Gracias Zai por ayudarme con el beteo de este fic, Te quiero.
DISCLAIMER: Todos los personajes pertenecen a Stephenie Meyer.
Summary: Una vida perfectamente planeada, un futuro trazado. Sí, lo tenía todo, ¿entonces qué hago con dos niños y un hombre? Edward es un padre soltero que busca iniciar una nueva vida en una ciudad diferente, Caroline y Seth -sus hijos- han detestado a todas y cada una de las mujeres que a lo largo de seis años se han insinuado a su padre, cuando conocen a Bella, su mundo se vuelve patas arriba debido a que ella transmite seguridad y fragilidad.
Vidas cruzadas
Capítulo beteado por Zaida Gutiérrez Verdad
Betas FFAD www .facebook groups / betasffaddiction
Capítulo 1
.
.
Edward.
Empacamos cada una de nuestras prendas y abandonamos el que por seis años fue nuestro hogar.
Mis hijos dormían en el asiento trasero del auto, abrazados a su oso Goober.
Teníamos que volver a empezar.
Cuando me enteré de que era padre –mejor dicho, cuando recogí a mis hijos del canasto en la que Esme los habia dejado- a través de una mísera carta, supe que mi vida cambiaría. No la llamé y tampoco la busqué, sólo tomé a mis pequeños y encontré un nuevo sitio en donde vivir.
Ahora, seis años después, Esme vuelve y dice estar arrepentida por habernos abandonado, pero yo sé que lo hace porque ese medicucho con el que se acostaba la abandonó.
No iba a exponer a mis hijos de esa forma, ¡eran míos!, desde el primer instante en que los cargué se convirtieron en mi vida entera. No negare que pensé que no sería capaz de cuidarlos, tenía diecinueve años cuando Esme nos dejó, no tenía empleo y estaba en la universidad, pero cuando se quiere se puede. A mis veinticinco años, me considero una persona madura y capaz de cuidar a mis hijos de seis años.
Estacioné en el aparcamiento del aeropuerto, me bajé y abrí las puertas traseras, con delicadeza moví los hombros de mis hijos, quienes abrieron sus ojitos y sonrieron.
—¿Ya llegamos? —preguntó Caroline, pasándose la manita por la cara.
—No, aún no, estamos en el aeropuerto. Despierta a tu hermano mientras saco las maletas —pedí, mi niña asintió y yo me dispuse a bajar todo el equipaje.
Los cuatro –Gooberincluido- estábamos ya en el avión, Caroline se encontraba a mi lado derecho, mientras que Seth estaba recostado en mi brazo izquierdo y Goober en medio.
—Papi, ¿volveremos algún día? —preguntó Seth.
—No lo sé hijo, por el momento es necesario que vayamos a Forks —aclaré—. Lamento estropear tanto sus vidas chicos —me sentía realmente abatido, mis hijos habían crecido aquí, no tenían amigos, pero ya estaban adaptados a este ritmo de vida
—No papi, no estés triste, sabemos que lo haces por nuestro bien. Recuérdalo, a donde vayas, nosotros te seguimos —aseguró Caroline, besé el tope de sus cabezas y a los pocos minutos se durmieron.
.
.
Bella.
La noche estaba a punto de caer y yo seguía en la misma posición desde hace horas.
Quizá Charlie tenía razón y lo mío no era trabajar, no lo necesitaba. Mis padres tienen mucho dinero, lo suficiente para que ni mis hijos, por ahora inexistentes, no yo, vivamos sin preocuparnos hasta morir.
¡Pero no!, como la gran idiota que soy, había querido demostrarle a Alice que yo, Isabella Swan, era totalmente capaz de conseguir un empleo y pagar mis cuentas y aquí estoy, en un lujoso apartamento sin nada en la refrigerador, con un trabajo mediocre y viendo «Remember me».
Quizá así como la describo mi vida suene vacía y frívola, pero era la que me habia tocado. Mi familia está compuesta por Charlie Swan, un importante empresario, dueño de casi todo Nueva York, con empresas en todo el mundo y está casado con Renée, ella y yo jamás podremos estar en una habitación por más de un minuto sin agredirnos.
Desde que tengo memoria, Renée me ha tratado como un objeto en venta, presentándome a los hijos de sus amigas, enviándome a aburridas fiestas, arreglándome citas con chicos adinerados y un cerebro más pequeño que una semilla.
Charlie y ella sin duda son polos opuestos y es algo increíble que hayan aguantado veinticuatro años sin sacarse los ojos. Mi papi, a pesar de ser multimillonario, no pierde ni perderá la humildad jamás, algo que, en el caso de Renée, ya sucedió, apenas se casó con mi padre empezó a despilfarrar en cosas sin valor.
Asi que, ¡aquí estoy!, desafiando a mi madre y viviendo por mi cuenta.
Mañana empezaría con un nuevo empleo, en una nueva ciudad y con una vida totalmente diferente a la que acostumbro.
¡Hola chicas!, Eh empezado esta nueva historia con la ayuda de mi amiga Zaida — Mi beta adorada—, espero les guste y me sigan.
PDT.- El sábado subo el capítulo final de IN THE SHADOWS.
Besos.