pensando en Brick?—las mejillas de su hermana mayor enrojecieron, ella la miró, sorprendida y confundida, luego negó con la cabeza—. Lo siento, tengo que preguntar, no solo eres la única a la que no escucho, últimamente he estado teniendo problemas con mis poderes.

— ¿En qué sentido?—y ahí estaba otra vez, la preocupación casi materna de su hermana mayor—. ¿No has podido usarlos o sientes que ya no los controlas?

—No es eso, es solo que, tengo que fijarme en un objetivo específico para escucharlo y, no sé, creo que a veces me invento lo que escucho o escucho solo lo que quiero escuchar.

— ¿Hablas de Butch diciéndote que te ama?

Un ataque de tos por parte de la morena y un ataque de risa por parte de la rubia; Buttercup se incorporó para poder respirar y fulminó a su hermana pelirroja con la mirada, ella le devolvió el gesto con una sonrisa burlona y le guiño un ojo.

—Yo nunca dije nada de "tu héroe".

Y de pronto, todo se detuvo, Blossom borró su sonrisa y Bubbles se calló, Blossom la miró con seriedad, se incorporó, enfrentó la mirada de su hermana mediana, hasta que los ojos verde esmeralda sucumbieron ante los rosa cuarzo, Buttercup desvió la mirada con enfado y un toque de vergüenza, Blossom tomó su bolsa de dormir y salió de la carpa, cojeando y cubierta apenas por uno de los delgados vestidos plateados que usaban.

—Sabes que lo quiere y lo respeta… al igual que a Boomer, siente que están bajo su cuidado, igual que tú y yo… Sabes también perfectamente que no siente nada fuera de la amistad por Butch y sabes también que la única persona que le interesa de esa forma, aunque aún le cueste un poco aceptarlo, es Brick—Buttercup no dijo nada, ni siquiera miró a su hermana menor—. Blossom está agradecida con Butch por ayudarla y se siente culpable. No tienes que hacerla sentir peor.

— ¿Cómo podría sentirse peor por eso?

Bubbles rodó los ojos con exasperación.

—No lo sé Buttercup—sarcasmo en la respuesta, un sarcasmo frío y cruel—. Ella siente que es su culpa lo de la bomba, que es su culpa lo de tu herida, lo de Conor, lo de… lo de papá—suspiró para no llorar—. ¡Y ahora también lo de la paliza de Butch! Y tú la haces sentir peor, la haces sentir un estorbo en tu relación con Butch…

— ¡No tengo ninguna relación con Butch!

—Ahórrate las excusas Buttercup, eres la única en este equipo que no se da cuenta que Butch está dispuesto a todo por ti a pesar de que lo rechaces siempre… Sí Butter, todos vimos lo que pasó cuando lo fuiste a llamar, no estabas tan escondida como crees—la morena apretó los puños—. Te preguntaré algo, ¿te sentirías amenazada si fuera yo en lugar de Bloss?

Buttercup recibió esa pregunta como un baldazo de agua helada, esa era una de las razones por las que había desviado la mirada con vergüenza, sabía que estaba culpando a Blossom por sus propias inseguridades, pero sabía también que una parte de ella deseaba lastimar a su hermana, por ser más lista, más fuerte, más interesante, lo suficiente como para no buscar la atención de nadie y, sin embargo, atraer la atención de todos, miró a su hermana menor, ella, tan hermosa, dulce, agradable y, sin embargo, no sentía celos de ella, Bubbles podía hasta abrazar a Butch y ella no sentiría nada de celos y, sin embargo, tan solo una mirada o la mención de Butch en los labios de Blossom la enfurecía, ¿por qué? No lo sabía, solo sabía que no estaba bien.

—No—susurró al fin, respondiendo la pregunta de la rubia—. Si fueras tú no habría ningún problema.

—Ya veo—asintió Bubbles, Buttercup la miró, como pidiéndole una explicación—. Butter, tienes que entender; Blossom es tu hermana, no tu competencia, no son, ni mínimamente, parecidas. No puedes compararte con ella como tampoco ella puede compararse contigo. Ambas son hermosas, cada una es interesante, a su manera, ella atrae por su inteligencia, tú, por tu fuerza. No existe punto de comparación, tú has sufrido, ella también, tienes miedo de enamorarte, ¿crees que ella no? ¿Crees que yo no? Que ella oculte lo que siente no quiere decir que no sienta, lo hace, no quiere que nos alejemos de ella… Butter, somos una familia, con sus fallos, sus defectos, pero una familia… No dejes que los celos te quiten a otro ser querido, creo que ya hemos perdido a demasiados.

Bubbles miró a su hermana, ojos color topacio, empañados en lágrimas, suspiró, una lágrima se deslizó por su mejilla, no se molestó en limpiarla, simplemente le dio la espalda y se acurrucó en su bolsa de dormir.

Buttercup la vio hacerlo, cerró los ojos y apretó los puños, una de sus manos voló hacia su cuello, en él, un dije color esmeralda en forma de nuez colgaba de una cadena de plata, regalo de su madre para su tercer cumpleaños, en honor a sus nombres, una burbuja para Bubbles, una nuez para ella, una flor para Blossom; distintas figuras que, sin embargo, al unirlas formaban un corazón, un complejo rompecabezas, cada dije tenía partes móviles que formaban, cada una, un tercio del corazón, Bubbles y ellas los montes superiores, Blossom, la base.

Buttercup suspiró, más que amigas, eran hermanas, de sangre y de corazón, Butch ya le había dicho que la amaba, tal vez no en voz alta, pero sí muchas veces, en su mente, solo que ella quería creer que no era cierto, tal vez debía dejarlo hablar, para variar. Y debería pedirle perdón a su hermana, eso haría, pero, por ahora, tenía sueño, ya lo haría cuando amaneciera, y cuando el calor del enojo hubiera pasado.

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Brick se acomodó como pudo junto a las provisiones, debía ser honesto, estaba sorprendentemente más cómodo que en su propia carpa, aunque también más frío y le hacía falta la sensación de tener a sus hermanos junto a él, Butch podía ser un fastidio pero era su hermano, y lo quería, pese a todo, pese a los celos que lo recorrían cada vez que lo veía con Blossom. Se sentía estúpido, sabía que sus hermanos sentían una afinidad más allá de la amistad por las hermanas de Blossom y, aun así, cada vez que Butch se le acercaba a la pelirroja… Negó con la cabeza, eran celos estúpidos, basados en sus propias inseguridades, en su propia sensación de ser menos que el resto, en su propia necesidad de ser más fuerte, en su propia inseguridad de no ser suficiente para Blossom.

—Genial—gruñó, después de todo, estaba solo y nadie lo iba a oír si hablaba en voz alta—. Estamos en medio de una guerra y yo aquí pensando si soy lo suficientemente bueno para una chica.

—Entonces la chica debe ser especial.

La dueña de sus pensamientos le sonrió desde el otro lado de la carpa, Brick la miró, como creyéndola parte de alguna de sus fantasías, tal vez ya estaba dormido, la pelirroja le hizo una seña, como pidiéndole permiso para entrar, él asintió y le hizo un espacio junto a él. Blossom entró como pudo, arrastrando su pierna, Brick cerro la carpa, para conservar el calor dentro y evitar que la chica, que solo vestía un vestido se congelara.

— ¿Qué haces aquí?

—Podría preguntarte lo mismo.

—Butch necesita su espacio para dormir con tranquilidad—ella sonrió y negó con la cabeza—. Ahora, ¿me dirías por qué estás aquí?

—Quiero que Buttercup reflexione acerca de sus sentimientos—Blossom suspiro—. Y que deje de usarme como excusa para rechazar a Butch.

— ¿Cómo excusa?

—Quiere creer que me interesa—Brick asintió, totalmente neutro—. Igual que tú, al parecer.

Brick miró a la chica, sorprendido, luego negó con la cabeza.

—Sabes que no es eso lo que me preocupa sobre nosotros.

—Sabes que te quiero, no tienes que ser perfecto—él sonrió, tomando la mano de la chica—. Tanto tú y yo, como Boomer y Bubbles y como los dos cabezotas que ya conoces—Brick soltó una carcajada—, somos perfectamente capaces de sobrevivir a esto, nos cuidaremos las espaldas, es para lo que nos entrenaron—Brick asintió con seguridad, apretando la mano de Blossom, ella le sonrió, pero luego su rostro cambió y una sombra de preocupación ensombreció sus rasgos—. A mí solo me preocupa una cosa.

— ¿El qué?

— ¿Qué vamos a hacer ahora Brick?

El chico suspiró, había estado pensando en eso desde que la euforia del escape había pasado y había dado paso a las cuestiones más importantes de su realidad actual. ¿Qué hacer? No tenían alternativas, no había nadie a quien recurrir y aún no estaban lo suficientemente preparados como para enfrentarse a Him, no solos al menos. Solo se le ocurría una persona en quien podrían confiar, una persona a quien recurrir y no estaba tan seguro de la idea aún.

—Supongo que podríamos empezar desde cero, ya sabes, conocer gente, hablar con los habitantes de la ciudad.

—Sí, pero, ¿cómo? No tenemos donde quedarnos, no tenemos quien hable por nosotros. Somos seis chicos de 16 años y dos adultos a los que nadie ha visto en la vida, ¿cómo nos acercamos a la ciudad?—Brick abrió la boca, pero luego la cerró instantáneamente, negó con la cabeza para desechar la idea, pero Blossom capto el gesto y no estaba dispuesta a dejar de oír alguna que otra idea—. ¿En qué piensas?

—No, no es nada.

—Tiene que ser algo, es una idea Brick, si nos puede ayudar, es bienvenida.

—No creo que sea buena idea Bloss.

—No tiene que serlo, solo tiene que darnos la oportunidad de entrar a la ciudad, luego podemos contactar con el alcalde. No somos chicos cualquiera Brick, podemos lidiar con eso, sea lo que sea.

—Deberíamos hablarlo con los chicos primero.

—Brick, estás dando rodeos.

—No quiero ponerlas en peligro.

—Brick, vivimos con una bomba enterrada en el patio once años de nuestras vidas, no se me ocurre algo más peligroso que eso, yo leía justo encima de donde estaba enterrada, justo al lado de la fuente.

—Vale, vale, pero no pienses nada raro.

— ¿Por qué lo haría? ¿Qué podría pensar?

—Ya lo verás—Brick inspiró hondo y luego dejo salir el aire de sus pulmones, acompañado por su sugerencia—. ¿Estarían dispuestas a ir a la casa de mi madre?

¿Reviews?

Yyyyyyyyyyyyyy por aquí lo voy dejando

No me malinterpreten, tengo más capítulos listos, pero quiero corregir unos cuantos errores antes de poder publicarlos, la espera tiene que valer la pena y de nuevo milllllllllll disculpas por hacerlos esperar tanto, me convertí en lo que más odio, prometo no volver a abandonarlos de esta forma

Así que disfruten estos capítulos nuevos y estaré continuando la historia muy pronto, no se preocupen, esta loca no los volverá a abandonar.

Los quiero :3